Nuestro amor eterno

Capítulo 2

—Eh?.....— Rin lo vio muy sorprendida, después de unos segundos se puso nerviosa

En ese momento el padre de Rin fue a recibir a su gran amigo, luego se dio cuenta de que su hija estaba en shock

—¿Qué ocurre hija?— Preguntó Menomaru un poco preocupado

—Nada es solo que cuando fui a abrir la puerta pensé que era mi tía Molly— Dijo Rin un poco nerviosa

—¿Por eso estabas así hija?— Preguntó Menomaru algo serio

—Pues si— Respondió Rin un poco sonrojada

—Rin, hija el es mi amigo Inu no Taisho, ella es Irasue y ellos son Sesshomaru, Tomoe e Inuyasha— Dijo su padre sonriendo

—Es un gusto conocerlos— Dijo Rin un poco nerviosa

—El gusto es nuestro Rin— Dijeron el hombre peliplateado y su esposa

Rin estaba tan nerviosa que con suerte decía una frase, después de un rato a ella se le había pasado un poco los nervios, pero tocaron la puerta

—Hija, ¿Puedes ir a abrir la puerta?— Preguntó su padre sonriendo

—Claro padre— Respondió Rin algo nerviosa pero no lo demostró

Rin fue rápido hasta la puerta y al abrirla se encontró con su tía

—¡Hola tía Molly!— Gritó Rin muy emocionada y se abalanzó hacia su tía para abrazarla

—Hola Rin, ¿Cómo has estado?— Dijo su tía muy alegre de verla

—Bien, ¿Y usted?—

—Bien— Respondió su tía sonriendo

Rin salió de la casa, saludó a su tío y luego a sus primos

—Tío Suikotsu, ¿Necesita ayuda?— Preguntó Rin un poco preocupada

—No Rin tranquila, solo ve adentro hace mucho frío aquí afuera— Dijo el hombre pelinegro un poco serio

—Rin, ¿Qué pasó con Kohaku?— Preguntó su primo para molestarla

—¡Hiten! Me las pagarás— Dijo Rin un poco molesta

—Kohaku, Kohaku— Decía su primo divertido

—¡Callate Hiten!— Gritó Rin un poco más molesta

Rin empezó a perseguir a Hiten para golpearlo pero este entró a la casa, en ese momento Rin se calmó y lo ignoró

—¡Kohaku!—

—Ahora si me las pagarás Hiten— Dijo Rin perdiendo la paciencia y empezó a perseguirlo por toda la casa

—Rin, necesito que me hagas un favor— Dijo Menomaru sonriendo

—Claro papá, ¿Qué pasó?— Preguntó Rin sonriendo nerviosa

—Necesito que vayas a comprar tomates, lechuga y limón al negocio— Respondió Menomaru entregándole el dinero

—Claro, ¿Hiten puede ir conmigo?— Preguntó Rin sonriendo

—Claro que si— Respondió su padre con tranquilidad

—¡Hiten ven!— Gritó Rin desde el living

—¿Qué quieres Rin?— Gritó Hiten desde la habitación de Akago

—Acompañame a comprar—

—Esta bien, ya voy— Respondió en tono serio

Rin y Hiten salieron de la casa, Rin iba un poco asustada porque estaba muy oscuro y Hiten la empezó a molestar

—Kohaku...— Susurró el Hiten
 
—Si no sabías Kohaku no está aquí— Dijo Rin muy seria