Desde que estamos juntos ~Tododeku Week 2018~

Día 3: Confianza

El invierno ya había azotado. Algunos de los arboles comenzaban a perder gran parte de sus hojas por el enorme y fuerte frio que se asomaba. Ya había pasado un buen rato desde la creación de los dormitorios. Para suerte de los estudiantes, cada cierto tiempo se les otorgaba un breve descanso de aproximadamente una semana, durante este receso es preferible que lo ocupen para visitar a sus familias al menos por algún rato, o bien pueden gastarlo en lo que ellos deseen. Incluso pueden permanecer en los dormitorios de la institución si así lo desean. Lo importante es que despejen un poco su mente de tanto esfuerzo y contacten con sus seres queridos.

Todoroki:

La semana de descanso había concluido.

Cuando nos avisaron de ésta tenía algunas dudas de si volver a casa o quedarme en la escuela. Desde hace tiempo no había contactado con mi Viejo, por ello no sabía que me esperaría al volver. De todos modos, no importaba mucho, bien podía hacer como si nada o ir a donde Mamá con mayor frecuencia... si "esa" persona no estaba ahí... que caso tenia quedarse.

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-Ah ¡Qué bien! Podemos tomarnos un descanso- *palabras como esas salían de la boca de casi todos los ahí presentes.

-Oye Todoroki-kun ¿Qué es lo que harás?

Decía el pequeño peliverde que, desde el punto de vista de su contrario, se veía incluso más hermoso que de costumbre.

-A decir verdad, volveré a casa.

- ¿En serio?

-Si. Creo que no estaría mal volver debes en cuando. Además, podré visitar a mamá por mas rato.

-Ah ¡Eso es genial! - *sonríe

-Y ¿tu, Midoriya? ¿Tienes planes?

*Rascándose la barbilla –Si, algo así. También iré donde Mamá, ella debe estar muy feliz de verme.

-Debe preocuparse mucho por ti.

- ¡Si! *dijo un poco emocionado y a la vez apenado –Ella... siempre ha sido así.

Cuando Todoroki notó un poco de tristeza emanar de la cara de su acompañante, se levantó de su asiento para darle una pequeña palmada en la cabeza en forma de consuelo.

-Ella estará muy feliz

-Si. gracias.

Ambos jóvenes comenzaron a salir del salón de clases, una conversación común se formaba entre ellos. Hasta que uno decidió llevarla por otro camino.

-Oye Midoriya

- ¿Qué pasa?

- ¿Crees que... podamos salir juntos? Durante el descanso.

El más alto de ellos se apenó un poco por lo dicho en ese instante, pero realmente ansiaba pasar, aunque sea un tiempo junto a su pareja.

-Enserio ¡Lo siento! *mientras juntaba sus manos en forma de disculpa.

- ¿Por qué?

-Durante esta semana... tengo algo que hacer. Y es probable que Mamá se preocupe si salgo de momento cuando es un descanso o que ella quiera hacer algo juntos. Por eso... perdón.

- ¿Es como si estuvieras encarcelado?

-Nada de eso, pero... Si algún día llegas a conocerla entenderás a lo que me refiero.