Yokozawa lo vio entrar al baño, hizo lo mismo y luego de cerciorarse que no había nadie, colocó el letrero de "Fuera de servicio" que había tomado del cuarto del conserje y guardado en su portafolio por la mañana. Desde que Takano le había dicho lo que planeaba y luego de escuchar "casualmente" la charla de Onodera y Misaki, enterándose que planeaba ir al bar, algo dentro de él, se rompió y vio la oportunidad de hacerlo finalmente a un lado, ni siquiera pensó en Kirishima, su hija...ese tiempo juntos, todo, todo se borró de su mente en el instante que vio ante sí, la posibilidad de romperle el corazón a Takano, y que lo viera a él, como la persona que siempre estaría a su lado, pasará lo que pasará. Suspiró, no daría marcha atrás...
-Yokozawa san-dijo Onodera a manera de saludo-
-Onodera...
-Este...permiso-dijo acercándose al lavabo-
-Takano me contó...
-¿Por qué no me extraña?-pensó Onodera- ¿Qué fue lo que le contó?
-De su propuesta de trabajo y de lo que te pediría hoy...
-Sí, de hecho...voy para allá-dijo feliz-
-No-dijo Yokozawa temblando de rabia- no iras...
-¿Disculpe?
-Tú no eres la persona que Masamune necesita...
-No es asunto suyo-dijo cometiendo el error de darle la espalda-
Avanzó un par de pasos cuando sintió el brazo de Yokozawa reteniéndolo por la cintura, su mano cubrió su boca y nariz con un pañuelo de olor desconocido para él, quiso gritar, pero el agarré se afianzo más...
-No te resistas, Onodera, solo respira, tu no vas a llegar esta noche a la cita con Masamune, tu no mereces su amor...
Onodera se removió, su garganta se desgarró intentando gritar, pataleó e intentó con mucha fuerza soltarse, fuerza que poco a poco fue perdiendo, vio la imagen el en espejo, Yokozawa lo sujetaba en su rostro se reflejaba un rictus malévolo y decidido y se vio así mismo, luchando por no cerrar los ojos, pero el sedante hizo su trabajo y el perdió el conocimiento...
Yokozawa lo arrastró lo más lejos posible de la puerta, le metió un pañuelo en la boca y lo sostuvo con otro que ató con fuerza, le amarró las manos y de pronto, se dio cuenta que no llevaba nada más, Onodera no usaba corbata, suspiró fastidiado y se quitó la corbata para atarle los pies, le sacó el celular del bolsillo y lo apago dejándolo sobre el lavabo. Le puso seguro a la puerta y salió del baño, con aire de satisfacción, se fue a su oficina...
Takano llegaba al bar a las 19:50, no había pasado por el departamento de manga, de la reunión se fue directo al bar y buscó una mesa, desde donde pudiera ver a la gente que entraba, se sentía nervioso, esa noche se definirían tantas cosas en su vida. La hora acordada llegó y desde ese momento el miraba ansioso cada vez que la puerta se abría, ansiedad que se convertía en decepción cuando no era su adorado niño el que cruzaba la puerta...
20:10...
20:15...
20:20...
20:30...
¿Debería llamarle? No...
20:40...
Solo unos minutos más...quizá algo lo entretuvo en la oficina...
20:50...
21:00
Yokozawa entraba con aire despreocupado, lo vio sentado y se acercó...
-¿Qué ocurre? ¿Onodera fue al baño?...
-Onodera tomo su decisión...-dijo con amargura y Yokozawa llamó al camarero ordenado bebidas para los 2-
-¿Debo felicitarte?
-Por mi nueva vida en Nueva York-dijo levantando su vaso para brindar, sus ojos estaban cristalizados...
-Masamune, yo...lo lamento en verdad.
-Es un riesgo que corrí y perdí, es la vida ni más ni menos.
-Sabes que yo siempre he estado para ti, en espera de que tu...
-Yokozawa, no...además tú ya tienes una relación estable con Kirishima...
-Eso, bueno, fue algo, fue para tratar de olvidarte y que fueras feliz con Onodera, pero él no te valoró...
-Yo fui quien se hizo ilusiones que él no compartía, es mi total responsabilidad...
-Eso no es verdad, todos pensábamos que te correspondía, la manera en que llevaban su relación no era incumbencia de nadie...
-Y aquí estoy ahora, contigo a mi lado, como siempre-dijo suspirando-
-Déjame ir contigo-dijo luego de un momento de silencio-No digo que correspondas mis sentimientos, solo déjame estar a tu lado, demostrarte que yo si...
-¿Y Kirishima?
-A él lo quiero, pero a ti...A ti te amo, Masamune, y no me da pena decirlo, ni me cuesta trabajo repetirlo las veces que necesites oírlo...
-Haz las reservaciones para el lunes...
Yokozawa tomó su mano emocionado...
-Gracias, no te vas a arrepentir...
-Estoy seguro que no, gracias Yokozawa y perdón por no valorarte...
Onodera abrió los ojos, poco a poco fue tomando conciencia de su situación, todo estaba oscuro y el piso estaba helado, intento sin éxito desatarse para salir de ahí y... ¡Takano! Se desesperó más ¿Qué hora era? No escuchaba ningún ruido... ¿Cuánto llevaba ahí? Gritó, vaya si gritó, pero esa mordaza impedía que su clamor por ayuda se escuchará y tuvo miedo, no era pasar ahí el tiempo que lo fuera a hacer, era que no había podido llegar con Takano, era el dolor que comenzaba a sentir, no solo en el cuerpo, si no en el alma. Yokozawa le había impedido llegar a reunirse con Takano, él pensaría que no había llegado y que su respuesta era un NO a su propuesta, después de eso, sabía que no había marcha atrás...conocía de sobra a Takano Masamune para saber que nunca más le permitiría hablar con él. Las lágrimas comenzaron a brotar incontenibles, si él hubiera tenido el valor de decir "Te amo" a tiempo, no estaría en esa situación. Lo había perdido todo...
Se había quedado dormido y despertado varias veces, no sabía que día o qué hora era, los fuertes amarres le estaban pasando la factura, tenía constantes calambres y sus ojos llorosos delataban fiebre... ¿Cuánto más?
Sí se pudiera soltar y llegar al departamento de Takano ¿le daría la oportunidad de explicarle?
Lo más probable sería que no, pero tenía que intentarlo ¡Sí tan solo los amarres cedieran un poco!
Takano había llegado a su departamento, estuvo por un segundo tentado a llamar a la puerta de Onodera, pero recordó su promesa de respetar su decisión, y entró al suyo, comenzó por empacar su ropa y sus libros, Hatori se los llevaría y le enviaría de a poco las cajas con ellos, los muebles los vendería y con ese dinero pagaría el traslado de lo que planeaba llevarse además de su ropa.
La mañana del sábado la dedicó a escribir su renuncia y cartas de agradecimiento que pensaba enviar por correo, el sonido de su teléfono rompió su dialogo interno...
-Tengo las reservaciones, lunes 18:45...hablé con Isaka para darle mi renuncia...
-¿Estás completamente seguro?
-Como que te he amado los últimos 10 años de mi vida...
-Te veré en el aeropuerto, así podremos tener estos días para arreglar los pendientes más urgentes...
-Claro-dijo parado frente a una joyería, viendo anillos- debo hacer algo, te llamo más tarde, iré a empacar...
Luego de esa llamada, decidió que tenía tiempo de ir un momento el lunes a la oficina, recoger sus cosas, entregar su renuncia, despedirse...Onodera estaría ahí y le diría adiós, mirándolo a los ojos...

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Decisiones...
FanfictionTakano recibe una oferta de trabajo en Nueva York y le pide a Onodera que defina sus sentimientos hacía él...de esa definición, dependería su futuro... Es una historia corta y esta completa, tenía muchas ganas de escribir sobre estos personajes, que...