Jamás en su vida se había sentido tan débil, llega rápido a su cuarto y se deja caer en la cama. Todo le pesa, no puede ni con su alma, ni con su cuerpo. Empieza a llorar, mientras un dolor en su vientre se apodera de ella.
¿Jamás iba a conseguir que Niall se separara de Holly para estar con ella?
Aquello la debastaba, y mucho.
Y ahora, lo peor es que su estómago pedía por comida. Tenía unas cuantas frutas en la mesa de su cuarto, tomó una y se la metió a la boca. La comió rápido y después, comió más. Hasta que esta llegara a su fin, tomó un vaso de agua y de nuevo se echó a la cama.
Y ahora, como siempre pasaba, la culpa de comer, sentirse más gorda y querer ser mejor que Holly.
Se levanta rápido de la cama y va hacia el baño, se pone de rodillas frente a la taza de baño y se mete dos dedos a la boca, en el baño sólo se escuchan arcadas.
Después de terminar de vomitar siente de nuevo su cuerpo débil, y ni siquiera puede levantarse, se tira al piso y empieza a llorar.
Quisiera algo mejor.. que él solo la quisiera a ella.
***
El día siguiente es mucho peor, se levanta con el cuerpo lleno de dolor. Se ve al espejo, esta más pálida que nunca y aquel cabello rubio le va horrible así.
- Nialler jamás me querrá así de fea.. –Suspira ella frente al espejo- Fea, gorda..
Y empieza a criticarse frente al espejo. Después de haber llorado frente a su reflejo se mete a la ducha, ni siquiera puede sostener su cuerpo.
Y como puede termina de bañarse y alistarse para el colegio, baja rápido las escaleras y ve a su padre abajo.
- ¿Ya nos podemos ir? –Pregunta ella, su padre frunce el ceño al verla tan mal.
- ¿Te sientes bien cariño? –Le pregunta el rápido, acariciándole el hombro.
- Si papá –Él asiente algo confuso.
El camino es muy incómodo, ve a su hija algo delgada. ¿Cómo demonios puede estar más de lo que ya estaba antes? Hablará después con su esposa, su hija no ha comido con ellos desde hace meses, y siempre esta en su habitación comiendo de forma sospechosa.
Cuando por fin se estaciona afuera del colegio, la mira.
- Si te sientes mal, puedes llamarme ¿Si? –Ella asiente- Suerte preciosa.
Ella le besa la mejilla y sale del automóvil.
Camina hasta su casillero, lo abre y deja caer su cabeza en este, siente unos mareos que no la dejan en paz. Respira profundo, y va a su primer clase, educación física.
Era el colmo, se pone el uniforme para esa clase, un pequeño top que solo le cubría los pechos y algo del vientre, y una licra que le cubría debajo de las nalgas.
Se toma el cabello en una cola, y se pone a trotar como dice el profesor, Holly va atrás de ella, pues están en esa clase juntas.
No puede evitar darse cuenta que esta algo pálida y flaca. Niall tiene tanta razón, ayer le había dolido tanto verlo llorar.
- ¡Vamos, paren de trotar y empiecen a correr! –Grita el profesor.
Todos hacen caso, Holly mira el cuerpo de Megan, al parecer no tiene ganas de correr hoy.
Pero eso de tener ganas desaparece, cuando la ve caer al suelo. Llena de pánico se pone frente a ella y la empieza a mover.
- ¿Megan? –Le llama, ella no responde- ¿Megan? ¡Contesta!
Después, el profesor se acerca a ellos.
- ¿Qué ha pasado? –Se inclina, y pasa sus dedos para tomar el pulso.
- No tengo idea, ella se desmayó –Dice Holly rápido.
- Tranquila, la llevaremos a la enfermería –La rubia asiente y se levanta rápido- ¡Tomlinson! –El castaño se acerca rápido y mira con determinación a la chica, es Megan.
- ¿Qué pasa? –Pregunta él rápido.
- Llévala a la enfermería, ahora –Él asiente y la toma en sus brazos.
Holly la ve irse y después sin decir nada sale corriendo de ahí, tiene que avisarle a Niall.
***
- ¡Niall! –Le llama ella, él voltea rápido.
- ¿Qué pasa? –Le pregunta.
- Megan esta en la enfermería, se desmayó –Habla rápido, Niall siente como su cuerpo se paraliza en ese momento.
Y ahora era el momento... de hablar seriamente con ella.
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Novia Anoréxica «n.h»
Fanfiction«La falsedad tiene alas y vuela, y la verdad la sigue arrastrándose, de modo que cuando las personas se dan cuenta del engaño ya es demasiado tarde.» La dramática historia de una chica con trastornos alimenticios, y mucha, mucha inseguridad...