Crush. |RICHERLY|

5

Richie se acercó a Beverly, quien se encontraba en las escaleras de la escuela, sentada, a punto de llorar.

- ¿Bev? ¿Estás bien?- le preguntó el chico de ojos cafés.

- Si, es solo que he encontrado algo que no es muy agradable.- respondió Beverly, limpiándose las lágrimas de los ojos.

- ¿qué era?- preguntó Richie. La chica de pecas le tendió un papel, el cual Richie leyó en su mente. Al instante levantó la vista hacia Beverly.

- Esto no fué lo que yo escribí.- exclamó, molesto y confundido, pero al instante se arrepintió; había olvidado, por un segundo, que Beverly no sabía que las cartas que había estado recibiendo eran de él.
Ella levantó la vista.

- ¿Eras tú? ¿El de las cartas?- preguntó ella. Richie suspiró y asintió.- ¿por qué lo haces?- lo miró, confundida.

- Pues porque me gustas, ¿qué más?- admitió el chico. Beverly apartó la vista, pensativa.

- ¿por qué escribirías algo así?- dijo, con las lágrimas agolpándose nuevamente en sus ojos.

- No, Beverly, yo no fuí.- insistió Richard, pero ella hizo caso omiso, levantándose de su lugar sin soltar una palabra. Richie suspiró y le dedicó una última mirada a la carta, en la cual se leía:

"¿Cómo van las cosas en casa, 'Bevvie'?"