Hola me llamo Min t/n y tengo 19 años, vivo en Seúl Corea, y lo más interesante es que soy espia. Quieres saber más, pues sigue leyendo créeme está historia te dará algunos giros algo locos..!!
-Relaciones chicoxchico
-lenguaje vulgar
-ecenas lemon
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POV T/N A pasado un mes desde aquella "fiesta" y en realidad no a pasado mucho, me e pintado el cabello de rojo tirándole al rosa
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Y los chicos han tenido solo dos conciertos en Corea y uno en Alemania en donde fueron muy bien recibidos. Ahora estamos de regreso a Corea y bueno los chicos están durmiendo y yo, pues me puse a leer un libro que le regaló hobi (tan lindo el) mientras escucho música, también estoy algo triste, pues por motivos "personales" del CEO Suga y los demás chicos se fueron a vivir juntos, entonces pues ahora estoy yo solo en el apartamento que ahora es mucho más grande para mí.
POV NARRADORA
Después de que el avión aterrizara los chicos y t/n bajaron y fueron por sus maletas, como era de esperarse los chicos se despidieron de t/n con un beso en la mejilla y un abrazo, cuando todos se despidieron los chicos se fueron a la limosina y t/n a su carro y directo a sus casas.
Cuando t/n llegó a su casa bajo de su carro abrió la puerta y la cerro atrás de ella, reviso el buzón de las cartas y se encontró con muchas, la mayoría agradeciéndole por cuidar de los chicos, pero una en especial le llamó la atención.
La carta no tenía nada en especial en el exterior: sobre blanco con el matasellos de la ciudad de Corea. Era del tipo de sobre tintados por motivos de seguridad con pestaña autoadhesiva que se venden en cualquier papelería o supermercado. T/n no tenía en mente el mensaje que leería al abrir aquel sobre. El mensaje en el interior estaba escrito en un papel de notas blanco de poco gramaje e impreso desde la misma computadora. Sabía que aquella carta no tenía huellas dactilares, o algo para extraer ADM como saliva, un cabello suelto o folículos de piel, que pudiera dar a la policía para tener una idea en mente del anónimo y dar con el.
La carta no contenía más que un mensaje sencillo y aparentemente elegido al azar.
Las primeras líneas aparecían sin saludo ni presentación.
Un bonito día caperucita roja decidió llevar una cesta con alimentos deliciosos a su querida abuela, que vivía al otro lado de un bosque denso y oscuro... Seguro que oiste este cuento cuando eras pequeña. Pero probablemente te contaron la versión más benévola: en la que la abuela se esconde en el armario y caperucita roja se salva de convertirse en el siguiente banquete del lobo feroz gracias a la aparición de un cazador armado con un hacha. En esta versión todos acaban «felices y comiendo perdices». Pero así no acaba el cuento original. En él, el resultado era muy distinto y mucho más siniestro. Durante años a sido objeto de interpretación por parte de académicos y psicólogos. Sería muy recomendable que lo tuvieras en cuenta durante las semanas siguientes. No me conoces pero yo a ti si. Ustedes son dos, y he decidido llamarlas: Pelirroja uno. Pelirroja dos. Se que las dos están perdidas en el bosque. Y al igual que la niña del cuento, han sido elegidas para morir.
«Esto debe de ser una broma -pensó-. Alguien me está tomando el pelo. No puede ser verdad.»
Era la única explicación para t/n que tenía sentido aparte de que notaba una oscuridad acechante en lo más profundo de su ser que le decía que lo más importante para quien quiera que hubiera escrito la carta no era tener sentido. Aquella tarde noche le había parecido que era imposible sentirse más sola y, de repente, justo en ese momento, así era como se sentía.
----------+----------+----------+----------+----------+ Cambio de 360 grados de la historia no creen, ¿Quien será el anomino?, ¿Será nada más uno?
