Capítulo 2

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-La última prueba llegará pronto, Sasuke-kun –le murmuraba en el oído- me pregunto, ¿cuál será tu elección después de todos estos años? No puedo negar, que me siento muy curioso al respecto

-Cállate –le ordenaba, alejándose rápidamente de él- no he venido a eso

-¿Entonces a qué? –Sonreía con malicia. Extendió sus brazos, de manera que quería abrazar al Uchiha- ¿no me has extrañado?

-Debí de acabar contigo antes –respondió con frialdad- terminaré lo que empecé hace años...

-Ah sí...-contestó divertido- ¿y con qué me matarás? ¿Ya te has visto en un espejo? –Nuevamente esa sensación extraña inundaba el cuerpo de Sasuke. En un momento, al girar el rostro ahí tenía un espejo; solo veía su cara, pero entonces se percató de la referencia que Orochimaru le hacía. A su parecer, había activado su sharingan y rinnegan, pero al mirarse, pudo constatar que no estaban activos, ¿cómo era posible? El sharingan simplemente no podía fallarle, entonces, ¿por qué? Otra vez se sentía nervioso, las manos le temblaban y al fondo escuchaba la risa burlona de su antiguo mentor-

-Entonces, Sasuke-kun, ¿qué es lo que harás? –De repente, el sannin estaba detrás de él- ¿aun así, podrás matarme? –Sasuke solo lo miraba de reojo- después de tantos años, de nuevo te veo débil.

Como siempre, tu problema es... -el chico sintió la lengua larga del otro lamer su mejilla. Se exaltó, y una marea de recuerdos inundó su cabeza-

Tú falta de odio

Sasuke despertó levantando la mitad de su cuerpo de la cama. Sudaba un poco, nada típico en él. Miró a su lado, Naruto no estaba.

De repente, escuchó que la puerta de su habitación se abría. La luz del pasillo alumbraba un poco el lugar

-Te he despertado –murmuraba con suavidad- discúlpame Sasuke- el chico negó con la cabeza-

-¿Qué sucede? –Respondió intentando parecer normal-

-Es una emergencia, me estaba cambiando. El clon que dejé en la oficina acaba de hablar con Shikamaru –Naruto se tensó un poco- pasó algo con Orochimaru

-¿Qué dices? –Intentaba no parecer sorprendido-

-Ha desaparecido –contestó directo- y... el capitán Yamato... -el rubio desvió la mirada- está muerto

-El chico abrió los ojos de par en par- ¿estás bien? –Atinó a decir. No sabía que otra cosa responder-

-No puedo creer que haya sucedido esto –habló con notoria tristeza en su voz. Si no fuera porque se había convertido en Hokage, en esos precisos momentos, estaría llorando. Aun así, Sasuke podía sentirlo.

Naruto tenía mucho dolor en esos momentos-

-Te acompaño –se levantó rápido de la cama para cambiarse, pero el Uzumaki lo detuvo-

-Quiero que te quedes y descanses –dijo acariciando el rostro del Uchiha. Estaba a punto de contrariarlo como siempre, pero con uno de sus dedos Naruto le tapó la boca- además si algo pasa en la aldea, necesito que alguien me cubra mientras no esté. Y ambos sabemos que la única persona que puede hacerlo eres tú

-De acuerdo –murmuró desviando la mirada-

-Perdóname. Además, sabes que sería complicado por la relación que tuviste con él –Sasuke suspiró resignado-

-Te estaré esperando –se dejaba acariciar. Le gustaba sentir la mano del rubio en su rostro. Especialmente después de una pesadilla como esa-

-No tardaré –sonrió ampliamente- cuídate ¿sí? –Terminó por darle un beso en los labios y desaparecer detrás de la puerta. El moreno sentía como el chakra de Naruto se alejaba.

Fuego oscuro, fuego negroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora