Era lunes, nuevamente, la semana volvía a comenzar, y Jaemin seguía sin ganas de estar en ese estúpido instituto. ¿Qué más daba si no estudiaba? Podría ganarse la vida sin saber como sumar números con letras o tener conocimiento sobre los pares homólogos.
Pero nada podía hacer, por mas rebelde que fuese, tenía que entrar a la clase de matemáticas porque, una vez dentro del edificio, no se tenía permitido salir del mismo hasta que concluyesen las clases.
El coreano entró en el gran salón y se sentó en el primer banco que encontró, pero uno de sus compañeros, de ojos pequeños y algo tímido, le dijo que ese lugar le pertenecía. Al parecer la profesora había dicho que los lugares, de la clase pasada, serían fijos; por supuesto Na Jaemin tenía la cabeza en otro lado.
Caminó hasta el lugar en el que recordaba haber estado sentado, hace ya una semana, y tomó asiento.
La profesora, o como Jaemin preferiría decirle "La vieja amargada", entró, saludó a los alumnos y dió un par de ejercicios para que resolvieran en la primera hora, y corregirlos en la siguiente. Sin embargo todos sabían que no llegarían a hacerlo ya que eran demasiados y seguramente quedasen de tarea para la próxima clase.
Na no quería hacerlos. No tan solo porque no tenía ganas, sino porque no los sabía resolver.
Sin saber que hacer, miró hacia el banco; ¿En esa escuela nadie limpiaba las aulas a caso? Los garabatos hechos el lunes pasado, seguían intactos.
Pero hubo un detalle que hizo a Jaemin abrir los ojos tan grandes como pudo.
Alguien había escrito una respuesta a cada uno de ellos; que extraño...
Leyó la primera respuesta.
"Que grosero. Y si me disculpas, necesitas saber que asistes a la escuela para estudiar y ser alguien el día de mañana. Te recomendaría que pongas un poco de interés."
Auch. Aunque si se ponía a pensar, ¿quién se creía ese para decirle que hacer? Tampoco estaba en lugar decirle que era correcto hacer, ya que "el señor perfecto, me encanta la escuela" se encontraba cometiendo un "delito escolar", al igual que él, ya que había escrito en el banco para responderle.
"Y tu quién eres para decirme que preste atención? Además, tú tampoco lo hacías; estabas respondiendo esta nota"
"Igual dudo que la vaya a leer" pensó el pequeño, mientras mordía su lápiz y seguía leyendo la otra respuesta.
¿Acaso ese chico estaba bien? ¿Que si prestaba más atención a estúpida de su profesora la clase se haría mas llevadera?
Pfff, ya quisiera.
Ahora quedaba tan sólo una respuesta que leer.
"Créeme que no es nada del demonio, pero si aún no lo entiendes, puedo ayudarte :) ¿Qué dices?"
Okey, estaba bastante irritado por la actitud de ese chico antes, pero ahora, sentía algo extraño en el estómago.
Aquel extraño le estaba ofreciendo su ayuda desinteresadamente, estaba perplejo. Además enserio apreciaba su oferta, necesitaba de manera desesperada entender ese tema o su profesora lo comería vivo.
Así que sin pensarlo dos veces respondió.
"Realmente harías eso por mí? Digo, no me conoces...cómo es que sabes que no soy un violador del bosque? Acaso tu mamá no te advirtió que no debías enseñarle las dichosas expresiones algebraicas a cualquiera? ahre. Pero hablando enserio, gracias.
Y sí, me gustaría que me enseñases. Soy capaz de hasta besarte si logras que entienda esa cosa china xD"
Jaemin concluyó el casi testamento que había escrito, esperando que su posible tutor no mal interpretara su chiste.
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Gente hermosa que lee este intento de fanfic, sepan que lxs quiero mucho ahekfkfn♡
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Desk » Renmin
أدب الهواة«Na Jaemin amaba romper las absurdas reglas de su instituto. En especial la que prohibía escribir en los bancos; pero nunca pensó que, de esa manera, conocería a una persona maravillosa, Huang Renjun.» ☁️ Huang Renjun x Na Jaemin ☁️ Capítulos cortos...