Pisó sin mucho esfuerzo la mano de aquel ser que sujetó a Rachel del tobillo. Ésta se rompió con gran facilidad, como si se tratara de una fina rama. De ésta forma le demostró en la condición que terminarían si aceptaban la propuesta de aquella loca - Hay que ser tonto para elegir quedarse en una celda - dió la vuelta para así seguir el camino.
La niña de cabello rubio quedó observando lo que una vez fue un hombre que también estuvo en la misma posición que ella, de ser juzgados por el dueño del piso si eras atrapado - Está.. muerto -
Zack se había detenido al saber que su compañera de travesía no avanzaba. Giró ligeramente el torso hacia la derecha para verla por sobre el hombro - Entiendo, vámonos - Quería salir ya de una vez por todas de ese lugar. Dió el primer paso llevando la mirada hacia el frente no sin antes darle un pequeño vistazo a la siguiente celda.
Rachel chocó contra su espalda ya que él se había detenido abruptamente - ¿Zack? - Levantó la mirada dando un par de pasos hacia atrás, pero gracias a la capucha no podía notar su expresión. Solo llevó la mirada a donde estaba observando, hacia el interior de la celda.
Se acercó y notó que ni su movimiento produjo reacción por parte del Foster. Apoyó las manos en los barrotes divisando que había un cuerpo tirado en el suelo. Lo que llamó su atención fue que no estaba en la misma condición que el anterior hospedante. Al menos por ahora.
Mientras que los ojos de ella estaban con intriga por la reacción de su compañero y por saber quién era la persona que estaba dentro, los ojos de Zack no podían creer que esa persona estuviera dentro de esa celda. No podía creer aún que aquella chica estuviera ahí, no podía creer que la misma chica que llegó a su piso aproximadamente un mes estuviera ahí. En ese maldito edificio y aún más en el piso de esa maldita perra loca.
- ¡Zack! - Lo había llamado con insistencia una y otra vez, pero él seguía perplejo y tuvo que recurrir a gritarle sin importarle que el pelinegro se fastidiara con ella.
El grito había surtido efecto ya que parpadeó un par de veces volviendo en sí. A los segundos apretó con fuerza la mandíbula frunciendo notoriamente el ceño ahora observando a la Gardner. Esta notó la gran furia que había en los ojos del chico - ¿Qué sucede Zack? - preguntó con la tranquilidad que caracterizaba su voz.
Uno de los dos tenía que al menos conservar la calma y más con ese estado en el que se encontraba el chico de la hoz.
Solo un gruñido fue escuchado por él y el fuerte estruendo de su arma contra la pared, acto que logró una gran abolladura. Era desquitarse con la pared o matar a Rachel en cuestión de segundos, y ésta opción no estaba en mente. No al menos hasta que salieran de ahí.
Su respiración se volvió errática y agitada, estaba tratando de contenerse, de contener toda esa ira dentro. Ira que se disipó de a poco por haber escuchado que lo nombraban.
Tanto él como la niña de cabellos rubios giraron la cabeza hacia el interior de la celda. Su hoz resbaló de la mano por haber llevado esta y la otra hasta los barrotes - Estás viva.. -
Rachel seguía expectante ante la escena. No comprendía qué estaba sucediendo, así que con la tranquilidad de siempre preguntó - Zack, ¿quién es ella? -
El chico no dejaba de observarla, como tampoco Cathy dejaba de observar a través de las cámaras. El plan de tortura que le tendió a su pecador favorito estaba yendo a la perfección.
- Una conocida.. - Agitó los barrotes con fuerza -¡Rebeca! - Volvió a agitar aquellos pedazos de fierro oxidado - ¡¿Qué haces aquí pedazo de mierda?! -
Un recuerdo vino a la cabeza de la chica de ojos azules, el recuerdo de aquel libro en el piso de Eddie. El archivero que contenía a todos los que habían pasado por los pisos - Rebeca Dagger - Habló llamando la atención del Foster.
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【Angels Of Death: Nos Volvemos A Ver】
Mystère / ThrillerOdiaba las sonrisas, porque ella sonreía falsamente para aparentar que estaba bien. Por eso odiaba las mentiras, porque ella mentía también en que ella misma se encontraba bien. Odiaba no haber podido hacer algo antes para ayudarla, y esta vez volvi...