Sé mi esposo |KRISHO|

Epílogo

Junmyeon entre sueños oyó unos suaves quejidos, intentó levantarse de la cama pero el cansancio lo estaba matando, pudo oír que su hijo empezaba a llorar y con todo el pesar se levantó yendo a la habitación de al lado donde dormía su bebé.

Al entrar a la habitación lo único que iluminaba su camino era la luz de la luna que entraba por la ventana, sabía que a su hijo últimamente le daba miedo la obscuridad pero no había tenido la oportunidad de comprarle una luz de noche, apenas pudo ver como su hijo se tapaba con la cobija para acallar sus sollozos y sonrió enternecido.

-Sehun, bebé-murmuró Junmyeon quedo, el niño al ver a su padre se levantó estirando los brazos hacía él, Junmyeon lo cargó, ya no era tan ligero como antes, ya estaba por cumplir los cuatro años e involuntariamente Junmyeon sonrió, después de que Sehun había nacido las cosas habían estado mejor como Yifan le había dicho, no sabía nada de sus padres ni del alfa, tampoco le interesaba si es que lo estuvieran buscando o no, estaba feliz ahora con Yifan y Sehun, la vida tampoco había sido fácil, siendo padres primerizos y vivir al día debido a que Yifan no había encontrado un gran trabajo por no tener un mayor grado de estudios pero con lo que tenían estaba feliz.

-Pa-papi-murmuró Sehun pasando constantemente su mano sobre su cara tratando de acallar sus sollozos, Junmyeon besó sus mejillas para calmarlo.

-¿Tuviste otra pesadilla?-murmuró viendo hacia el reloj que indicaba las 5:00 am. no faltaba mucho para que Yifan se levantara para ir a trabajar-Ven, vamos a dormir con papá-su hijo asintió ocultando su rostro en el cuello de Junmyeon, con pasos lentos llegó a la habitación que compartía con Yifan y dejó a Sehun en medio de los dos sentándose del otro lado del colchón, Yifan estiró su brazo hacía Sehun y pasó sus largos dedos sobre los mechones de cabello que caían sobre la frente de su pequeño.

-Sehun, no debes tener miedo, estamos aquí contigo-su hijo se acurrucó hacia su padre y casi de inmediato se quedó dormido, le pareció tierno a Junmyeon, a pesar de que Yifan no era alfa con su olor natural lograba calmar a Sehun, aunque Yifan se negara constantemente diciendo que los betas no tenían olor Junmyeon sabía que no era el único que percibía aunque fuera un poco, un olor en Yifan, se iba a levantar cuando la mano que estaba sobre Sehun se posó sobre su muslo-Quédate a dormir, aún es temprano.

-Pero no falta mucho para que tengas que levantarte a trabajar, voy a hacer el desayuno-se quejó cuando sintió que Yifan aplicaba fuerza sobre su muslo.

-Está bien Junmyeon, puedo comer cualquier cosa en el camino-Junmyeon se mordió el labio, no podían, no tenían dinero para estar gastando fuera y menos cuando tenían comida que podían preparar-Junmyeon, acuéstate, te ves muy cansado.

Con pesar Junmyeon se acostó mientras que Yifan ponía se mano en su cintura apretando suavemente y haciendo que Junmyeon se quedara dormido casi al instante.

Para cuando despertó Junmyeon la luz del sol le daba en la cara, haciendo un mohín se levantó y vio alrededor, solo estaba él, tomó su celular viendo que ya era medio día, se levantó rápidamente para buscar a Sehun, normalmente el niño se despertaba antes de las 9 am y seguramente no había desayunado nada.

-Sehun-dijo Junmyeon al encontrarlo en la pequeña sala de la casa viendo la televisión-¿Por qué no me despertaste bebé? ¿Tienes hambre?-el niño negó sin quitar la mirada de la caricatura.

-Papá dijo que no te despertara, me dio de desayunar-Junmyeon asintió y fue a las habitaciones a recoger la ropa sucia para poder lavarla.

Junmyeon no entendía por qué se sentía tan cansado, ni siquiera cuando a Sehun le habían empezado a salir los dientes y estaba insoportable se había sentido tan cansado como se sentía ahora.