Cap. I: Promesa

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- Sore, ¿Que pasaría si nos separáramos?- Era una tarde tranquila. Sorenix y yo nos encontrábamos en el tejado del Jordan College. Mamá es una criada y trabajaba en la cocina del college. El trabajo no es muy apetecible, pero claro que gracias a eso, nos dan una habitación diminuta en el establecimiento. Cierto, parece poco, pero es lo mínimo que se puede pedir; un hogar. Mamá es pobre. Y esto es lo mejor que podemos conseguir.
El pelaje del zorro centellaba a la luz del crepúsculo, sus ojos oscuros fijos en los demás tejados del Jordan.
- No lo sé- Respondió el daimonion. En aquel momento me miro a mi, con una luz temorosa en sus ojos. -Mamá dice que es peligroso que un humano y su daimonion se separen.-
-¿Pero peligroso en qué sentido?¿Podemos hacernos daño o algo parecido? ¿Puede ser peor que alguien que no sea  yo te toque con las manos desnudas?- Contesté yo. Me voltee para ver a Sore. Desde pequeña, mamá me había dicho que nunca dejará tocar a Sorenix por otra persona. Y mucho menos  con las manos desnudas. Los daimonion no pueden soportar el tacto de otra persona que no sea su dueño o, eso creo. Él se miraba las patas, las orejas bajadas.
- Te puedo perder- Contestó Sorenix- O tú me puedes perder a mi- Una brillante lágrima resbaló de su ojo.
-¿Tienes miedo?- Le pregunté, hechándole una mirada melancólica.
- ..... tal vez....- Contestó. Volvimos a mirar el sol escondiéndose tras los tejados del Jordan.

El silencio entre nosotros se volvió afligido, antes de que Sore se girara hacia mí bruscamente.

- ¡Skylar Kaish, prométeme que no te separarás de mí!- Exclamó, los ojos vidriosos. Le sequé una lágrima que caía por su hocico y, seguido, le abracé.
- No me separaré de tí nunca, Sorenix.

Te lo prometo.

Siempre A Tu Lado (La Brújula Dorada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora