Dante y el chico de las estrellas.

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~Dante~

15-09-13

Mi reloj de muñeca marca las 11:45 am, tengo 15 minutos para llegar al funeral de mis padres y sigo sentado a la orilla de mi cama observando la puerta de mi habitación, pensando.

Al contrario de lo que muchos imaginarían no me encuentro en un mar de llanto por la muerte de mamá y papá, mi cerebro no procesa aun que ellos jamás van a regresar y que tampoco podre volver a hacer las cosas más cotidianas e insignificantes junto a mis padres, como acompañar a mi madre a hacer las compras del supermercado o a papá a su oficina.

Hace solo 3 días almorzaba hot cakes en el desayunador, mientras planeaban las vacaciones de navidad y fin de año junto a la familia de papá.

Es increíble lo fugaz que es la vida de las personas y lo rápido que esta puede extinguirse, sin que te des cuenta se va, como una vela recién soplada por un pequeño y débil aliento.

Estoy consciente de los grandes cambios que tendrá mi vida a partir de ahora, pero no quiero aceptarlos, duele y hace que tenga náuseas y un fuerte dolor de cabeza.

Finalmente me pongo de pie y camino lentamente a la puerta de mi habitación, todo va en cámara lenta como si eso hiciera que la dura realidad que me aproxima se retrase un poco más.

Sin darme cuenta bajo a la primer planta y abro la puerta de la entrada, subo al auto y justo al abrocharme el cinturón de seguridad un escalofrió me recorre el cuerpo al imaginar que probablemente si mis padres hubieran decidido conducir en lugar de caminar seguirían con vida.

Después de varias horas en el funeral es hora de regresar a casa, algunos amigos de mis padres se han ofrecido a que pase unos días en sus casas junto a sus familias, me niego ante todas las ofertas pues prefiero descansar solo en mi habitación sin la posibilidad de que alguien me interrumpa en mi duelo y depresión.

Asistieron pocas personas, solo unos amigos de la familia y gente de mi vecindario que a veces visitaban la casa para tomar café y tener esas típicas charlas de adultos con mis padres. Nadie de mi familia estuvo presente, lo cual no me sorprendió en lo absoluto pues no somos muy cercanos que digamos.

Mi familia es muy pequeña, ya que mamá era hija única al igual que yo y por parte de mi padre solo esta su medio hermano Rob junto a su horrible y plástica esposa Paty, tal vez algún primo lejano que carece de conocimiento de que yo existo y de que están muertos.

Al llegar a casa me limito a tomar un vaso con algo de jugo del refrigerador y una manzana para ir a mi habitación. Como la manzana y bebo mi jugo mientras subo las largas escaleras pues mi cuarto esta en el tercer piso, me desnudo quedando solo en bóxer y me dejo caer en la cama.

Antes de que me de cuenta las lágrimas recorren mi cara y mis sollozos se hacen más fuertes con el crecer de la noche.