La perfeccionista

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~Si hay por parte la Superdotada, bastante impulsiva, la Perfeccionista es su perfecta contraposición. Pero todos sabemos que los opuestos se atraen, ¿o no?~

El rumbo de los tacones se hizo escuchar por el corredor de la grande empresa, así que la persona justo llegada no pasaría inadvertida.
Caminar recto, gira a la derecha, aún recto, gira a la izquierda, caminar hacia la fin del corredor y por fin la tercera puerta a la izquierda.
Y así ella ingresaba caminando a cabeza alta, consciente de las miradas causadas, hay algunas de enojo, otras de celos, otras de maravilla (bueno esas por la mayoría de hombres ^.^), sin embargo no era una cualquiera.
Esa actitud de las suyas era fácilmente intercambiada por una de superioridad y de frialdad, aunque la verdad sea que ella lo hacía no para ser notada, más bien porque eso fue lo que sus padres le enseñaron: "Jamás caminar cabizbajo, tienes que ser orgullosa de tu origen, siempre."
Bueno eso fue unas de las pocas cosas que ella aún recordaba de sus padres, ya que murieron en un accidente y ella fue adoptada por el señor  Katō, actualmente el primario junto al señor Yoshida de la empresaria, los únicos a conocer la verdadera indemnidad de el jefe de todo ese, de hecho ella creía que detrás de la figura simbólica de el señor Matsumoto como jefe hay otra persona. Y cuando Michiru Kaioh tiene presuposiciones, intuiciones casi siempre son verdaderos.
Caminaba delicadamente adelante, tan delicada que parecía volarse. Era impecable como cada día con su traje negro (más o menos como el de la fotografía ^^), y maquillaje ligero, ella no tenía necesidad de ello.
El movimiento de sus caderas casi hipnotizador, cómplice con el traje estrecho, la convertía en un ser irresistible.
Pero a Michiru, a diferencia de muchas mujeres, no le gusta ser en centro de la atención, era una mujer silenciosa y pensativa, calculadora e a veces fría, extraordinaria capacidad de hablar en público y sobretodo de mantenerse al día con sus superiores, con la suavidad de su voz y movimientos.
Su única compañera, la única persona que ella acercaba a un ideal de amistad era Rei, con ella era diferente.
Rei era una mujer de ojos negros y pelo del mismo color, físico atlético e en promedio alta, curvas a la posición justa, carácter fogoso y a veces pasional, y una capacidad extraña a Michiru de mostrar sus sentimientos solo con unos movimientos.
Ella tenía en vez pelo color aguamarina, y radiantes ojos azules, piel blanca y suave, físico esbelto por su altura, labios rozadas sin maquillaje, carnosas y apetitosas para cualquier hombre o mujer que sea.
Unos pasos detrás de ella y entendió quien era, su paso lo hubiera reconocido en todas partes.
Entonces Rei, ¿que haces detrás de mi?_
Bueno, hago lo que hace la mayoría de los hombres aquí..._
La malicia en la voz de la pelinegra era clara.
¿Y que hace la mayoría de los hombres?_
La exacta pregunta es ¿que hago ahora que estoy en peligro de las mujeres también?_
Pop de labios. _Hino se mueva, tenemos mucho trabajo para hoy_  y se marchó, signo para Rei de victoria.
Vaya Kaioh, nunca me dejas entretener un poquito contigo_ dijo con inocencia falsa.
Confía en mi Hino, hoy te divertirás_ 
Y un sonrisa de broma frunció los labios de la aguamarina. _Ve adelante que ya es tarde_
Ah, Kaioh, Kaioh_ al suspiro de la pelinegra Michiru correspondió arqueando una ceja.
¿No quieres mirar mi bonito trasero en secreto?_ y entonces soltó una carcajada.
Comportarse Hino_ entonces dijo fríamente, adelantando la compañera, sin poder evitar que una risa salga ruidosamente de su boca.
Rei se encogió de hombros, regresando su mirada adonde estaba temprano.
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Lo siento Tenoh, pero eso es todo lo que puedo hacer para ti_ dijo extendiéndole unos cuantos de dinero y un papel.
No te preocupes entiendo, y lo siento por no disculparme yo mismo, pero decir algo que no está en acuerdo con mis principios no lo puedo hacer_ entonces tomó el dinero e el papel.
Si ya veo, yo hubiera hecho lo mismo, pero la administración es así, parece que ellos eran unos hombres influyentes allí, entonces..._
Esta bien, gracias por la oportunidad_ la rubia sonrió.
Si, es un excelente trabajador, te deseo mucha suerte_ el hombre de unos 50 años le palmeó los hombros _ese papel es la dirección de uno de los mejores centros de preparación deportivos, allí están los mejores_
Bueno, entonces gracias de nuevo, adiós_
Adiós_ 'espero que me pagues bien por eso' el hombre añadió mentalmente.
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¡No!_ dijo una pelinegra enfadada. _¡maldita sea!_
¿Que pasa?_ preguntó una aguamarina sentada tranquila en su silla.
Un golpe a la escribanía fue necesario para comprender lo que estaba pasando a su compañera. Sonrió para si misma.
¿Y porque ríes? Aquí no hay nada de que reír_ dijo frunciendo.
Porque es la primera vez que te enfades por el trabajo. Y es tan satisfactorio que por una vez te veo tan concentrada, atención que puedo ver el humo salir de tus oídos_  y soltó una pequeña risa.
Ha-ha, lo hago solo por el dinero, ¿sabes?_ la mirada contraria se convirtió en una de victoria, _Sin embargo hice una llamada al patrón de la discoteca adonde trabajaba la rubia de anoche y descubrí que no trabajas más por ellos, dado lo que sucedió. Y ahora que hicimos, ni siquiera me dijo su nombre_ Rei era exasperada.
Haruka Tenoh_ la aguamarina dijo simplemente.
Quien, ¿una nueva cita para ti?_ la pelinegra le hizo una sonrisa sardónico.
Michiru arqueó una ceja y sacudió su cabeza, repitiéndose que la compañera no iba a cambiar. _¿en serio Rei?_
Vaya Michiru, era el momento de regresar a una mayor actividad en la cama, apoyo tu decisión_
¡¿Mayor actividad en la cama?!_
Si, pues esa persona te va a ablandar_
La conversación tuvo un pliegue inesperado.
Bueno, entonces hasta 'esa persona' me 'va a ablandar' puedo tratarte como una esclava, ¿que piensas?_ Michiru trataba de mantener su postura, pero aquella mujer era una de las pocas que podía hacerla enfadar así.
Ok me rindo_ dijo levantando las manos _pero tienes que contarme todo_
Rei... Haruka Tenoh es la mujer que buscamos_
Unos segundos de silencio. Entonces Rei habló.
Vaya Michiru, ¡no creía posible eso! Tienes una relación con la mujer de anoche y no me dijiste nada_
Rei... a veces quiero estrangularte_
Per..._
Déjame explicar_
Y empezó a hablar, Rei que la escuchaba.
Wow Michiru, ¿porque no me dijiste nada?_
No ser tan sorprendida, yo soy una experta_
Si pero, ¿como sabías que él la iba a licenciar?_
Era claro, ella los empujó, y como tú sabes siendo ellos unos de los clientes más influyentes el mínimo que el patrón pudo hacer fue licenciarla. Luego con un pequeño incentivo pedí al hombre que le diera el papel de nuestra organización_
Bueno si, un trabajo digno de Michiru Kaioh_
No fue nada, el difícil es acercarla y estudiarla en los mínimos particulares_
Parece un animal si dices así_
No lo es, sólo es diferente, y tiene un no sé qué de atractivo_
¡Ha! Te gusta_
No es esto, la vi por solo dos veces, es diferente, no se explicar_
Es hecho Kaioh, te gusta_
Una mirada glaciar fue lo que Michiru le hizo percibir.
Cállate o un día con Luke nadie se lo lleva, ¿entendido?_
Ok ok, me callé, pero no Luke, no puedo aguantarlo un día más_
¿Entonces?_
Entonces tu eres mi jefa y compañera favorita y yo te respeto muuuchísimo_
Sabía que iba a contestar así_
Salió de la estancia con una leve sonrisa en su hermoso rostro.
x
Ya era tarda noche cuando regresó a su casa, lo único que quería hacer era descansar unas horas y luego decidir lo que iba a hacer como trabajo. La decisión de su jefe de licenciarla no fue tan mala, nunca le gustó ese género de trabajo, pero ahora... se sentía tan vacía, tan inútil sin hacer nada.
El dinero de su ex jefe es bastante para algunos meses, pero no suficiente para ella, ya que si hay una cosa que Haruka no aguantaba era ser dependiente de alguien.
Se sentó en el sofá dejando el dinero en la mesa cerca de ella. En los últimos dos días no regresó a su casa, ya que ha tenido que ir a la policía para dejar su testigo sobre lo sucedido.
En más ganó también unas cuantas miradas sorprendidas y inquisidores, ya que ella unas horas temprano había enviado al hospital cuatros hombres mucho más musculosos; cosa a la que respondió solo enrollando los ojos.
Le hicieron muchas preguntas, también análisis del sangre, creían que ella fue drogada, que locura.
Y ahora sentía solo un fuerte mal de cabeza.
Que acreció al recordar el repentino cambio de actitud cuando su vida era en peligro o alguien que ella estimaba, era algo que salía de su pecho por su cabeza y todo el cuerpo: una fuerza, una adrenalina increíble, fuerte peor de un toro, la rendía invencible. Y en los últimos meses todo se fue peor.
Ya no era posible controlar su furia y eso la preocupaba. Ella no era violenta, por lo menos algunos años atrás.
Pero, ¿que me está pasando?_
¡Rayos!_ dijo golpeando la mesa, eso fue hasta sus ojos verdes esmeraldas se posaron sobre el papel de la agencia. Pensó que nada mal podía suceder si hubiera ido, pues podía ser una manera para hacer salir toda esa energía desde su cuerpo en el ejercicio.
Si seguro esa es la solución mejor_
Dijo levantándose para ir a ducharse.
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La aguamarina caminaba a paso veloz adelante de su compañera, un paso bastante insólito dada su delicadeza.
Michiru, ¿quieres esperarme un minuto?_
Rei ya te lo dije no podemos hacer nada_
Si Michiru que podemos, ¿no lo viste cuando es válida en una lucha?_
Por supuesto que si, pero no soy yo que decide para todos_ dijo soltando un suspiro. _y no puedo imponer mi decisión, aunque si hubiera intentado, no hay nada que hacer_
Me dijiste que íbamos a actuar nosotras mismas si el no fuera como respuesta_
Dijo la pelinegra mientras salivan de la empresa, solo para ser empujada contra la pared de una casa cercana de ella, quedándose sorprendida.
Wow Kaioh, ¡me sorprendes día por día!_
Ya deja de bromeare_ dijo seriamente. _ahora escucha atentamente lo que tengo que decirte_
Rei asintió.
Dije que no podemos hacer nada para convencerlos, pero no que no dije que era prohibido hacer lo que programamos_
Vio que Rei se quedaba un poco confundida.
Las cámaras, no es bueno que nos registren_
Si, ¡Justo!_
Y ambas se rieron. Rei era una buena amiga, pensó Michiru.
¿Entonces?_
Por supuesto Michi, estoy contigo_
Un incómodo silencio se sintió entre ellas, por lo menos para Rei, ya que Michiru parecía disfrutarlo.
Bueno Michiru, yo tengo que ir, ¿quieres que te lleve a casa?_
No, no te preocupes tengo la mía_
Bueno, entonces me voy, descansa bien_
Tu también Rei, mañana se empieza_ la aguamarina sonrió, una sonrisa simple, capaz de calentar los corazones más fríos.
Si, si mamá_ Rei cruzó una vez más sus ojos negros con los azules de su amiga y sonrió. Si, Michiru era una buena amiga.
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Pelo mojado, camisa blanca media abierta, pantalones grises estaba sentada mirando hacia la ventana, como si esperaba algo. O alguien. Sonrió amargamente a esa última sentencia, no había jamás tenido ningún por el que valía la pena luchar, y probablemente no lo iba a tener. Unas gotas de agua cayeron de sus hilos dorados acariciando suavemente su hermoso y andrógino rostro, que fue capaz de volver loca muchas chicas, que pero jamás se volvió loco por alguien.
Dejó las gotas bajar por su piel, por su mejilla, cuello, pecho o espalda luego.
Un viento frío ingresó por la ventana, llevando consigo otro olor, uno nuevo, tan leve y delicado, fresco y regenerador, le recordaba del mar, tan suave que por un segundo pensó en acercarse a la ventana, solo para olerlo un poco más. Fue entonces que desapareció, como un vehículo atravesando la calle velozmente.
Y tan pronto como era venido, así se fue.

Notas: disculpa si hay algunos errores o incongruencias, hice el mejor que podía.
Sin embargo soy satisfecha por ese capítulo también, y como siempre espero que lo van a disfrutar y dejar un voto o comentario, lo apreciaría muchísimo. Byesss! :D

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⏰ Última actualización: Aug 25, 2018 ⏰

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