Louis se quedó ahí sentado y mirando indefenso al tumulto de gente que lo rodeaba, ahogándolo, más de lo que estaba. Estaba feliz, haber vuelto a la vida, pero a la vez triste; Vio como Harry se escurría entre la gente, cómo volver a verlo, ¿cómo?...
Todo estaba mal, todo daba vueltas en su cabeza, estaba mareado, no podía creer que se había enamorado de una persona tan fría y estúpida como Harry. Si, enamorado, pero aún así lo insultaba. Louis realmente creía que Harry era un estúpido por enamorarse de Liam, era demasiado obvio que ese Liam lo mantenía cerca de él por egoísmo, si realmente lo amara lo dejaría libre, dejarlo amar a otras personas.
Un nuevo sentimiento apareció en él, la contradicción. Hace solo unos instantes había descubierto “la verdad” Nada existía, ni el amor… cómo podía estar enamorado sabiendo que el amor no era más que una estúpida ilusión que Dios había creado para mantenernos “ocupados”.
La duda. Así se sumaba a la lista de sentimientos que pasaban por la cabeza de Louis. El amor si existía, esa era la razón porque también aún “existimos”. El amor que deposita Dios en nosotros nos hace vivir, vivir en esta ilusión. Si Dios se aburriera y nos dejara de amar acabaría con todo este juego llamado “Vida” y despertaría de su sueño. Decepción, sentía por no poder seguir a Harry, correr tras de él, con suerte puede respirar debido a su nariz rota, probablemente también una costilla y le sería prácticamente seguirlo entre toda esta gente, pero no se daría por vencido, no. No se quedaría ahí sentado para toda la vida, seguiría y perseguiría a Harry incluso hasta el mismo infierno, se lo prometió.
Louis fue llevado en una ambulancia hasta el hospital más cercano, limpiaron y estabilizaron el estado de su nariz. Por suerte su costilla no estaba rota y solo habían contusiones, debido a eso se tuvo que quedar en el hospital aproximadamente una semana. Esa semana Louis no paró de pensar en Harry, no sabía cómo encontrarlo, pero una súbita idea lo dejo llevar, se levantó de su cama en el hospital y se dirigió al baño.
-Ok Louis, tranquilízate –Se decía a sí mismo, tratando de convencerse de lo que haría, ahí se encontraba, al frente del espejo, a punto de volver a desafiar al mismo Diablo pero todo sea por Harry…
-Harry… -Respiró Louis asustado. – Harry… -Solo uno más y nuevamente se vería envuelto en esos gritos, olores y sufrimiento. –Harry… -Dijo al fin Louis quien cerró los ojos y esperó pacientemente… mas nada pasó. Abrió un ojo imaginándose lo peor, aún se encontraba en los servicios del hospital, miró hacia todos lados.
-¿Harry?- Preguntó en voz alta el ahora extrañado Louis. – Algo falló, puede que no se aparezca dos veces a una misma persona, eso debe ser… -Pensaba en forma de hipótesis Louis.
En los siguientes días el ojiazul aún se trataba de explicar la razón por la cual el de rulos no llegaba, pensaba que lo que hacía era estúpido, pero no se daría por vencido. Por fin salió de alta pero con licencia por un tiempo. A la salida del hospital la mente de Louis iba ocupada en que transporte tomaría a casa y mientras buscaba a su alrededor vio una conocida cabellera de rulos, los recuerdos vinieron a su mente, horribles y “hermosos” recuerdos. Se acercó para ver más de cerca a la persona que se encontraba sentada dándole la espalda al hospital probablemente esperando a alguien.
-I, Imposible… ¿Harry?
El chico se dio la vuelta con una sonrisa, demasiado inusual en su rostro.
-¿Vienes a buscarme Harry? -Preguntó Louis.
-¿A buscarte? No me digas que me llamaste de nuevo… que masoquista Louis –Bromeó Harry.
-Esto debe ser un sueño…
-No, no es un sueño y no nuevamente, no te vine a buscar, vine para quedarme.
-Pero ¿cómo?
-Gracias Louis, me salvaste… -Los ojos de Harry se veían diferentes, ya no se veía ese sufrimiento, esa pesada carga que llevaba en su conciencia, era libre…
Louis se sentó a su lado mirándolo fijamente a los ojos, sin si quiera disimular su sorpresa.
-Estoy perdido –Continuó Harry. –Mi vida iba del infierno hasta el mundo terrenal, pero nunca me encontré tanto tiempo en él, supuse que estarías en un hospital, me quedé acá a esperarte… todos los días, no preguntes donde dormí o comí, eso es asunto mío.
-Harry yo… yo te tengo que decir algo muy importante… -Al no escuchar una respuesta por parte de Harry prosiguió. –Cuando te vi no creí que vendrías en realidad, me asusté, fue obvio, pero hubo y hay algo en ti que me encantó, sé que tu corazón corresponde a otra persona pero yo… yo me enamoré de ti. Completamente de ti, tus rulos, tus ojos y ahora puedo decir que tu sonrisa. –Dijo avergonzado Louis.
-Cuando entraste por esa puerta hacia el círculo de la verdad –Dijo Harry, Louis creyó que éste había cambiado de tema sintiéndose decepcionado. –Yo te prometí pensar en lo que me habías dicho, y lo cumplí. Me di cuenta que Liam solo me usó, y no es todo su culpa, yo estaba cegado, cegado por el amor en donde no se puede amar. Pero me salvaste, hice lo que me dijiste me repetí a mi mismo que lo sentía y que me arrepentía de lo que había hecho y finalmente me lo creí y fue lo mismo que he hecho todo este tiempo, convenciéndome a mí mismo que estaba enamorado de Liam y hasta llegué a creérmelo. El egoísta no fue sólo él, yo también, pero todo tiene una razón… Tú Louis. Tú. –Dijo Harry mirando fijamente esos penetrantes ojos azules.
-¿Y-Yo?
-Sí. Cuando te vi. Mientras caminábamos por el infierno, en mi mente estaba la idea de que yo amaba a Liam, sólo a Liam, por él estaba ahí, auto convenciéndome, porque me asusté. Y hasta probablemente estaba igual de asustado que tú y todo fue por ti. La idea de enamorarme de otra persona que no fuese Liam me asustó.
-¿Enamorarte?
-Si Louis, yo también estoy enamorado de ti. –Louis esbozó una sonrisa y una alegría inexplicable lo invadió. -Me quedaré para siempre a tu lado ahora que los dos tenemos una nueva oportunidad, imagínalo, tú con una nueva oportunidad de vivir y yo con una nueva oportunidad de amar.
-Mi vida ahora es tuya –Dijo Louis quien seguía con una efusiva pero tierna sonrisa.
- Y mi amor es tuyo ahora. –Respondió Harry quien estaba tan alegre como Louis, sonriente igual que él.
Louis no dudó en acercar más su cuerpo al de Harry, entrelazaron sus manos y que estuvieran sentados no fue un impedimento, los dos acercaron sus caras hasta el punto en que sentían sus respiraciones y lentamente se besaron, un beso lleno de deseo y ansias, lo esperaban desde hace mucho tiempo, amor a primera vista. Los cálidos labios de Harry jugaban con los de Louis, éste para profundizar el beso dio paso a una lucha de lenguas que parecía interminable, paraban, y volvían a besarse. Se miraban directo a los ojos y se exploraban el uno al otro.
Los ojos son la ventana al alma, dicen. Y ellos solo podían ver amor el uno por el otro.
Quién diría que por 50 euros estaría a punto de vender su alma al Diablo, que por 50 euros conociera al temido Harry, que por 50 euros encontrara el verdadero amor… Después de todo no sólo vendió su alma si no también entregó su corazón. Todas las promesas estaban cumplidas, y lo mejor es que Louis si pasaría la eternidad junto a su amado Harry disfrutando cada uno de los momentos, caricias, besos de Harry y todo por atravesar el espejo.
FIN
_______________________________*NUNCA PIERDAN LA FE EN LARRY, EN CUALQUIER MOMENTO PUEDE OCURRIR ALGO, MEJOR DECIR "YO SIEMPRE LOS APOYÉ Y CREÍ EN ELLOS" A QUE HABER DESISTIDO AL ÚLTIMO MOMENTO Y QUE JUSTO OCURRA LO QUE TANTO ANHELAMOS" BYE <3
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Atravesando El Espejo
FanfictionDicen que si invocas su nombre tres veces, delante de un espejo, su fantasma se te aparece. Los que lo han intentado han muerto en extrañas circunstancias porque el Novio del Diablo viene a buscar a los que la invocan para llevárselos al infierno.