2

3.4K 253 104
                                    

  YO NO BESO RANAS

Cuando me mude aquí me dijeron que tenía que tener algo claro, habían dos bandos que dominaban la ciudad y si algo tenías que saberte de memoria era que ellos podían arruinar tu vida de manera permanente, ninguno buscaba nada serio en sus relaciones de una noche. Cada uno era un caos, algo que por el simple hecho de cruzarte en su vida en el momento menos indicado podía hacer que fuera el fin de todo lo que conocias o conociste alguna vez de por vida.

El fin de tu vida.

Siempre creí que yo era demasiado exagerada hasta el momento en el que ambos bandos comenzaron a introducirse a mi vida.

Un bando era más peligroso que otro; por una parte estaba el de Darwin y en el otro los chicos malos... Esos que dominaban a toda la ciudad y si te metías con uno era meterse con todos.

Solo tenias que tener algo claro y era la regla mas importante para las chicas.

No

Te

Enamores

De

Ellos.

Miro a los chicos que se encontraban al fondo del café, me asustaba ir con ellos, demasiado, me forme para pedir un café y espere a que los chicos se cansarán de esperar por mí y se fueran, no ocurrió.

Camine con lentitud a la mesa de al fondo y no dije nada hasta estar a su lado, algo tenía claro, Caleb me había mentido, porque para hablar de Drey no era necesario tener a los cinco malos aquí. Hice una mueca cuando llegue, no obstante antes de hablar ellos lo hicieron primero.

—Hola Julieta.-Dijeron al mismo tiempo, haciendo que una pequeña sonrisa saliera de mis labios, tenían una coordinación al hablar que seguro no era la única que pensaba que lo tenían ensayado.

—Hola chicos.- murmure, trataba de pensar el por qué todos estaban aquí, pero nada llegaba a mi cabeza, no tenía sentido.

A menos de que fuese una emboscada.

— ¿No te sientas?- Pregunto uno de los gemelos a lo que negué, estaba bien parada.

—Yo creí que...

—Hablaremos de Drey, no te mentí.-Dice con una sonrisa. — Por cierto, ¿Ya termino con el payaso ese?

Reí, Luke era un patán y por eso era conocido de esa manera, cuando llegue aquí, pude notar que todos recibían apodos, si se daban a conocer bien, asentí en su dirección y vi como sus ojos destellaban un brillo, después de unos segundos me senté.

—No era solo para hablar de Drey, ¿Cierto?

Se miran entre si y Gael niega, suspira y me mira con una mueca. —Resulta que...

Siento como un líquido frio recorre mi rostro bajando poco a poco, dejando un camino entre mi cuello y espalda.

— ¡Rayos!

Me levante con rapidez, quitando el cabello que se me había pegado al rostro, encontrándome con tres chicos que reían con fuerza.

— ¡Qué les ocurre!

Los cinco malos se levantan y los miran amenazadores, Uriel se acerca a ellos y toma al que me tiro la malteada encima de la camiseta, lo alza y le mira desafiante. —Antes de que te rompa la cara, dime por qué hiciste esa maldita estupidez.

Te ayudare a destruirme (NSCM) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora