las luces delanteras Iluminando las siluetas de los Arboles recordándome una delgada figura familiar, mis dedos se ajustaban al volante con cada suspiro y mis lágrimas caían segundo tras otro; el camino comenzaba a tomar forma, eso significaba que estaba cerca de la salida y... así de la casa de slend, note mis mejillas humedecerse más de lo que ya estaban; tan sólo con pensar siquiera en su nombre mi cabeza explotaba.. joder ¡¿PORQUE NO PUEDO SER CAPAZ DE DEJAR MIS COSAS Y CORRER CAYENDO A SUS BRAZOS?! la respuesta es... porque soy muy orgulloso, no soy capaz de aceptar los errores; no es que esta vez sea yo el que lo cometió, pero lamentablemente no se afrontarlo, dentro de mi sentía el impulso de detenerme frente a la casa, pararme frente a la puerta, abrirla y darle un buen beso a slender, pedirle una gran disculpa y volver todo como era antes; y como con el hecho de que me gusta, trate de convencerme de eso, de que es posible una vez en mi puta vida disculparme con alguien, frene en seco frente a un gran conjunto de árboles que dejaba ver a la perfección la luz de la casa, baje del auto y subí al capo con toda la determinación que me era posible tener en mi arruinada existencia y tomando caladas grandes de aire grite por último.
-te quiero slendy... ¡lamento si es tarde y ya no quieres volver a verme! ¡lamento si lo arruine todo! ¡lamento ser tan susceptible! ¡También tan intolerante! ¡te quiero slend! ¡te quiero!- Recupere el aliento tras esa larga frase y ahogue un sollozo que amenazaba salir de mi garganta, mordí mi labio para reprimir el gesto que me provocaba el llanto y en silencio deje escapar un par de lágrimas, soy muy sentimental joder... soy idiota y necio; slender no mostraba señales de vida, nada se movía o se escuchaba a mi alrededor, caí tendido sobre el capo y ahí me quede... observando las estrellas, por un buen tiempo -slendy... ven aquí, estoy para ti... por favor, no me dejes así, no quiero estar solo, te quiero... mucho
Y tras ese susurro que asemejaba a un niñita pequeña llamando a su padre, rompí en llanto, quisiera poder tener párpados para frenar estas estúpidas lágrimas pero lamentablemente ya no existían, pase repetidas veces la manga de mi sudadera por mis mejillas para sacarles, más aún así el llanto insistía en mantenerlas húmedas, y slender seguía sin aparecer, me acurruque en mi mismo haciéndome ovillo, ajustando con mis manos mis rodillas y metiendo mi cabeza entre ellas, me repetí a mi mismo que todo estaba bien, que simplemente era otro chico al que le importé un carajo y sólo quería mi "virginal" cuerpo, que slend simplemente no era el indicado y que debía seguir con lo mío, que mis putos sentimientos no iban a dañar mi estilo de vida común, que podía seguir matando como un desquiciado y nada se interpondría en eso, que si soy un delicado... pero eso no va a cambiar.
-slend... ya aprendí la lección... vuelve con migo... te necesito- Mi lengua le gano a mi cabeza, me descubrí a mi mismo tratando de no convencerme de eso, obligando con navaja en mano a mi boca a decir esas palabras, y enfurecí, maldita sea... malditos desórdenes mentales, malditos sentimientos, maldita cabeza, maldito pasado- ¿slend?
Escuche ruidos venir de la casa, baje del auto y a paso rápido pero sigiloso me acerque a dónde supuestamente debería estar la habitación de slendy, la luz estaba encendida, pude distinguir que un par de tentáculos de slender se movían a través de la habitación, escuche otra voz... otra que no era la de slend... una voz femenina.
-¡para! no... ¡basta ya! ¡por favor no me lastimes! ¡no me hagas daño!
Rogaba a garganta rasgada la chica ahí adentro, me aleje para tener mejor campo visual de lo que sucedía en la habitación, un tentáculo en la boca de la chica, ropas rasgadas... slender completamente extasiado y en la misma posición de la chica, sin poseer ni una prenda, puse una mano sobre mi boca para ahogar un grito, lo que fue imposible, después de unos segundos la ira se había contenido en su mayor nivel dentro de mi, entré a la casa hecho furia con cuchillo en mano dispuesto a despedazar cualquier cosa que se me pusiera en frente, me detuve en seco pensando... "es su vida, puede hacer lo que quiera, puede follar con quien quiera... pero ahora no va a tener que ver nada con migo joder, nada" gire en mis talones para acto seguido escuchar los espeluznantes rechinidos de la puerta detrás de mi, una asustada y ensangrentada muchacha paso corriendo a mi lado, saliendo despedida por la barandilla de las escaleras, lo que me provoco algo de risa, sentí una mano en mi hombro, instintivamente mis nervios atacaron.
-ni pienses en tocarme... no te quiero volver a ver jamás en mi vida ¿¡entiendes!? ¡jamás!
La risa se apagó para dar lugar a la desesperación y mis lágrimas brotaban a cataratas, me solté y me aleje un par de pasos de el, tomé aire tratando de controlar mi tono de voz.
-vine totalmente dispuesto a disculparme contigo, porque quería que lo nuestro no fuera simplemente un juego, porque sentía que me había equivocado... pero en realidad era sólo un pequeño capricho sin significado... pero lo que acabas de hacer no tiene perdón slender... no te quiero, hasta nunca imbécil

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ASSASSINS LOVE®
RomanceCuando creías que los monstruos no tienen sentimientos y que los asesinos viven sólo para matar llega este romance entre dos jóvenes que te hará mirar las cosas de una manera diferente... Contenido explícito, leer bajo discreción. (Si alguien llega...