XVII: 4:30 P.M.

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Adel escucho como un auto arrancaba y salía a gran velocidad hacia la avenida principal, dejándole solo en aquel lugar que desconocía

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Adel escucho como un auto arrancaba y salía a gran velocidad hacia la avenida principal, dejándole solo en aquel lugar que desconocía. Suspiro y se levantó de aquel banco de metal en que estaba sentado.

En toda la noche no había logrado dormir, primero porque toda la información que había recibido era demasiada y de alguna manera algo dentro de sí le decía que era verdad, había mirado desde la puerta de la habitación en la que había dormido toda la noche a Vilda, ellas llamas en sus ojos y esas misma llamas flotando por ahí, incluso una había pasado por su habitación y había sido eso lo que le había motivado a salir y mirar y luego ver como Vilda salía volando hacia la pared.

Frotó su rostro con las palmas de sus manos y regresó a aquella habitación que efectivamente parecía ser la habitación de las visitas para tomar su celular y mirar la hora, las 3:05 pm, en ese momento 3 horas parecían distantes pero sabía perfectamente que el tiempo si iría volando. Regreso el móvil al mismo lugar de donde lo había tomado, en aquella mesilla de noche que había a un lado de la cama. Le causaba cierta ansiedad ver la barra de señal en ceros y tener esa pequeñas espina de no poder comunicarse con nadie, Vilda parecía hablar bastante fluido el Alemán y el niño pequeño que vivía en esa casa también, realidad parecía hablar más de un idioma y Vilda se lo había demostrado la noche anterior, le había dicho el nombre de ese niño pero no lo recordaba, era raro y dificil de pronunciar, lo cual causo un poco de curiosidad en Adel y le preguntó un poco sobre él.

Vilda le dijo que era algo así como el protegido de Arodace, le dijo que también era un perteneciente a los linajes pero que a diferencia de la mayoría estaba con Arodace desde los primeros meses de su nacimiento.

"– Arodace a cuidado de él, desde hace años, llegó a su vida siendo un bebé de apenas un par de meses y desde entonces ella lo cuida; cabe decir que nunca había visto que ella le tuviera tanto cariño a alguien. Incluso Estarot, cuando la conocí me lo dijo, ella segura de que no ser porque lo vio con sus propios ojos, nunca hubiera pensado que Arodace le tuviera tanto cariño a alguien.–"

Era curioso de cierta manera, parecía que Arodace no solo le tenía cariño si no que además, parecía ser una especie de madre excéntrica con ese niño, en las 18 hrs despierto que llevaba en aquel departamento había visto entrar a 2 maestros particulares, uno de matemáticas y el otro de ciencias básicas, algo que le parecía bastante curioso para la edad que tenía ese niño. Dentro de la mente de Adel, esperaba verle jugar con colores, pinturas y macarones y en su lugar veía a un niño con una letra preciosa, una fluidez increíble al hablar, en más de dos idiomas al parecer y que tomaba clases de piano y según lo que había escuchado de Vilda durante la llamada y de lo poco de había entendió de la misma, tomaba también pintura en lienzo con acuarelas.

Se recostó en la cama por unos momentos mientras miraba el techo blanco que había sobre él, y con la curiosidad que lo invadía se puso de pie, dejando el móvil sobre la cama y dejando que las preguntas invadieran sus pensamientos dejó la habitación saliendo al pasillo, mirando la habitación que tenía un par de nubes pintadas en la parte superior, apostaría lo que fuera a que esa habitación era del niño pequeño que vivía ahí.

El pecado Número XIIIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora