Superdotada

353 26 3
                                    

Algunos mieses antes...

Mi nombre es Haruka Tenou, tengo 25 años, soy alta y bastante delgada, aunque mi físico puede ser fuerte como lo de un hombre. Y si, tengo un físico andrógino, y no me arrepiento, porque eso atrae mucho a las chicas. Ninguna puede resistirme.
¿Que decía? Ah si... tengo pelo rubio, ojos verdes muy intenso, que pueden asustar con solo una mirada (por lo menos eso fue lo que me dijo una vez mi mamá) y una sonrisa encantadora (bueno eso no me lo dijo ningún, pues yo).
Me gustan todos los sport competitivos, amo ganar. Apuesto que ahora mismo estás pensando que soy una Casanova. Y con mucho gusto digo que si.
No me gustan las relaciones serias, no porque no quiero, simplemente no soy capaz de estar con una sola mujer sin sentirme atraída por otras, y en más no he encontrado aún una mujer capaz de merecerlo todo eso cariño que los otros llaman 'amor'. No digo que no creo en el amor, sólo que todo eso no es para mi.
De hecho prefiero pasar la noche en unas discotecas o mejor con una mujer, aunque dado mi trabajo no puedo permitírmelo cada vez.
Mi vida parece la vida de una normal chica de 25 años, pero evidentemente no lo era.
Mi mamá se murió cuando yo tenía unos 15 años, en aquella edad yo era bastante madura para comprender los asuntos de los adultos. Y de hecho mi mamá lo hizo. Me contó la verdad sobre mi verdadera identidad. Yo no era la hija de Hiroshi Satō, más bien de Takeda Tanaka, un hombre que yo jamás pude conocer. Mi mamá, Kathi Tenou, sólo me dijo que él era un científico, y lo que ocurrió entre ellos fue hecho de una noche.
No digo que eso no me turbó, no es cosa de todos los días descubrir la verdadera identidad de tu padre, volteando todo tu mundo al revés, pero en aquellos días todo lo que pensaba era la felicidad en la vida de mi mamá, entonces no pensé mucho en eso, no conocía mi padre en ambos casos.
Pero no duró mucho eso periodo, mi mamá Kathi murió unos días después, y con ella toda la amabilidad de mi padre hacia mi. Cuando cumplí 18 años él me persiguió de la casa, enviándome mensualmente el dinero necesario para vivir. Decidí de cambiar mi apellido de Satō a Tenou, como mi mamá. Desde los 18 hasta los 25 todo lo que he hecho fue trabajar y trabajar, en unos de los locales nocturnos más famosos de la ciudad de Tokyo: the Blueberry. El lugar es frecuentado por prostitutas, strippers, y cada genere de chica quisiera divertirse por una noche, en un lugar como eso la gente nunca duerme.
Mi turno es desde las 10 pm hasta los 6 am, razón por la que puedes imaginar como vivía las noches: "llégame una tequila", o "un martini" "quiero un cóctel"; así eran mis noches. Tal vez unas chicas se acercaban tratando de abordarme con tentativos mucho evidentes, y yo afortunada como soy, tengo que rechazarlas. Mi jefe cada vez que yo terminaba mi turno me dijera que podía traerme una de las chicas que trabajaban para ello, el no sabía que yo era una mujer, sin embargo yo siempre declinaba la oferta, mis padres siempre me dijeron que no existe nada peor por una mujer de prostituirse, entonces jamás las he tocadas.
Y esa noche no parecía ser diferente de las otras.
Como siempre estoy detrás de mi contador, manejando con extrema destreza las bebidas, primero de mezclarlas y empezar a sacudirlas, para luego servir unos cócteles para los chicos que la esperaban pacientemente, mientras la música subía de voz, hasta acabar a su voz normal, la que el lugar tenía cada noche.
Muchas luces estaban activas en la pista de baile, mientras las strippers empezaban el trabajo, atrayendo muchas personas.
Me sentí mejor para eso, tenía unas horas de relax, dado que muchos de las personas (por mayoría hombres) estaban mirando con lujuriosamente y con deseo las mujeres bailar sensualmente. Yo misma pues era atraída, ellas en cierto eran hermosas, pero al mismo tiempo se veían tan sucias, aunque el truco y el perfume era de cualidad, me limitaba a mirarlas; entre ellas y mi nada más que unas sonrisas falsas o guiños de ojos. Ya sabía que algunas de ellas me deseaban, y la más testaruda era Riyu que no dejaba de tratar de seducirme. Y ya estaba aquí en frente de mi.
Buenas tardes mi querido Haru_ me dijo con tono de burla, mientras se acercaba a mi.
Hola Riyu_ dije tratando de ser más fría posible. Riyu ni siquiera sabía que yo era una mujer, ella solo buscaba la presencia aquí abajo, cosa que yo no tenía, obviamente.
Y dime, ¿cómo te va la noche?_ empezó a acariciarme los brazos, uno de sus juguetes.
Bastante bien, ahora los clientes son menos, y la razón la puedes ver tu misma_ entonces dije indicando a unas chicas que se quedaban allí, sin el sostén, sólo con los taparrabos que no dejaban lugar a la imaginación, lanzándolos hacia los hombres que gritaban casi más fuertes de la música.
Riyu parecía complacida. _Y dime, ¿ya encontraste a una chica por anoche?_ podía sentir su aliento muy cerca de mi oreja izquierda, sus labios tocándola, retrocedí.
No, tengo que trabajar_ dejé trasparente la dureza de mi voz contestando a su pregunta, pero ella no parecía intencionada a retroceder.
Mm, tu trabajas demasiado_ esta vez ella se ponía detrás de mi, sus labios en mi cuello, y sus manos en mis piernas, acercándose a mi muslo. Sentí disgusto, quien sabes cuantas cosas hicieron aquellas manos que me acariciaban, y por cuanto aquella mujer de un pelo rojo fuego, ojos amatistas profundas, piel llena de perfume, tan hermosa, podía excitarme, yo no probaba nada para ella.
Tengo que ir_ y me alejé de ella caminando hacia las cuatros chicas apenas llegadas, sonriendo hacia ellas mostrándoles mis blancos dientes cuestionando lo que querían tomar.
Ellas me miraban tan sonrojadas que casi me arrepentí de mi actitud, evidentemente eran sólo chiquitas. Pero me pregunto que están haciendo en un lugar como este.
Si yo pudiera me alejare el más posible de aquí.
Yo tomaré un Sex on the beach_ dijo una chica rubia con ojos azules, y una tinta a los labios color rojo fuego, pues tienes unos 18/19 años, parece una chica de 25 años. La miré fijamente, y vi como ella no dejaba de mirarme, eso me hizo estremecer.
Yo un mojito_ dijo una otra chica de pelo castaño, era muy alta por ser una mujer, casi cuanto mi, era mucho simple respeto a su compañera, y más robusta.
Para mí nada, no amo tomar_ dijo una tercera chica de pelo azul con ojos del mismo color, parecía mucho tímida, casi fuera de lugar, con voz poco audible a causa de la música.
¡Vaya Ami! ¿Una vez que nos permiten de salir de casa, no vas a tomar nada?_ dijo una chica rubia con ojos azules, mucho similar a la primera chica, pero ella me parecía más niña de la otra. Entonces la segunda rubia habló. _nos tomamos dos caipiroska a la fresa_ añadió golpeando de hombros a la compañera que tenía su cabeza al suelo, avergonzada.
Entonces así será. En unos minutos todo será listo chicas_ dije tratando de ser amable, mientras la mirada de esa rubia permanecía sobre mi, me sentí algo incómoda, pero no lo di a ver, ella solo creía que yo era un hombre, como todas.
La puerta de el salón se abrió y unos hombres ingresaron, todos robustos y musculosos, hacían casi miedo. Entre ellos, un hombre atrajo mi atención, era el hombre que estaba detrás de todos, lo que probablemente era el leader. Fue como un recuerdo, aquel hombre acariciando mi cabeza, la cabeza de una Haruka de circa 6 años y entonces desapareció. Sacudí mi cabeza y regresé a hacer los cocktails.
Cuando me di vuelta para llegar los bebidas a las chicas vi como aquellos hombres se fueron acercando a ellas.
Probé rabia. Sobretodo por la manera en que uno de ellos estaba tratando a la chiquita rubia tan cariñosa tratando obviamente de abordarla.
Ya déjame, me das disgusto_ fue eso lo que ella dijo primera de recibir una abofeteada. No lo aguante más.
Pase por encima del contador. _Ya déjala, la estás lastimando. Tómalo con alguien de tu altura_ lo miré con ojos determinados. Odiaba cuando esos hombres tan débiles trataban de dominar a las mujeres con la fuerza.
¿Y que quiere hacer un hombrecito tan delicado como a ti?_ estaba riendo el sucio.
De repente unos manos me tomaron de los hombros lanzándome en la pista, en unos segundos los encontré todos frente a mí a los hombres de antes.
Me puse de pies, empezando a sentir la adrenalina a mil en mis venas, todo empezó a convertirse en lugar confuso, nada más existía excluidos ellos, sentía sólo el lento y incesante latido de mi corazón en mi orejas.
Uno de ellos se movió. Me golpeó en el estómago, pero no me lastimó, el golpe fue manipulado por mis abdominales.
Otros golpes empezaron el camino hacia mi, pero esta vez fue muy fácil evitarlos. Todo fue como una cámara lenta para mi: golpe hacia mi cara, bajo mi cabeza, agarro el brazo, un experto movimiento y el es al suelo. Dos brazos sobre mis hombros, empujo su estómago, mi pierna detrás de las suyas al suelo... hasta que me quedé inmóvil, todos fueron batidos por mi. Fui sorprendida y aún más cuando sentí la fuerza de temprano dejarme, haciéndome caer a tierra.
Quería salir de ese lugar, y así hice saludando pronto mi jefe. Estaba un poco asustada, había luchado contra todos esos hombres mucho más grandes de mi, aunque fui segura de no haber luchado contra el hombre con el extraño tatuaje. El tatuaje de un serpiente desde el brazo hacia el cuello, un tatuaje insólito. A quien importa, ahora no tengo tiempo para eso. Dije a mi misma subiendo en mi moto, dirigiéndome hasta mi apartamento.

Unos minutos temprano, durante la lucha...

Unos ojos observaban la escena en frente de ellos con mucho interese: los primeros eran un par de ojos azules profundos, hermosos, y los otros unos ojos negros, no menos hermosos de los de temprano. Eran los ojos de dos chicas.
Las de los ojos negros habló.
Creo que aquí tenemos algo muy interesante_ dijo ella sonriendo.
Quizás_
¿¡No miraste lo que pasó aquí?!_ preguntó la otra incrédula.
La de ojos azules se encogió de hombros. _ no soy sólida tomar decisiones o impresiones apresuradas_ 
A veces no te entiendo M..._ empezó la ojinegra solo para ser interrumpida por la ojiazul.
No decir mi nombre a voz alta_ dijo ella _recuerda que aquí no podemos mantener la guardia baja_ continuó ella su monólogo. _en más aquí muchos quieren la desaparición de nosotros desde los juegos_
Ok, M... Milly. ¿Entonces que hacemos?_
Llegamos esas informaciones al GQ_ respondió simplemente.
Y luego?_
Y luego vamos a obedecer a los ordenes_
¿Y si no aceptan?_ era claro que la amiga quería conducirla al agotamiento, la ojinegra quería sentirla decir algunas palabras precisas.
¡Vaya! ¡Quieres volverme loca Rika!_
Oh... que bonito mi nombre falso cuando sale de tus labios_ dijo la ojinegra acercándose a la otra.
¡Rei! ¿Que diablos haces?_ dijo 'Milly' a baja voz.
Dime lo que quiero oír_
Ok_
¿Entonces?_
Entonces si ellos no son de acuerdo con las informaciones de nosotras, la vamos a visitar nosotras mismas_ 'Milly' dejó un suspiro de frustración salir de su boca.
Es así simple convencerte_
Nunca más en público_
Claro Michi_

Notas: soy mucho orgullosa de ese capítulo, sobretodo porque es el más grande jamás escrito y por eso espero que vosotros van dejar un voto para eso y comentar si hay algunos errores, no soy española XD
Háganme saber si los han gustado ese capítulo y vos deseo un bonito día.
¡Bye! 😁

No cabemos en este mundo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora