STRANGER (HunHan) Resubida

Cap 7

Normalmente los ascensores se cierran bastante rápido. Pero éste en
particular eligió un horrible momento para permanecer abierto. Y fueron los 10 malditos segundos más largos de mi vida. Sehun me miraba como si no pudiera creer que yo estaba ahí mientras yo lucía como si hubiese visto un fantasma. Estaba maldiciendo en mil idiomas diferentes en mi cabeza, sabía que tenía que decidir ¿Debía fingir no reconocerlo? Eso definitivamente es exagerado. ¿Debía usar las escaleras? Buena suerte tratando de llegar vivo al piso 50. ¿Le grito y le doy un puñetazo en la cara? El cuerpo de seguridad. ¿Salto y lo beso? Tentador, pero hay cámaras.
Sehun permaneció tan mudo como yo, y la incomodidad entre nosotros
crecía a cada segundo. Antes de que pudiera decidir, las puertas
comenzaron a cerrarse, centímetro a centímetro, y su rostro se
desvaneció gradualmente de mi vista. Para mi sorpresa, justo antes de
que las puertas se cerraran por completo, él metió la mano en el medio.
Yo me resistía a reaccionar, necesitaba un electroshock para que mi
corazón funcionara de nuevo.
"¿No vas a entrar?" Preguntó.
Su voz suave me envió a la completa rigidez. Mi pulso enloquecía
mientras caminaba al interior, él se paró detrás de mí, mientras yo hacía mi mejor esfuerzo para parecer calmado. Pero dentro de mí, había un apocalipsis, su aroma había envuelto el espacio y todo regresó, cada cosa dolorosamente familiar sobre él. Lo sentí moverse, acercándose a mí, hasta que estuvo a un centímetro de mi espalda, mi cordura temblaba. Su pecho rozó mi espalda mientras se inclinaba para pulsar el botón del nivel 50. "¿Qué piso?" Su aliento caliente acarició mi oído.
"El mismo." Dije apenas.
Tenía la esperanza de que alguien entrara al ascensor con nosotros, así me sentiría menos cohibido, pero hoy no era mi día, cada vez que nos deteníamos en algún nivel la gente simplemente se nos quedaba
mirando sin entrar. Me obligué a pensar en otra cosa, como
Matemáticas, mi cosa preferida. Teniendo en cuenta que eran alrededor de 10 pies por planta, serían 500 pies...más o menos unos 1600 pies por minuto...es decir que el viaje duraría 28 segundos como máximo. 28 segundos atrapado con Sehun - Estaré bien, me convencí a mí mismo.
Pero él seguía estando demasiado cerca y comencé a pensar lo
contrario.
"¿Cómo estás?" Preguntó casualmente.
Oh de maravilla, sólo déjame recoger mi dignidad del suelo.
"Luhan-ah." Él se movió a mi lado.
Me moví un poco hacia atrás, "Estoy bien." haciendo énfasis en la
palabra Bien.
Por el rabillo de mis ojos, pude ver un brillo de triunfo en los suyos,
"Nunca pensé que me buscarías."
Este egoísta arrogante hijo de p-. Mi sangre se calentó casi hasta el punto de ebullición, y no sé cómo no lo estrangulé en ese mismo momento. Si realmente pensaba que lo estaba buscando entonces había pasado semanas babeando por un completo idiota. En ese instante, no podía creer que realmente estuve loco por él. Justo cuando estaba a punto de decir algo de lo que luego me iba a arrepentir, llegamos al piso 50.
"Luhan, me alegra de que hayas venido." El Sr. Jae Sun se paró frente a nosotros. Y no pude pensar en nada más que en restregarle en la cara a Sehun que todo sobre él me importaba un bledo.
Por despecho, contesté "Sr. Jae Sun, gracias por llamarme tan pronto.
No puedo esperar para comenzar mi primer día."
Nunca había estado tan feliz de ver a alguien. El Sr. Jae Sun me sonrió y luego miró a Sehun, "Ah, Sehun-ah, wasseo? Están esperándote en la sala de conferencias."
Sehun permaneció en silencio y pude sentir que clavaba sus ojos en mí, probablemente no se esperaba esto. Así es Sehun, de hecho un montón de gente que piensa que soy valioso.
Cuando el Sr. Jae Sun me hizo un gesto para que fuera con él por el
pasillo, lo seguí animadamente sin dirigir una sola mirada a Sehun. Fue
cuando llegué a su oficina que me di cuenta de lo que acababa de
hacer. No había vuelta atrás, realmente iba a hacer esto.
“Primero lo primero." Dijo Jae Sun, "No vuelvas a subir a ese ascensor."
"Disculpe, señor?"
"Ese es el ascensor VIP." Explicó y me sentí avergonzado, "Además del
COO y el CEO, nadie más tiene permitido usarlo. La persona con la que
estabas es Sehun, el actual COO e hijo de nuestro Presidente, el Sr. Oh."
Mierda. Eso explica por qué nadie entraba en el ascensor. Bien hecho
Luhan.
"No volverá a suceder, señor." Garanticé, "Si no le molesta que
pregunte, Sr. Jae Sun, me parece que mi entrevista no fue
precisamente un éxito...así que por qué estoy aquí?"
"Como dijiste, eres inteligente y bueno con los números." Me dio algunos archivos, "Así que, estos son los libros con nuestros registros y
estadísticas de los últimos 10 años, examínalos para nuestra reunión de mañana." Apretó el intercomunicador, "Por favor, lleve al Sr. Luhan a su oficia."
La secretaria entró de inmediato y me hizo un gesto para salir de la
habitación. Ni siquiera podía creer que tenía mi propia oficina, pero
cuando la vi, quedé sin palabras. Las largas paredes de un lado eran de vidrio del piso hasta el techo, proporcionando una gran vista de Seúl, el resto estaban revestidas con madera de roble. La alfombra roja hacía juego con el amplio escritorio situado en el centro, y detrás de él, una enorme silla de cuero tapizado.
Tartamudeé, "¿Está segura de que es mi oficina?"
"Sí Sr. Luhan, si necesita algo más, por favor no dude en llamar a los
números de extensión que están en el teclado junto al teléfono."
Después de minutos de admirar y adorar mi nuevo espacio de trabajo,
me senté y reflexioné sobre lo que acababa de suceder. Me enfrenté con dos problemas inmediatos: Primero, acababa de aceptar un empleo en la empresa más grande del país sin ningún plan de cómo sobrevivir.
Segundo, no había duda de que me encontraría con Sehun otra vez, y
tomando en cuenta que era mi jefe, mi única alternativa era actuar como si nada hubiera pasado. Pero actuar nunca fue una de mis habilidades.
Por semanas, lo único que quise fue verlo, por semanas, me sentí
abatido y arrepentido. Pero después de lo me dijo...Nunca pensé que me buscarías... todo fue reemplazado con rabia y repugnancia. Quería que él sintiera lo que yo sentí, quería que se sintiera avergonzado, que se sintiera rechazado. ¿Pero cómo puedo hacer todo eso sin ser despedido?
Mis pensamientos fueron interrumpidos por una llamada del Sr. Jae Sun.
Al parecer nuestra división se reuniría a comer, y estaba invitado. Fui
capaz de revisar un poco los libros antes de que llegara la hora del
almuerzo. Fui directamente hacia la oficina del Sr. Jae Sun. La puerta
estaba entreabierta cuando toqué, pero él no contestó, me asomé y me di cuenta de que estaba demasiado concentrado en su trabajo como para notar mi presencia. Probablemente se le había olvidado que era la hora del almuerzo. Permanecí de pie sin hacer ruido, esperando a que me viera. De repente, él me miró y se sorprendió tanto que casi se cayó de la silla, intenté suprimir mi risa.
"¿No sabes tocar?" Se agarró el pecho.
Entré, “Lo hice señor, pero..."
"¿Has estado esperando mucho tiempo?" Empezó a recoger sus cosas.
"No señor." Me moví para ayudarlo, pero él hizo un gesto para que no
me molestara.
"Me pongo así cuando trabajo." Dijo, "Quedo tan absorto que veces
olvido que hay gente alrededor. Todo lo demás se vuel-"
"Se vuelve invisible." Completé la frase.
Él sonrió, "Exacto." Hizo una pausa, entretenido, "¿Cómo sabes eso?"
"Me pasa lo mismo. Me molesta cuando alguien interrumpe y no llego a te-"
"Terminar lo que estaba haciendo." continuó. Yo asentí con la cabeza, no pude evitar sonreír. A primera vista, el Sr. Jae Sun parecía uno de esos aristócratas con una varilla por el culo, pero en realidad era bastante tolerable - agradable incluso. Me di cuenta de que teníamos mucho en común, como yo, Jae Sun también era inteligente, bueno con los números y responsable. Encontré un sentimiento de camaradería en él, y supe que él también en mí.
Cuando llegamos a la cafetería en uno de los pisos del edificio, mis otros compañeros de trabajo ya estaban allí. Había 5 personas en nuestra división, por supuesto, el Sr. Jae Sun era la cabeza, nuestro director de finanzas. Nana, una mujer en sus treinta era nuestra directora de FP&A, parecía ser una mujer considerada, definitivamente no del tipo mandona.
El resto éramos analistas de nivel básico, Minnie, Lola y yo.
"Luhan," Nana se volvió hacia mí, "Minnie y Lola irán a la fábrica
mañana, por lo que tú te encargarás de la presentación en la reunión."
Me ahogué con la coca-cola que estaba bebiendo, "¿Q-qué es lo que
tengo que presentar?"
El Sr. Jae Sun interrumpió, "Sólo has una presentación de tus análisis
sobre nuestra situación financiera basándote en los libros que te di."
"Uhm, el…el CEO estará ahí?"
"Por supuesto." Dijo Nana, "Pero no te preocupes, es estricto pero justo”.
Siempre y cuando des una presentación clara, todo estará bien."
Presioné, "El COO no estará allí por casualidad ¿verdad?"
"Rara vez se presenta a reuniones como esas." Respondió Minnie para mi gran alivio. Estaba seguro de que ver a Sehun en la sala no ayudaría a aumentar mi confianza durante la presentación.
"¿Lo has visto hoy?" Le susurró Lola a Minnie, "¿Cómo puede existir
alguien tan guapo?"
Rodé los ojos discretamente, si supieran...
Jae Sun le lanzó una intimidante mirada a Lola, haciendo saber que no
toleraría chismes. Entonces fue evidente. Jae Sun era un jefe claro y
estricto. Nana era la persona que buscaría cuando Jae Sun no estuviera cerca, Lola era la persona con la que hablaría cuando necesitase enterarme de los últimos secretos de la compañía, y Minnie era a quien le pediría consejos si necesitaba ayuda con el trabajo.
Tan pronto como llegué a la oficina, me obligué a comenzar a trabajar de inmediato. Mañana tendría que probar que era la persona indicada para el trabajo, sería como conocer a alguien por primera vez - y tenía que causar una buena impresión. Excepto que las expectativas eran más altas. Con mucha motivación, investigué las finanzas de los primeros cinco años de la compañía en cuatro horas, calculando, analizando, asegurándome de no pasar nada por alto. A simple vista se podía decir que el estado financiero de Adze no corría ningún riesgo inminente, pero había un montón de cosas que se podían mejorar y algunas debilidades que podrían causar problemas en el futuro. Ya eran pasadas las horas de oficina cuando miré mi reloj, pero decidí trabajar sobre tiempo hasta que terminara de preparar mi presentación. Creé mi propia presentación
powerpoint, utilizando gráficos y tablas de porcentajes donde veía
conveniente. A alrededor de las 9 pm, ya estaba comenzando a sentir el cansancio. Tenía que moverme o al menos buscar algo de café. Fui hacia la sala de empleados en el mismo piso, y noté que las luces del Sr. Jae Sun aun estaban encendidas. Aparte de él, el resto probablemente ya se había ido a casa.
Estaba a punto de girar el pomo de la puerta de la sala de descanso
cuando alguien la abrió desde el interior, pegándome en la cabeza, el
pomo se clavó en mi estómago, haciéndome caer al suelo, "¡Ah!" Grité
de dolor. ¿Quién coñ…? Él inmediatamente se arrodilló y me sostuvo, "¿Estás bien?" Preguntó Sehun.
0,0467% mi culo. "¿Te parece que estoy bien?"
Ahogó una risa, y observó mi cara de cerca. Mis ojos se abrieron con
incredulidad, "¿De verdad te estás riendo?"
Apretó los labios y puso su poker face "Déjame ver," se acercó y pasó su pulgar por mi frente. Y ahí estaba yo de nuevo, su rostro más cerca que nunca una vez más, debería sentirme indiferente y desinteresado, me recordé a mí mismo. Me observó en silencio con preocupación, y me obligué a mirar cualquier cosa menos a él. Frotó mi sien repetidas veces, sosteniendo mi cabeza gentilmente con ambas manos, sopló aire tibio sobre el golpe que se había enrojecido con dolor, "¿Todavía duele?"
Preguntó.
¿Qué cosa? El hecho de que te fuiste, o cuando actuaste como si no
pudiera importarte menos? Alejé sus manos de mí y me puse de pie,
sacudiendo el polvo en mis pantalones. Me dirigía hacia la puerta una
vez más cuando me agarró la muñeca y apretó su cálida mano con la
mía. "Voy a buscar un kit, espérame allí."
Me eché hacia atrás con más fuerza y deshice su agarre, "No lo
necesito."
Caminé rápidamente dentro de la habitación, recuperando el aliento.
Sentía una mezcla de emociones, rabia de que él pudiera actuar como si nada hubiese pasado entre nosotros y alivio porque no vacilé ni cedí ante su mirada. Pero sobre todo, sentía miedo – miedo porque ése único contacto casi rompió todas las paredes que construí a mí alrededor. Me arrastré hacia la cafetera, y esperé por un trago que pudiera despertarme de mi locura.
Escuché que alguien abría la puerta, suspiré sin darme la vuelta, "Basta Sehun. Estoy bien. Dije que no lo necesito."
Al no recibir respuesta, me volví hacia él, "Dije que no-" Me tambaleé
hacia atrás mientras el miedo me invadía, "Sr. Jae Sun..."
El tiempo se detuvo mientras trataba de averiguar qué decir o hacer, o si siquiera me había escuchado decir Sehun. Busqué una excusa en mi
ineficaz cerebro, pero no la encontré. Me alarmé, sin saber qué
consecuencias habría si el Sr. Jae Sun se enteraba de que conocía a
Sehun desde el principio.
Justo cuando pensaba que las cosas no podían empeorar, Sehun abrió la puerta, "Luhan-ah, ven aquí comprobaré si todavía estás-" Cuando notó la presencia del Sr. Jae Sun en la habitación, la agitación se hizo
evidente en su perfecto rostro.
Los tres nos quedamos en silencio por lo que pareció una eternidad,
mientras yo reflexionaba sobre cómo este era el peor ‘primer día’ de
todos. Adiós vida sin complicaciones, Hola mundo de los negocios.