//What We Wanted To Forget// (Snowbaz)

Capítulo 10

Simon estaba sudando. Le dolía todo el cuerpo y ya no se sentía cómodo, ya no sabía cómo sentirse en realidad

-Agh... Agh- gemía

-Simon...- escuchaba decir a Baz, pero no se podía mover, era como si estuviera a kilómetros de distancia de Baz

-¡Simon!- gritó Baz, desesperado

-¡Simon despierta!- dijo finalmente y Simon logró despertar de esa pesadilla que lo tenía prisionero desde hace varias lunas.

Se levantó jadeando y fue al baño. Ignoró la mano que Baz le tendía para ayudarlo a estabilizarse.

Salió de la ducha y se cambió rápido, quería hablar con Baz.

Baz se encontraba sentado en el sillón de la sala, esperando a su novio, sabía que necesitaban hablar sobre los problemas nocturnos del ex-elegido

Simon se sentó lo más cerca que pudo de Baz y se recostó en su hombro.

-¿Qué soñaste amor?- dijo Baz a secas

Snow suspiró

-Soñé con una mujer... Estaba gritando... Dando a luz a un bebé en la torre del Hechizero. Decía mi nombre una y otra vez. El Hechizero le gritaba y le decía que no dejara morir al bebé o la mataría. Fue sádico- dijo

Baz asintió y atrajo a Simon más a sí, apoyando su barbilla en la cabeza de Snow

-Fue solo...-

-Un sueño, lo sé- interrumpió Simon

-Iba a decir una visión, pero bueno- dijo Baz

Simon frunció el ceño y volteó a ver a su novio

-¿Visión?- preguntó

-Tal vez alguien busca decirte algo- dijo el vampiro

A Simon no le extrañaría eso, no sería el primero al que algún muerto le habla por medio de visiones. La incógnita siempre es "¿Porqué yo?"

Simon sabía que quién le enviaba el mensaje era la mujer... En cierta forma sentía que la conocía. Su voz se le hacía familiar.

La primera vez que soñó con ella, se despertó pensando en la palabra "Mamá".

Puede que supiera qué significaban esos sueños. Puede que Snow supiera el significado de todo pero, ¿Estaba listo para admitirlo? ¿Su mente quería aceptarlo?

Sometimes to stay alive you've got to kill your mind

Lucy se había cansado de esperar, pero Simon era capaz de esperar toda la vida.

Pero no puede seguir huyendo y lo sabe. Todos lo saben.

Simon y Baz se quedaron en silencio porque ninguno era capaz de decir lo obvio. No eran estúpidos, sabían a lo que se estaban enfrentando y por eso nadie decía nada.

Ya era momento de sincerarse... Todos