021|Trance.

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No habíamos notado en qué momento la película pasó a segundo plano, y empezamos a hablar, esa había sido la razón para que nos shitaran.

Resulta que a Aiden le gustaba mucho hablar, pero más aún escuchar, le conté cosas triviales sobre mí, como que no me gustan los fideos instantáneos mientras que él los amaba porque hubo un tiempo que comía muchos.

Aiden no mencionó mucho de su familia pero estuvo abierto a oírme hablar de la mía. Incluso le mostré unas cuantas fotos y el sujetó mi mano bajo la suya para observarlas mejor.

Le conté de Luisa y como lo pensaba, él y ella tenían mucho en común.

Luego de una pequeña risa y una disculpa de parte nuestra, Aiden habla retomando su análisis de Ant Man luego de mucho tiempo.

—La verdad es que, quiero ser psicólogo —lo dice muy bajito por varias razones, y una de ellas parecía ser por ¿vergüenza?

Me parecía increíble, de seguro su deseo de ayudar lo hará el mejor psicólogo.

***

Cuando la película acabó y nos dirigimos a la salida, íbamos de lo mas calmados posibles, la habíamos pasado tan bien que me hizo pensar en lo bien que fue alejarme de Logan, era ese pedazo tóxico en mi vida, una fruta podrida.

Mis pensamientos se dirigieron a aquel día en que conocí a Aiden, todo ha mejorado a partir de eso, aunque las circunstancias de conocernos no fueron las mejores, toco mi cuello, aún tenía un pequeño rastro del pasado que trato de olvidar.

Pienso y continúo haciéndolo hasta que detengo el paso y navego en mi mente.

No sé cuanto tiempo llevo así, la voz de Aiden suena lejana, no me puedo concentrar, solo quiero pensar en lo mucho que ha cambiado el rumbo de mi vida estos últimos días.

Mi cuerpo se sacude pero mi mente no se aclara, es como si caminara por un túnel de emociones, detesto cuando me sucede, no tengo control sobre mí. 

—¿Y qué te parece si...? ¿Aritos? — toca mi hombro. No reacciono.

—¿Te encuentras bien? No me asustes de esa manera. — dejó de caminar, puedo notar que se ha puesto frente a mí.

Estaba en una especie de trance, me han estado sucediendo muy seguido, pero quería evitar que él me viera así.

Empezaron a aparecer cuando me di cuenta que mis "amigos" anteriores habían estado esparciendo rumores horribles sobre mí. Esa también fue una razón para cambiarme de instituto.

—Jayden, mírame a los ojos. Sólo mira mis ojos. — trato de hacerlo pero mi mirada sigue perdida. Detesto esta sensación.

Quiero llorar, ¿por qué ahora?

Aiden se mueve, está más cerca mío, toma una de mis manos y  aprieta, con la mano libre levanta mi barbilla.

Y hace algo que me deja aún más estático.

Jayden y Aiden | ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora