La despedida

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Quede con todos mis amigos a las seis en la plaza. Al llegar estaban todos esperándome, con las lágrimas en los ojos. Corrí hacia ellos y los abracé. Tras ese largo abrazo, Laura se separó y comenzó a leerme una carta:

Para nuestra gran amiga Marina:

Esta carta demuestra todo lo que te queremos. Desde los tres aňos hemos estado juntos, (en especial tu y yo). Siempre estuvimos juntos para lo bueno y para lo malo. Que sepas que aunque estés muy lejos de nosotros a no se cuantos kilómetros, no nos vamos a olvidar de ti y espero que tu tampoco. Que nada ni nadie te quite esa sonrisa nunca porque tu no te mereces estar triste. Mientras que te estoy leyendo la carta se que estas llorando, pero quiero que seques esas lágrimas de esos ojos tan bonitos porque nunca nunca nunca te vamos a olvidar.

Te queremos

No pude secar las lágrimas de los ojos pero rápidamente les abracé. No era un abrazo cualquiera, era un abrazo verdadero, un abrazo que demostraba que todo lo que decía la carta era verdad.

Yo: Al final me habéis echo llorar a mares. Que sepáis que nunca os voy a olvidar y aunque muchos kilómetros nos separen, volveré a veros porque vendré algún que otro fin de semana. Uff ya es tarde me tengo que ir... ¿un último abrazo?

Contigo hasta el finalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora