하나 / Uno

3.6K 216 27
                                    

La luna se encuentra en su más perfecto apogeo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La luna se encuentra en su más perfecto apogeo. Su luz tiñe las apagadas calles de mi barrio y baña cada rincón.
Observo, a través de mi ventana, con paciencia la casa vecina, habitada por Yoongi, un compañero de clase al que absolutamente nadie se acerca. Hoy, estando en plena lección de historia me dijeron que siempre sale a las doce en punto hacia un lugar que todo el mundo desconoce, por ahora.

-Ni se te ocurra acercarte a ese tipo Phoebe. Dicen que está loco y es peligroso -me había advertido Kim antes de entrar a la cafetería.

-Es guapo -afirmé mirándolo.

-Pero peligroso. Muy peligroso -volvió a advertir.

-¿Te lo ha dicho él acaso? -pregunté con una ceja enarcada.

-No. Pero aléjate de él y punto.

Espero un minuto más a que dé la hora indicada y me escondo entre la cortina y la pared al verlo salir justo a en punto. Veo como poco a poco su silueta va desapareciendo a lo largo de la calle y cuando lo hace por completo suspiro y vuelvo a la cama resignada.

Una extraña sensación me invade. De un salto me pongo en pie. Me calzo mis Converse desgastadas y con movimientos gráciles y ligeros consigo salir de mi habitación, situada en el segundo piso, sin ningún rasguño. Corriendo sigo la dirección que Yoongi ha seguido y al llegar a la esquina de la calle observo con detenimiento hasta verlo girar en otra esquina. Corro de nuevo hasta llegar a dicha esquina y me detengo en seco al no poder divisar a mi compañero. Examino con recelo sin encontrar ni rastro de ninguna persona. Retrocedo un paso para darme la vuelta y volver a casa pero mi cuerpo choca contra algo.

Estoy más que segura que eso no es una pared.

-¿Me estás siguiendo? -pregunta tranquila una voz a mis espaldas.

Traguo en seco y me doy la vuelta lentamente pensando en algo creíble que decir.

-No, estaba dando una vuelta -contesto tiñendo mis palabras de falsa seguridad.

Una sonrisa ladina plasmada en su cara da por hecho que no se ha creído ni una palabra de lo que he dicho.
De repente da un paso acortando la distancia entre nosotros y acerca su cara a la mía invadiendo totalmente mi espacio personal.

-Métete en tus asuntos y no juegues con fuego bonita, porque te puedes abrasar -dice con un tono demasiado tranquilo teniendo en cuenta la situación.

Se aleja completamente de mí y sigue su camino dejándome completamente aturdida. Intento volver a respirar con normalidad y apoyo mi espalda en la pared de al lado para frenar el leve temblor de mis rodillas. Abandono la idea de perseguirle de nuevo y me vuelvo a casa con el corazón prácticamente a mil.

Entro por la ventana y me descalzo. Oigo golpes y gritos en la planta baja, con paso acelerado y sigiloso bajo unas cuantas escaleras y observo en silencio la pelea de mis padres mientras mi hermana pequeña llora desconsoladamente en su cuna. Me debato internamente y finalmente decido coger en brazos a la pequeña Amy. Salgo lo más rápido posible del salón y vuelvo a mi habitación. Mezo a mi hermana en mis brazos y noto como poco a poco su llanto cesa y su respiración se relaja a la vez que lentamente cae en los brazos de Morfeo.
Una lágrima tras otra escapan de mis ojos mientras oigo como mi padrastro golpea a mi madre. Intento no romper en llanto, cojo mis audífonos y con ellos puestos y mi hermana en brazos consigo dormirme.

 Intento no romper en llanto, cojo mis audífonos y con ellos puestos y mi hermana en brazos consigo dormirme

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


-¿Estás loca? -pregunta Kim mientras paseamos por los pasillos del insti.

-Tenía curiosidad, no pude evitarlo -digo encongiéndome de hombros.

-La curiosidad mató al gato -cita-. No vuelvas a hacerlo.

Asiento sin darle mucha importancia y miro al frente distinguiendo a Yoongi entre la multitud. Le miro, pero él a mí no, es como si solo existiera él. Lo veo abrir su casillero y me acerco al mío, el cual está situado al lado del suyo. Lo abro y hago como que busco algo mientras él saca sus libros.

-Siento haberte seguido anoche -me disculpo.

No oigo respuesta de su parte. Le miro y él sigue sacando libros para después meterlos en su mochila.

-¿No vas a decir nada? -pregunto mirándole.

-Adiós -responde seco cerrando su casillero de un portazo y alejándose entre los demás estudiantes.

Cierro mi casillero, me apoyo en él y suspiro resignada.

-Sí, diagnóstico comprobado. Estás completamente loca -afirma Kim a mi lado.

Suspiró y me doy la vuelta dándole la espalda y dirigiéndome a mi próxima clase.
Entro y dejo caer mi mochila en el pupitre desocupado del final, al lado de Yoongi. Observo como él mira por la ventana.

-¿No vas a decir nada? -pregunto curiosa de nuevo.

Sigue mirando por la ventana.

¿Qué hay tan entretenido ahí fuera?

-Ya me he disculpado. Por simple educación podrías al menos aceptar mi disculpa -digo obvia.

-Disculpa acepatada, ¿contenta?

-Sí -afirmo alegre.

Veo como más de la mitad de la clase mira en nuestra dirección y me encojo en mi sitio debido a toda la atención puesta en nosotros, en mí.
Saco los libros de onglés para distraerme y justo en ese momento entra el profesor dando comienzo a la clase.
La primera media hora se la pasa escribiendo esquemas de todos los tiempos en la pizarra y mientras, yo, me entretengo en jugar con mi lápiz.

-Oye, ¿por qué siempre sales a la misma hora de tu casa? -pregunto despreocupada haciendo dibujos de corazones en la última hoja de mi cuaderno.

-No te importa -escupe seco-. Te dije que te metieras en tus asuntos, así que déjame en paz -musita.

-Tal vez no quiera dejarte en paz -objeto.

-Campbell, Min, ¿no os gustaría compartir vuestra conversación con el resto de la clase? -pregunta el profesor Kang a forma de regaño.

-No es necesario -contesta Yoongi desinteresado.

-Pues guarden silencio -ordena volviendo a explicar la lección.

Miro de nuevo como Yoongi observa a través de la ventana con expresión tranquila.
Paso de página en mi cuaderno y escribo una oración. Le paso el cuaderno. Veo como lee lo escrito y vuelve su vista al paisaje.

-No lo has negado ni me has tirado la silla a la cabeza. Me lo tomaré a buenas -susurro para que solo él me escuche.

Noto como me mira de reojo y al no decir nada sonrío ampliamente y cierro el cuaderno a la vez que suena el timbre.
Me levanto de mi puprite y tiro la hoja a la papelera con la oración "quiero ser tu amiga" escrita en tinta azul.


Only At Midnight ➸ Min YoongiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora