Just one more dance, please

Parte 3.

Miércoles 1:15

Misha miro a su amigo con los ojos bien abiertos, el pobre apretaba con fuerza su suéter y podía sentir claramente como todo su cuerpo temblaba, Dorian mantenía la cabeza agachada y sentía esas asquerosas ganas de vomitar en su garganta, para él, nunca fue fácil ir contra las reglas se ponía extremadamente nervioso y comenzaba a pensar en los pros y los contras y para el existían más contras en aquella decisión, que ya había tomado, aun ni siquiera hacia nada, pero ya estaba tan nervioso.

Misha estaba extremadamente feliz, por fin su pequeño estaba arriesgándose, pero al ver su estado decidió no dejarse llevar y pensarlo mejor.

-¿estás seguro?, irán chicos de otros salones y de tercero, puede que no te sientas del todo cómodo-

-es... - Dorian suspiro ¿estaba seguro?, no, claro que no, pero quería cambiar, quería que Cristóbal Montero lo notara, aunque sea una vez–estoy seguro- levanto la mirada y soltó a Misha, su corazón por fin se estaba calmando y sus manos ya no temblaban tanto.

-de acuerdo, la fiesta es el viernes, te cuento los detalles después- y su amigo se fue con una sonrisa adornando sus labios.

Dorian camino hasta el auto que lo esperaba justo en la entrada de la escuela, su chofer no pregunto nada y una vez dentro del vehículo comenzó a pensar sobre lo que le dijo Misha.

La fiesta seria el viernes, justamente el viernes sus padres estarían en casa todo el maldito día y todo en su mente se desplomo, literalmente todo en su cabeza se volvió un caos.

1:27 y Dorian seguía en el auto, el chofer trato de llamar su atención pues sin saberlo ya llevaban 4 minutos en el auto.

-joven, hemos llegado- era curioso pues en lo que llevaba trabajando con la familia ni una vez tuvo que pronunciar aquellas palabras, pues los tres siempre se encontraban atentos y alerta de todo, al llegar a algún lugar rápidamente bajaban.

Dorian vio la entrada de su casa, escucho a su chofer, tomo sus cosas y bajo rápidamente del auto, estaba totalmente avergonzado de que su chofer tuviera que verlo en aquel estado tan bobo.

Jueves 3:48

Dorian había invitado a Misha a su casa, sus padres trabajarían hasta la noche y tenían toda la tarde libre.

Otra cosa que Misha aprendió con los años sobre su amigo, era que este se mordía las uñas cuando estaba nervioso y ahora mismo parecía que se quedaría sin ellas de seguir así.

-¿Dorian podrías decirme que sucede?

Y ahí estaba de nuevo, Dorian odiaba que su amigo detectara tan rápido cuando le sucedía algo, a veces creía que nunca sería capaz de esconderle nada.

Lleno sus pulmones de aire y miro a Misha fingiendo que estaba tranquilo, pero como era de esperarse Misha no se tragó una actuación tan mediocre, él sabía que su amigo no lo había llamado solo para pasar el rato.

Dorian se sentó en la cama junto a Misha volvió a suspirar y de nuevo la horrible sensación de querer devolver todo alimento que había ingerido se hizo presente, paso su lengua por sus labios con delicadeza, ni siquiera estaba seguro de que era lo que iba a decir o porque se sentía tan nervioso.

-es sobre la fiesta, y... yo no creo que...-

-¿que puedas ir?- Misha los interrumpió imaginando lo que diría –ya me lo esperaba Dorian, no te preocupes, no te iba a obligar de todos modos.

Dorian parpadeo repetidas veces, parece que Misha aún no lo conocía del todo, Dorian nunca se echaba para atrás con algo que decidía, así que trago saliva y volvió a separar sus labios.