Ya habían pasado tres días desde el incidente en el vestuario donde Rafinha rompió la carta de su "admirador secreto". Y desde ese día, Rafinha esperaba con ansias la siguiente carta; pero no recibía nada. Se sintió muy mal al llegar nuevamente al vestuario, fijarse en su taquilla y ver que no había ninguna carta sobresaliendo de ella.
Rafinha en serio se sentía mal al no tener ninguna carta, ya le había cogido cariño. Con un suspiro se sentó en el banquillo mientras se acomodaba los botines, sintió a alguien sentarse a su lado; pero no le dio importancia y no detuvo sus suspiros de tristeza.
— ¿Estás bien, Raf?
No quiso levantar la vista, sabía que era Marc-André el que le estaba hablando y no quería verlo. Aparte de decepcionado por no recibir cartas, también estaba celoso al ver al rubio alemán estar tan cerca de Iván. Él quería ese lugar, quería estar cerca de Marc-André por siempre y joder, envidiaba mucho a Iván por estar a su lado.
— Rafinha, es en serio, ¿te sucede algo?— Marc se acercó más a Rafinha y colocó su mano en la pierna del moreno
Rafinha alzó la mirada y vio que Marc-André estaba muy cerca de él. Se sonrojó inmediatamente, esa cercanía le daba rienda libre a su imaginación. Tenerlo tan cerca le provoca nervios y es que, Marc lo volvía loco con tan solo una mirada.
— Estoy bien— fue su simple respuesta
— Esa cara...— Marc tomó la cara de Rafinha entre sus manos, acercándose un poco más—... no es de alguien que está bien
Rafinha volvió a sonrojarse. Dios, Marc, si tan solo supieras lo que provocas en mí.
— Vamos, dime que sucede— insistió Marc
Rafinha soltó un suspiro mientras bajaba la mirada. Tenía tanta vergüenza de decirle a Marc, y ¿Cómo decirle al hombre por el que te mueres que extrañas las cartas de tu "admirador secreto"?
— Solo me siento mal por haber roto la carta del otro día frente a todos
— Ah, eso— Marc suspira—. Eso fue una crueldad. Esa persona debió poner todo su corazón y sentimiento en escribirte esa carta
— Marci, no me regañes, ¿sí?
Rafinha hizo un puchero y Marc quiso besarlo ahí mismo. El brasileño era su debilidad, lo volvía completamente loco.
— No te regaño, Rafi— Marc rió—, solo te digo que tienes que aprender a valorar las cosas que las personas hacen por ti
Marc se levantó del lado de Rafinha para ir a entrenar.
— Cuando el vestuario quedó solo— Rafinha empezó hablar, Marc se detuvo al escuchar su voz—, me quedé un rato más y saqué la carta de la basura. La quería para mi, quería conservarla
Esas palabras hicieron que a Marc le saltara el corazón de una linda manera.
— Entonces, ¿te gustan las cartas?— Marc se puso frente a Rafinha
Y ahí estaba la pregunta que le da esperanzas. Rafinha miró a Marc a los ojos y sonrió.
— Me encantan
Y ahí estaba la respuesta de Rafinha que le da toda esperanza a Marc de seguir con sus cartas.
Marc le sonrió a Rafinha y salió a entrenar, sabía que iba a continuar con las cartas para su lindo brasileño.
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Querido Rafinha. » Terfinha [3]
Fanfiction"Querido Rafinha... ¿Por qué siempre soy yo el que da el primer paso? Att: un torpe enamorado" [Parte #3 de la serie "Querido..."]