Hace cerca de un mes que comenzamos a entrenar con el equipo nuevo. Los tres habíamos progresado bastante, más que nada, en cuanto al equipo en sí. Ahora que ya conocíamos un poco del poder del otro, nuestros ataques comenzaron a ser más sólidos, por lo que nuestro sensei, Kimimaro, había tenido que aumentar un poco el nivel de las practicas también.
Individualmente, Iome se destacaba como la estratega del grupo. Con las semanas, Riu logró mejorar sus técnicas, lo que le permitió convertirse en un apoyo seguro y fundamental para el equipo. Finalmente, yo sería el ninja médico y también apoyo en las estrategias de Iome. Resultó que los tres complementábamos bastante bien, por ello nuestro equipo se veía equilibrado.
Mi relación con Kimimaro se volvió un poco más extraña, puesto que, desde que nos besamos, perdimos algo de nuestra amistad. Las ultimas semanas se ha mostrado un poco mas cerrado a contarme de él. Siento que incluso perdimos un poco de confianza, lo cual es extraño, ya que ahora tenemos un contacto y una conexión mucho más profundas. Es cierto que yo quería besarlo desde un principio, pero no sabía que eso me costaría tanto. A veces, hubiera preferido no haberle hecho caso a mis deseos... Ahora siento que somos menos cercanos que antes, cuando éramos amigos... Ahora siento que somos nada, él ya no se comporta como antes y eso me asusta... Me asusta perderlo. Me asusta que se vaya de mi vida.
El sonido de la puerta me despertó. Según mis cálculos, debían ser las ocho de la mañana, lo cual me pareció extraño, pues Kimimaro nunca había venido tan temprano. Bueno, últimamente no lo hacía, nos veíamos en el lugar de entrenamiento y solo por las noches me acompañaba a mi habitación.
- Shigo, soy yo, Sakon...- Al oír esa voz, ni siquiera tuve que esperar a la confirmación de su identidad, ya que ya había reconocido al dueño de ella. Salté de inmediato de la cama y abrí la puerta lo más rápido que pude - ¿Puedo pasar? -
El chico tomó asiento en un costado de mi cama. Su presencia allí me hacía feliz, pero por alguna razón, también me ponía nerviosa. El chico no suele venir a mi cuarto, por ello me hacía presagiar que algo malo hubiese ocurrido.
- ¿Estas bien? ¿Pasó algo? - Interrogué al menor de los gemelos en vista de que al parecer no iba a romper el silencio por su propia cuenta.
- ¿Tiene que pasar algo malo para que te venga a ver? - Respondió él con una sonrisa de costado.
- No lo sé, dime tú...- Respondí algo nerviosa. El chico me invitó a sentar junto a él. Una vez a su lado me abrazó. Se sentía cálido. Había olvidado lo bien que se sentía estar en sus brazos. Recuerdo que cuando era mas pequeña me encantaba dormir abrazada a él. Me hacían sentir segura. Hundí mi cabeza en el hueco de su cuello y me quedé ahí, esperando a que el tiempo se detuviera en ese momento.
- Estas tan grande- Dijo finalmente el chico mientras acariciaba mi cabello sin romper el abrazo.
- Tu también lo estas...-
- Lo digo en serio, has progresado mucho estos días... No por nada estamos en el mismo equipo...- Sonreí para mis adentros. Él sabía que me avergüenza mucho recibir cumplidos, aun cuando los merezca, supongo que por ello no esperó mi respuesta y siguió hablando- Siento no haber estado más presente en...-
- ¿De qué hablas Sakon? No fue tu culpa...-
- Déjame terminar...- Dijo en lo que pareció un regaño, pero fue tan dulce... - No pude hablarte acerca de... ya sabes...- Me alejé un poco de él para poder verlo a la cara. La verdad es que no entendía a qué se refería
- No sé de qué hablas...-
- Vamos... Si sabes... Es eso...-
- No entiendo- Respondí algo divertida, pues se notaba que estaba algo incómodo con el tema. Luego de un momento en silencio, tomó aire y suspiro pesadamente. Me miró a la cara y hablo al fin.
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Incorrecto [Kimimaro Fanfic]
Fiksi PenggemarHa estado sola desde que era un bebé. Las personas en su vida han tomado el camino equivocado, pero solo los tiene a ellos, a los que ama, y seguirá. Hará lo que sea necesario para mantenerlos a salvo y seguir a su lado, aunque eso le cueste su prop...