Eres Mío ¿Entiendes? [Joerick]

Capítulo 5

Erick:

Suspiro mirándome en el espejo mientras arreglo mi camisa y mi saco.

Hoy habrá un evento de inversionistas y socios en la empresa de Joel.

Para mi mala suerte, tendré que ir, se hará presente la familia Pimentel.

Y en verdad no quiero quedar mal frente a mis suegros.

—¿Estás listo?—dijo Joel entrando a la habitación.

—Si, dijo Christopher que no lo esperemos, el irá luego.

—Ok, entonces vámonos.

Salimos de la casa y nos dirigimos al auto, antes de que abriera la puerta Joel me tomó de la muñeca.

—Espero que hoy te comportes y no vayas de zorra con nadie, el lugar estará lleno de hombres y no quiero tener que hacer un escándalo frente a mis socios, ¿Entiendes?—dijo duramente, luego dio la vuelta y se subió al auto.

Intenté tragar el nudo que se estaba formando en mi garganta, miré para arriba intentando no llorar.

Luego subí al auto y Joel comenzó a conducir.

Al llegar a la fiesta, todos los ojos se posaron en nosotros, incomodándome.

Joel tomó mi mano y nos encaminamos hacia adentro del lugar.

Rápidamente mis suegros se acercaron a nosotros.

—Queridos—saludó Patricia dándonos un beso a cada uno.

—Hola madre, hola padre—saludó a su padre en un corto abrazo.

—Hola Francisco, buenas noches—dije imitando la acción anterior de Joel.

—Muchachos—respondió educadamente mi suegro—Joel, cuando lleguen los inversionistas de Europa iremos a establecer una conversación con ellos para cerrar el trato ¿Bien?, por lo tanto, disfruten la noche—dijo tomando a Patricia de la mano para luego escabullirse en la multitud.

—Iré a saludar a Richard, tú quédate aquí—dijo dejándome solo.

Me sentía incómodo, no conocía a nadie y me daba pena estar solo.

Me dirigí a la barra y me senté, pedí un refresco y comencé a beber despacio, para hacer tiempo.

—¿Sólo?—preguntó alguien a mis espaldas.

Giré y me encontré con un guapo joven, sonrió y se sentó al lado mío—Soy Mateo ¿Y tú, chico solitario?—dijo extendiéndome su mano.

—Soy Erick, gracias por ese original apodo—dije aceptando su saludo sonriéndole, parecía simpático.

—Es que te vi solo y quise venir a hablarte, seguramente no conoces a nadie y debes estar sintiéndote incomodo.

—Es verdad, ¿Trabajas en la empresa?— pregunté mientras él pedía un trago.

—Soy un socio, comencé a trabajar este año con Joel Pimentel ¿Y tú?, nunca te vi por aquí.