03

5.3K 766 447
                                    

°
°
°
°
☁                                                    ☁

[...]

Changbin estaba terminando su examen.

—dos minutos y retiro las hojas.

Escuchó el chirrido de otra silla y apuró su mano para escribir más rápido. Se ponía nervioso cuando lo apuraban y más cuando la sala comienza a vaciarse. No es que no supiera, si sabe, y mucho pero desarrolla demasiado por miedo a dejar incompleto.

—30 segundos.

Changbin extendió el examen. Terminó, con 30 segundos de sobra. Se levantó, tomó su mochila y abrigo saliendo del aula.

—¿te fue fácil?—Hyunjin se unió a él apenas cruzó el umbral.

—sí, estuve al borde del colapso cerebral de todas formas. Pensé que no llegaba.

—te ira bien de todas formas.

—lo sé. —sonrió y Hyunjin lo hizo tambien—¿y cómo te fue a tí?

—bien, supongo. Termine con 15 minutos de sobra.

Changbin paró y el menor al ver que no avanzaba lo imitó.—¿qué pasa?

—¿esperaste por mí?

Hyunjin se rascó la nuca con una sonrisita nerviosa que en seguida cambió a una confiada.

—lo hice. Quería que me acompañes a la cafetería. Yo invitó. Mi turno comienza en una hora, podemos ir a almorzar.

Chang lo pensó. El menor se había quedado para invitarle el almuerzo, no estaba bien no aceptarlo.

—bien, voy. Pero yo pago lo mío.

Hyunjin bufó. Caminaban juntos, los pies de Changbin eran pequeños ante los de Hyunjin, lo mismo pasaba con su estatura y eso le hacía sentir que perdía autoridad.

El menor era bonito y divertido. Su conducta seguía siendo la misma, todo un Don Juan. Changbin escuchaba lo que decía, su voz con ese toque de seguridad.
Las manos de Hyunjin tambien eran grandes comparadas a las de Changbin y el mayor lo notó cuando Jin tomó su mano luego de rozarse varias veces. Encajaban perfecto y eso hizo que Bin enrojeciera. Hyunjin desvió su mirada para sonreir sin que Chang lo viera.

Al llegar a la cafetería tomaron asiento cerca de la barra, donde tanto le gusta a Changbin. Hyunjin saludó a sus compañeros del turno anterior y se sentó en frente del mayor.

—¿qué vas a pedir?—preguntó Hyunjin.

—¿qué me recomiendas?

El menor sonrió.—umh, ¿qué tal pollo?

—¿en una cafetería?

Changbin rió, que absurdo.

—no es una cafetería común y corriente, hyung. ¿a caso no leíste el menú?

El mayor lo tomó y sí, aparecía la opción de pollo y todas las comidas que se te pudieran cruzar por la mente dentro de los límites.

—wow, ¿por qué no lo ví antes?

—porque es el menú del mediodía. A la mañana y a la tarde solo ofrecemos cosas adaptadas al horario.

—¿y qué tal si yo quiero pedir pizza a las cinco de la tarde?

—sí es por tí, haría una excepción. —Chang volvió a sonrojarse. Últimamente mucho en tan poco tiempo—claro, si quieres que yo te atienda, ¿ó prefieres a Woojin?

El mayor arqueó una ceja.

—¿qué van a pedir?—el mozo que se acercó revolvió los cabellos de Jinnie.

—traenos por favor pollo y para él ...

—una coca-cola.

—que sean dos.

—vale, ya les traigo su pedido.—antes de irse le guiñó un ojo a Hyunjin. Changbin no se la dejó pasar.

—¿comparten turno?

—umh, a veces. Mayormente Jinyoung esta a la mañana y yo a la tarde, pero somos muy buenos amigos.

Chang asintió con la cabeza. No estaba molesto, claro que no pero ¿por qué se sentía así?

Su cara de confusión como si tuviera una guerra en su mente. Hyunjin lo miraba y sonreía como tonto.

—hyung, ¿le puedo decir algo sin que se ofenda?

Chang volvió a la realidad y asintió.

—am, claro.

Ni una gota de nerviosismo, solo lo dijo.

—eres muy sexy.

Se atragantó con su saliva—¿qué?

—ay hyung, no te hagas. Ya lo sabías.

—amh...

—aquí esta su orden.

El mayor con sus mejillas tan rojas como un tomate se dispuso a comer. Jin lo miraba y sonreía poniendolo aún más nervioso.

—deja de mirarme y come.

—no puedo.

—¿por qué?

Changbin dejó el pollo de lado, esperaba la respuesta.

—me gustas Changbin hyung.

senpaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora