¿Te gusta?

251 13 2
                                    

—Buenos días, bueno mejor dicho tardes, amor— escuche su voz y seguido de algo húmedo en mi frente

—¿Cuanto tiempo he dormido?— dije

—Desde ayer, en la tarde— dijo

—¿Y que hora es?— dije sin aun abrir los ojos

—Son las... 5:30— dijo y solté un bufido— pero no te preocupes, sirvió de algo, hice de nuevo la cena y yo solo— dijo aire de orgullo y abrí los ojos

—No era necesario— dijo tomando su cara y besándolo en los labios, sentí como temblaba

—Claro que lo es— dijo separándose— ahora levantate y vamos a cenar— dijo levantándose

—¿Así vestida?— dije señalando la pijama de ositos

—Si, es súper tierna— dijo causando un leve sonrojo en mi

—Me pondré algo decente, Rubén— dije

—Esta bien, muhé— se acerco y me besó— te espero allá— dijo saliendo de la pieza

Me levante y fui al baño, me mire en el espejo y tenia aun aquel maquillaje de las gemelas, esperen hablando de gemelas, dijeron que me habían dejado una sorpresa debajo de mi cama, lo había olvidado por completo, tal ves sea ropa. Fui en busca de esa sorpresa, me agache y mire una caja debajo de mi cama, la saque y la puse en la orilla de la cama. La abrí y me encontré con: ¡¿LENCERÍA?! Sentía como mi rostro se calentaba, escuche los pasos de Rubén y cerré la caja. Me metí al baño con la caja y cerré la puerta.

—Están completamente locas si creen que usare esto— dije elevando un pequeño vestido de dormir transparente blanco con celeste, mire mas adentro de la caja y— ¿Cómo rayos habrán conseguido mi talla?— tomando el sostén y la ropa intima haciendo juego con el vestido

Mi cara estaba exageradamente roja, ¿y si tienen razón? ¿y si me entrego a él? ¿tendré el valor para usar esto?. Me di una ducha pensando aun es si hacerlo o no. Puse la toalla a mi alrededor y salí del baño por ropa y en ese instante entró Rubius.

—Perdón, perdón— dijo, no lograba emitir una palabra, estaba sonrojada

—S..si..s..i— tartamudeo

—Te dejo sola— salio incómodo

Encontré un lindo vestido blanco en mi ropero, el cual jamas había visto. Había una etiqueta en él, la quite y la leí.

Disfruta tu noche, te queremos.
—Ariel y Ally"

Saque el vestido y lo levante en el aire, era demasiado sencillo, tenia unos tirantes finos y la tela era de seda. Entre al baño, me puse la ropa interior y el vestido de las gemelas. Mis manos y piernas comenzaban a temblar, podía ver un poco mis piernas ya que el vestido era corto, mi corazón se acelero. Tome un bocanada de aire y abrí la puerta, una canción comenzó a sonar. “Kiss me- Ed Sheeran", camine por el pequeño pasillo, el vestido bailaba en mis caderas, lo vi sentado en el sofá con la mirada en sus pies y levantó la mirada y su quijada callo un poco provocando un leve sonrojo.

—E..es..estas— se levanto y se acerca— hermosa— dijo tomando mi mano y dándome una pequeña vuelta en mi eje, haciendo volar el vestido y solté una risa nerviosa

—Gracias— dije con un grande sonrojo

—Vallamos a cenar— dijo besando mi frente

Tomo mi mano y se dirigió al comedor, el cual ya estaba todo servido.

—¿Tu lo hiciste?— dije impresionada

—Solo— dijo haciendo una mueca graciosa— según cheeto te gustaría mas

Había dos platos de cada lado, uno tenia espagueti con salsa de tomate arriba acompañados de tres pequeños rollos y en el otro plato había ensalada con tomatillos, y una copa de vino. Habían tres rosas en medio acostadas y pétalos alrededor, una lampara en un lado, con la botella de vino aun lado. Las luces se apagaron, sentí el aliento de Rubén en mi cuello y beso mi hombro.

—¿Te gusta?— dijo, pude sentir como sonreía y apoyo su mentón en mi hombro, me rodeo con sus brazos en mi cintura

—Es hermoso— dije mordiendo mi labio inferior

—No más que tu— dijo, me gire y lo bese— hay que cenar— dijo, tiro de la silla— por favor— dijo haciendo una señal para que me sentara

—Gracias, es usted un caballero— dije sin dejar de ver sus ojos verdes

—Y usted una hermosa dama— dijo, se fue hasta el otro extremo y se sentó— provecho— dijo con una hilera de dientes

—Provecho— repetí

Una hora después

—Y le dije a Mangel— dijo— si me hubieras hecho caso no estuviéramos en el hospital— dijo y reímos al mismo tiempo

—Sólo a ustedes se les ocurre subirse a un árbol y borrachos— dije limpiando una lágrima

—Me encanta tu risa— lo mire y me miraba fijamente y sonreí como estúpida

—Te amo, Rubén— dije y tomó su silla y la puso a un lado de mi

—Te amo, Alexis— dijo paso su mano en mi cabello, me miraba fijamente, sus ojos me intimidaban, un sonrojo se hizo presente— eres hermosa y mia— dijo

—Siempre tuya— dije acercandome a él

—Siempre tuyo— dijo juntando nuestros labios

Perdón por no subir, el viernes no pude y saben que sábado y domingo no subo:c y ayer xd me quede leyendo y no tuve tiempo para escribir. Ojala les guste el capítulo, las amo:3 nos leemos después.

Maldito el día que te conocíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora