Siempre Fué Ella. [Zen Wistaria]

Capitulo 6: "Llegada"

-¿Crees que esto sea una buena idea?, nos vemos aún más sospechosos que antes.

Realmente no podía dejar de pensar los mil y un cosas que podían pasar cuando atravesemos la frontera de Clarines y el hecho de nuestras vestimentas no ayudaba mucho.

Kei con un bigote (claramente falso), ropa exagerada y un enorme saco en el cual llevamos nuestras pertenencias pero lo utilizaríamos para nuestro papel el día de hoy.

Oh, él es Kei Migura, guardia de Nelveska y un guardia del castillo  importante para mí padre, lo conozco desde hace un tiempo ya, aunque realmente no se mucho sobre él pero no hemos cruzado suficientes palabras para decir que somos "Amigos".

Si él hablara más, probablemente sería mas atractivo. Su cabello castaño y sedoso, era envidiable, ojos verdosos como las hojas en primavera  y su físico está en buen estado, más todo eso es aplacado por su mal carácter.

Yo realmente era la más normal con referencia a la vestimenta, lo único sospechoso es la capa que cubre mi cabeza pero esto ya era típico en mi.

-Ya casi llegamos, ten cuidado.- susurró Kei. Ya faltaba poco para llegar.. apesar de ya haber pasado por este lugar, mis nervios siempre tenían presencia sobre mi.

-¿No hablas mucho, verdad?. - Pregunté, viendo como desde el principio hizo caso omiso a mis preguntas.

-Sólo lo necesario.

Nuestro recorrido había llegado a su destino, los guardias del reino se encontraban inspeccionando a las personas que querían pasar la frontera. Kei acomodó aún más el saco negro que llevaba sobre el hombro y el cual le daba el toque de ser un comerciante exorbitante.

El guardia que se encontraba cerca de nosotros, hizo un ademán con la mano, indicando que nos acercaramos hacia el.

-¿Que vienen hacer a Clarines?. - Preguntó de forma monótona.

-Vengo desde Tanbarun a vender las mejores valijas de mi ciudad natal y al mejor precio de todos. - Mi acompañante posó una mano sobre su bigote -Falso- y rió exageradamente, dándole un toque egocéntrico, pero en realidad lo hacia ver como un panadero de ciudad.- Oh, y ella es mi linda hermana, piensa seguir sus estudios de medicina en Clarines.

Ahora sólo falta que nos crea la actuación de Kei.

-Está bien, pueden pasar, buena suerte y disfruten su estadía en Clarines. -Sonrió, para después dirigirse a las siguientes personas.

Logrado.

Pasamos sin ningún impedimento y nos dirigimos al centro de la ciudad. La plaza se encontraba llena de mercaderes con tenderetes*, así como varios niños corriendo al rededor de la fuente y de vez en cuando pasaban carretillas guiadas por caballos.

Debo admitir que esa idea no fué mala, aunque creía que iba serlo, ya que la frontera de Clarines se conecta con la de Nelveska y Tanburn, también lo de ser un comerciante tan llamativo, jamás creí que Kei pudiera actuar así, después de todo su cara solo refleja seriedad.

-Ahora sólo falta encontrar el lugar donde nos quedaremos. - Habló Kei, estaba siguiendo el pequeño mapa que mi padre nos había dibujado.

La ruta que había sido dibujada fué difícil de seguir, era como leer algunos de esos libros complicados de la biblioteca del castillo, solo que esto era simplemente unos garabatos hechos con rapidez.

Siempre dábamos con algún callejón o sólo apareciamos en medio de la nada. Kei parecía estar exaltado, su cara estaba roja y cubierta de sudor, estaba realmente cansado, algunas veces tenía que dejar el enorme saco negro y descansar.

Sólo pensaba en donde demonios estaba aquél lugar, también estaba transpirando más de lo normal, cada vez que me quitaba la capa e intentaba agarrar un poco de aire, las personas a mi alrededor susurraban como si fuera una nevada en verano y Kei me daba una mirada en desaprobación. ¿Que podia hacer? Al menos el podía tomar aire con libertad.

Nuestras súplicas fueron escuchada y el dichoso lugar del mapa al fin apareció, Kei suspiró de alivio y nos adentramos en la pequeña casa.

Era una pequeña taberna, en el primer piso, el ambiente olía a guardado junto con Alcohol y comida, mesas de madera oscura rodeaban toda la habitación y en el fondo se encontraba una puerta que supongo que era la cocina. Una señora nos recibió con una sonrisa y nos llevó al segundo piso, donde se encontraban las habitaciones, abrió la tercera y nos indicó que esa era la nuestra.

No era muy grande pero era suficiente, había dos camas y en medio estaba una pequeña mesa de noche que sostenía una lampara a gas y al frente de cada cama, se encontraba un baúl para guardar las pertencias.

-Esta será su habitación, disculpen que no sea mucho.

-Oh, por favor no se preocupe, esto es mas que suficiente, gracias a usted por acogernos. Por favor cuide de nosotros. - Agradecí, la verdad es que la habitación estaba bien y el precio era razonable. La señora nos sonrió antes de retirarse.

-Yo dormiré en esta. - Declaró Kei con su voz de mandamás y enseguida comenzó a desempacar. Yo me quedé con la cama al lado de la ventana. -Desempaca, que mañana hay que madrugar.

-Está bien- Suspiré, él no hacia ningún esfuerzo por tratar de ser más amable.

-¿Ya repasaste el plan?

-Si, si. - dije restandole importancia. - Sé este plan a la perfección.

Por ahora nos integraríamos por un tiempo en Clarines, trabajaremos, reuniremos información y haremos caer el reino a nuestra manera.

-De ahora en adelante.. tendremos cuidado con nuestras palabras, actos y pasos. - Susurró cauteloso de que alguien pudiera estar escuchando. - Oh, y por favor, ten cuidado con tu cabello y nombre, no pierdas la capa pero sobretodo.. -Hizo una pausa y me miró fijamente. - Mantente alejada del castillo.

Sus palabras dieron un revuelco en mi corazón, realmente no necesitaba volver a ver a Zen Wistaria, incluso era mejor si no recordaba su nombre o quién era.

O eso era lo que creía...

Tenderetes*: son las tiendas o puestos donde colocan la mercancía.

¡Hola! Como están? Espero que bien♡

Gracias por todo el apoyo que me han dado, estoy feliz de leer sus comentario y también disculpen todo el tiempo que tardé en actualizar, el lado bueno, es que ya tengo dos capítulos casi terminados.

Intentaré no tardarme tanto en actualizar.

Un abrazo. 

Att: Alexa