-Fragaria-

Capítulo 2

Melody

Llevo varios días buscando un lugar donde pueda irme a vivir, no es sencillo muchos de los lugares que aparecen en páginas de internet ya están ocupados o se salen de mi presupuesto.

Debo agregar que estos días han sido un poco por no decir que muy agotadores, Louisa aún intenta comunicarse conmigo, y yo sigo ignorándola, mamá y Robert también han intentado hablar conmigo sobre el asunto de irme de la casa, supongo, no lo han logrado, los días en los que trabajo llego tarde a casa y directo a mi habitación, y mis días libres salgo temprano a buscar algún otro lugar para vivir y llego muy entrada la noche.

Suena la alarma, son las siete de la mañana, no me quiero levantar, aún tengo tiempo antes de que despierte mi madre y puedo hacer un poco más de pereza antes de salir a buscar un apartamento, ando mentalmente fatigada y mi único consuelo es que hoy no tengo que ir al restaurante, no tengo el ánimo suficiente para atender comensales y sonreír aún cuando se ponen irritantes y quisiera lanzarles las bebidas encima.

-¡Hija, despierta!- escucho una voz lejana y me remuevo entre mis sábanas.- Vamos Melody ya estás muy grandecita para hacer eso.- vuelve a hablar la voz que reconozco ahora como la de mi madre y no puedo evitar gruñir.

-Déjame dormir.- menciono con la voz ronca a causa de estar despertando recién- aún es demasiado temprano.

-Hija, es mediodía- habla de nuevo mi madre y al analizar su frase me lanzo literalmente de mi cama, golpeándome en el proceso- ¡Melody! ¿Estás bien?- pregunta riendo un poco.

-Si si- respondo tirada en el piso también riendo por lo ridícula que resulta la situación.

-Robert viene en una hora y media a almorzar, así que quería preguntarte si podrías ayudarme a cocinar- vuelve a hablar mamá cuando se le pasa la risa y ya me encuentro de pie frente a ella.- por favor hija, así podemos explicarte bien lo ocurrido hace días.

- Mamá no hay nada que me deban explicar, yo entiendo que quieran la casa para ustedes no más.- hago una pausa en la que me estremezco y mi madre ríe- por eso ya estoy buscando un lugar para irme a vivir, igual deja me ducho y bajo a ayudarte.- dicho esto voy al baño de mi habitación a tomar una ducha rápida y así poder a ayudar a mamá.

Mi madre no menciona nada más y escucho la puerta de mi cuarto cerrarse, duro aproximadamente quince minutos en la ducha y me toma otros cinco poneme algo de ropa, estaba decidida a salir a buscar un lugar pero ciertamente mi ánimo no ha mejorado mucho desde que mi alarma sonó esta mañana así que he decidido quedarme en casa.

Cuando bajó a la cocina veo que mi madre ha adelantado una rica ensalada césar, está haciendo lo que supongo es el aderezo y huele delicioso.

-Que rico huele , mamá.- digo y ella al escucharme se gira a mirar- haré una crema de champiñones para acompañar, junto a patatas hervidas y una pechuga a la plancha, si te parece bien claro esta.- digo después de revisar lo que hay dentro del refrigerador.

-Me parece excelente, a Robert le gustará y ya sabes que a mí me encanta cualquier cosa que cocines.- dice ella aún ocupada con el aderezo- pensé que habías cambiado de opinión.

-No, creo que ya fueron suficientes días evadiendolos, solo por favor no me corran como lo hicieron el otro día.- digo lavando los champiñones y cortando algunos en trozos más pequeños.

- Sabía que nos estabas evitando, eres demasiado obvia, sin mencionar el hecho de que soy tu madre y te conozco.- dijo ella terminando el aderezo y dejándolo a un lado- creo que ese día no dijimos las cosas de la manera correcta.

-¿Qué quieres decir con eso?- pregunte ya poniendo al fuego lo que sería mi crema de champiñones y empezando a porcionar el pollo.

- Ahora te darás cuenta, iré alistando los cubiertos y los platos.- sin darme tiempo a replicar salió de la cocina y me dejo sola.