daddy issues. §Min Yoongi§

10

Take you like a drug

El tiempo había pasado rápidamente, la escuela volvió a ser normal, la relación con mis amigos se intensificó de hecho muchos en el colegio me creían lesbiana por el hecho de que me juntaba con otros hombres. Mi relación con jin se volvió un tanto incomoda por lo que ya no hablaba tanto con el. Y yoongi, pues comenzó a formarse una relación mas intima entre nosotros

Camine entre los pasillo del instituto con mis libretas en la mano, fui hasta el casillero y lo abrí dejando caer una carta, rápidamente deje los libros en su lugar y me agache a rejuntar la carta. El sobre era de color rosa y tenia muchos corazones, abrí este y saque el contenido, un papel con muy pocas palabras, una simple confesión de amor. Frunci el ceño al darme cuanta que la letra era claramente de la chica que se sentaba a lado mio en el salón de clases, pero como no venia el nombre decidí dejarlo así.

Camine hasta a el basurero, iba a tirar la carta pero antes de hacerlo me la arrebataron.

—¿sabias que tirar una confesión de amor es muy cruel? —

—hobi, yo sabré lo que hago con ella — hable mientras caminaba hacia el tratando de quitarle la carta, pero el aprovechando su altura la subía haciéndome imposible el tomarla.

—ocupas clases de como ser buena crush — habló como si es fuera de verdad importante.

—el problema es que no quiero ser buen crush — solté y logre quitarle la carta.

—eres mala ¿acaso es que nadie a movido tan siquiera un poco ese frío corazón? —

—los doctores al operarme — hoseok dejó escapar un gritito de horror.

—¡¿te operaron?! —

—no, ahora calla — camine otra vez hacia el casillero y lo cerré. Ajuste ma mochila a mis hombros y salí junto al rayito de sol.

—eres mala ani-ah — intentó hacer sonar tierno mi nombre pero no lo logro.

—vuelves decir ani-ah y te dejo aquí solo — en este tiempo me di cuenta de que papa y yo pasábamos siempre por casa de hoseok y el tomaba bus así que decidimos dejarlo en su casa, bueno no decidimos si no se lo pedi a yoongi.

—entiendo, no necesitabas ser agresiva —

—no soy agresiva, lo que pasa es que... — me interrumpí a mi misma al ver que mi papa ya nos estaba esperando. Le Sonreí y fui a abrazarlo rápidamente.

—¡Hola señor Min! — hablo hobi y yoongi se limito a asentir. Subimos al coche, yo de copiloto y hobi se fue atrás.

—Hoy iré a la oficina de nuevo ¿quieres ir? — me hablo yoongi y yo me límite a asentir.

—mientras no me dejes con seokjin como la otra vez — hable con un tono bajo

—ya no lo haré — al dejar a hoseok en su casa nos dirigimos a el edificio donde trabajaba y justo como el primer día llego jin después que nosotros

—Buenos días yoongi — habló sonriendo, después me miro y su cara dio un cambio de repente. —Buenos días lania — hice una pequeña reverencia. Entramos y yo en debes de subir hasta arriba como la vez pasada me baje del ascensor dos pisos antes.

—Yoongi ¿donde has esta..? — la misma tipa se interrumpió al verme, no, no era la misma que había hursupado mi cuarto días antes.

—Fui por ella, vamos a estar en mi oficina, no me molestes a menos de que sean asuntos empresariales — hablo y después tomo mi mano para llevarme hacia una puerta en específico.
¿Quien habrá sido? De seguro otra de las tantas que quieren a mi papa.

Me llevo hacia una puerta café, era muy elegante y destacaba de las demás por el barnizado brillante. Abrio la puerta y me dejo pasar a mi primero. Lo primero que hice fue sentarme en su escritorio.

—¿Que haces mocosa? — habló mientras se acercaba a mi y trataba de quitarme de su silla. Yo me opuse y tome la silla dándole a entender que no me movería. Fruncio el ceño y me cargo y se sentó en la silla, por ende me sentó arriba de el. Yo al entrar un poco en pánico por como me cargo tan repentinamente me tense y me apoye en la recargadera dejándole todo mi peso, esta cedió al tener el peso mio y de yoongi por lo que muy torpemente caímos hacia atrás dejándome prácticamente arriba de yoongi, tan cerca que podía  oler mejor su colonia tanto que pude ver a la perfección sus hermosos ojos, tanto que nuestras narices se rozaban y nuestros labios compartían pequeños suspiros indescriptibles, para mi eran de amor puro, y no, no era de un padre hacia su hija, o eso quería pensar.

—¿te lastimaste? — preguntó suavemente. Solo atine a negar con la cabeza sin dejar de admirar sus profundos ojos hundiéndome en ellos como si de una alberca tratase. El pareció hacer lo mismo que yo, suspiro una vez más. Parecía que estaba debatiendo algo dentro de su cabeza, finalmente parpadeo y comenzó a pararse junto conmigo. Acomodo la silla y acerco otra, se sentó en una y yo lo hice con la otra.

—¿Quieres comer? — asentí pero reí como si lo que acababa de pasar fuera una tontería. Lo era ¿no?

Después de aquello, ordenamos comida, fideos para ser mas específicos. Reímos y hablamos mas de lo que hubiera pensado que fuéramos a hablar, me sorprendió. Estábamos recogiendo la poca basura que habíamos dejado cuando tocan la puerta, yoongi y yo nos volteamos a ver e inmediatamente me senté en el sillón mas cercano. Mi padre se acomodo su traje y camino a su lugar sentándose y permitiendo el paso de la persona que estaba tocando. La misma mujer de antes entro con unos papeles en la mano y se los dio a yoongi, se acercó hacia el y le susurro algo en el oído, mi padre asintió y se paro de su asiento caminando  hacia la puerta.

—Has que pase, el y quien mas venga, no podemos desaprovechar una oportunidad así — hablo yoongi y la mujer asintió saliendo casi corriendo. Frunci el ceño sin saber que era lo que pasaba.

—lania, vendrá un cliente importante, quiero que estés junto a mi, es muy, de verdad, muy importante así que comportate por favor — hablo y asentí. Me acomode el pelo y el uniforme tratando de verme mas presentable.

—Buenos días señor Min ¿cuanto tiempo sin verlo? — al verlo entrar por la puerta me tense y abri los ojos. Dios mio ¿por que ahora? El papa de jimin había entrado por la oficina y mi papa trato de Sonreír amablemente. El papa de jimin se giro a verme —lania, no esperaba verla aquí — hice una reverencia. — Que bueno que traje a mi hijo, se vera muy feliz de verla aquí — en cuanto dijo eso jimin entro y quedo estático al verme a mi y a mi padre.

— vaya sorpresa — hablo mi papa con indiferencia. Sus ojos me decían que estaba furioso. —tomen asiento por favor —

El papa de jimin y el mio se sentaron y comenzaron a platicar sobre negocios dejándonos a mi y a jimin un poco alejados.

—¿que haces aquí? — preguntamos al mismo tiempo. Reímos un poco

—vine con mi padre, se supone que solo estaría un rato mas — hable mientras me sentaba en los sillones de ahí y jimin me imitó.

—acompañe a mi papa a hacer negocios — iba a responderle pero escuche un pequeño grito

—¡ya le había dicho que mi hija no se va a casar con su hijo! Si solo vino a perder el tiempo vayase — el papa de jimin dijo algo que no se alcanzó a escuchar, firmo unos papeles y se fue no sin antes hacerle una señas a jimin para que lo siguiera. Este se despidió de mi con una sonrisa y se fue.

—¿que paso? — hable mientras veía como yoongi se acercaba y se sentaba donde anteriormente había estado jimin. Se veía enojado y serio pero no dejaba de mirarme.

—di que eres mía — hablo sorprendiéndome por lo dicho

—papa que estas diciend... — me interrumpió tomando mis manos y haciendo que lo mirara fijamente a los ojos.

—por favor, di que eres mía — suspire sin dejar de verlo

—Soy tuya — y paso lo sorprendente. Sentí los labios de yoongi sobre los míos.