Elevo una ceja mirando aquel mensaje bastante extraño.
¿Quién es? ¿Daddy? ¿Quién es daddy?
No sé si responder, realmente estaba asustada de quien podría ser.
Leo el mensaje una y otra vez, ¿Cómo había conseguido mi número?
¿Y si es Jess haciéndome algún tipo de broma? No lo creo.
Me armo de valor, el suficiente para poder contestarle, así que comienzo a teclear.
"¿Quién eres? "
Espero impaciente el mensaje, el cuál no tarda mucho en enviarse.
"Daddy, pequeña. "
Ese extraño apodo vuelve a aparecer, ¿Acaso yo conocía a esta persona? ¿Debería preguntarle a mamá por esto?
"No sé quien eres, creo que te has equivocado. "
Es la única opción que me queda, seguramente le hayan dado un número equivocado y ha resultado ser el mío.
"No creo estar equivocado, Norah. "
Miro sorprendida el mensaje al ver escrito mi nombre. Esto empezaba a dar miedo, un extraño haciéndose llamar por daddy tiene mi número y sabe mi nombre. Es momento para comenzar a alarmarse.
Bloqueo el móvil y decido no responder más a sus mensajes, pero de nuevo, la pantalla se enciende mostrado otro de sus mensajes.
"Contesta al mensaje cariño, a daddy no le gusta que le ignoren. "
Trago saliva, mis manos comienzan a temblar y mi corazón comienza a latir cada vez más rápido.
"Lo siento señor, pero no hablo con extraños. "
Espero que después de este mensaje lo haya comprendido y me deje en paz, pero al parecer no es así cuando vuelve a enviarme otro más.
"Llámame daddy, nena. Te aseguro que no soy ningún extraño, de hecho ya nos conocemos. "
¿Nos conocemos? ¿Cuándo? Habría recordado a la persona que quiere que le llame daddy, de eso estoy segura.
"No le creo, usted quiere engañarme. "
Me convezco a mí misma de que será alguien que se aburre demasiado, pero la incógnita de saber cómo ha conseguido mi número, sigue ahí.
"No nena, lo que daddy quiere es meterse en tus piernas y follarte. "
Mis ojos se abren al instante al leer su mensaje. Esta vez no le respondo, me da igual que se enfade por no contestarle, no sé quien es, pero no hace gracia.
Saco los libros de mi mochila para terminar mis deberes y comenzar a estudiar ya que pronto empezarán los exámenes y quiero estar preparada.
Me tumbo en la cama suspirando de alivio en cuanto termino de una vez.
Cierro mis ojos para poder descansar algo, pero mi móvil vuelve a vibrar por cuarta o quinta vez.
Así que harta de que no me deje en paz, leo sus mensajes.
"Ni se te ocurra dejarme en visto Norah. "
"Maldita sea, respóndeme de una vez. "
"Daddy se está enfadando pequeña y eso no es nada bueno. "
"Decidido, estás castigada. "
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Daddy's Lessons.
Fanfiction"Sé una buena niña y abre tu boquita para daddy. " El profesor Styles tiene una propuesta para ti, pequeña.