005- Dejavú [2/2]

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Tardaría al rededor de una hora en la tina, pediría servicio a la habitación, vería alguna película y se iría por la noche, disfrutaría sin pensar en cuanto le regañarían al día siguiente. Su plan era perfecto.




Suite presidencial, ahí es donde se encontraba. No se había preocupado de cómo había llegado a la cama en la que despertó esa mañana hasta este momento, sabía que fue a un hotel a beber y que su propósito era pasar la noche en dicho hotel pero, ¿la suite presidencial, en serio? ¿Fue su idea o del hombre que vió al despertar?

Ahora que reflexionaba las cosas, en realidad aquel hombre parecía bastante normal –si ignoras la belleza sobrenatural que poseía–. Es cierto, no estaba en las mejores condiciones la noche anterior y gran parte de sus recuerdos después de llegar al bar eran borrosos pero cómo es que terminó casi desnudo en la cama de una suite presidencial y más importante cómo terminó en la misma habitación que ese rubio.

Todo esto es lo que Jungkook ahora empezaba a cuestionarse.

¿Quién es ese hombre que se hace llamar Taehyung, qué clase de persona es? ¿Cómo terminó durmiendo con él y por qué sentía–

"¿Señor sigue ahí?" Preguntó la señorita al otro lado de la línea haciendo a Jungkook volver a la realidad.

"Sí, si. Disculpe" y empezó a pedir más comida de la que debería comer. Colgó, se acomodó en el sofá frente al gran televisor y tomó su celular que había dejado en la mesita entre estos.







Se sentía incómodo, lo cual era extraño porque él sería la última persona con la que debería sentirse así. Todo ese tiempo desde la vez anterior que vió a Jungkook se debatió consigo mismo si debía o no decirle, sabía que podía confiar en él pero era inquietante pensar en que pensaría el mayor, ¿y si le tachaba de obsesionado?

"Y bien, ¿me dirás qué te pasa?" Taehyung se quedó rígido, ¿acaso era tan obvio? Trató de disimular y evadir el tema.

"No entiendo a qué te refieres, no me pasa nada"

"¿De verdad?" Rió incrédulo "Haces lo mismo desde que aprendiste a mentir y no soportas ocultar las cosas" le miró a los ojos "Sonríes cuando das respuesta, justo de ésta manera" llevó su dedo índice a un costado de los labios del menor, señalando la sonrisa que yacía posada en sus labios.

"Si, claro" respondió con seriedad pero aquel hábito que desarrolló inconscientemente le traicionó, he ahí la sonrisa de la que hablaba Yoongi.

"Eres mi hermano Tae, no quiero obligarte a decirme algo de lo cual no estás listo para hablar pero noté esta actitud hace un tiempo y esa vez también callaste. Cual sea la razón, no me agrada la manera en que te pones. Sabes que puedes confiar en mí." Lo sabía, sabía que podía confiar en él pero sus sentimientos jugaban con sus pensamientos y era confuso, su parte racional y sentimental chocando era abrumador.

"Estoy confundido, me contradigo cuando actúo de cierta forma y me siento de otra. Sé que estoy dejando ir de manera muy estúpida por lo que he esperado tanto tiempo, realmente quiero estar a su lado pero ¿qué hago si metiéndome en su camino sólo vuelvo todo más complicado? Sólo debería alej-"

"Ve a su lado, sólo así sabrás si puedes mejorar o complicar el recorrido. Inténtalo, sólo puedes perder nada." Tan bellas palabras. Tae sabía que era así, no podía perder algo realmente significativo, podía perderse él mismo sí pero ¿y qué? No es como si no lo estuviera ya en estos momentos.

Ignoraría su racionalidad como suele terminar haciendo e iría con Jungkook, le ayudaría a sanar si estaba herido y se quedaría a su lado, haría lo que no había podido hacer.

"Me voy hyung, nos vemos la próxima semana" dijo alejándose de inmediato.

Taehyung deseaba que el pelirrojo siguiera ahí, suplicaba por tener la oportunidad de verlo una vez más y poder quedarse a su lado, protegerlo.









Si sólo hubiese observado aquellos detalles como por ejemplo que había ropa en el armario de la habitación, dos portarretrato a un costado en la mesa de noche al lado de la cama o que había una revista con el hombre que vió esa mañana en la portada justo en mesita entre el televisor y el sofá en el que él ahora estaba recostado, de tan sólo haber notado esos detalles Jungkook no habría estado sorprendido cuando vió a aquel hombre entrar por la puerta. Se levantó rápidamente, perplejo por ver nuevamente al rubio.

El desconocido corrió hacia él y lo sumió en sus brazos, un sentimiento extraño tocó su pecho. Quizá fue la conmoción del momento o lo extremadamente cálido que el contacto se sentía pero se quedó quieto, se dejó envolver en esos brazos ajenos. Si tan sólo pudiera recordar a su amigo de bonita y singular sonrisa, al niño torpe con quién compartió bellos momentos o al ángel que le dió una mano cuando no tenía la fuerza suficiente para levantarse, no importaba con cual recuerdo asociara a ese hombre porque seguía siendo el mismo, seguía siendo Taehyung en cada momento.

"Te protegeré, déjame permanecer a tu lado." Ser directo puede no ser siempre la mejor opción pero es la opción que él eligió así que debe enfrentar las consecuencias. Jungkook se soltó del agarre del mayor, observando una sonrisa sincera y una mirada triste, bonitos ojos con lágrimas asomándose fuera. Vulnerabilidad era lo que mostraba.

"No lo conozco, no tengo interés en hacerlo. Y no necesito que me protejan, puedo hacerlo solo" mentiras, sólo eso dijo Jungkook. Tomó el celular que había dejado sobre el sofá y salió de la habitación dejando la expresión triste y la ahora inexistente sonrisa en el rubio.

"¿Qué te ha pasado Jungkookie?" susurró para si mismo con tristeza en su voz.

RAIN | KTH&JJK [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora