Capítulo 14: Bastardo con suerte

21 4 0
                                    

Oficina de Francisco Ramírez, dos días desde la liberación de Joseph Navarro...

-¡Maldita sea! Este caso me tiene con los nervios de punta. No ha habido indicios de un posible sospechoso y Maya no está poniendo nada de su parte. -Dijo Ramírez dándole un sorbo a una taza de café, mientras que con la mano libre se tomaba el pelo. Dió un vistazo a la ventana de su oficina.

-Oye, oye Ramírez, ¿cómo estás? -Era un joven con una bata blanca, audífonos de diadema, pelo alborotado y unos lentes de sol.

-¿Qué haces aquí Axel? Si no traes algo que ayude en la investigación mejor lárgate. -El chico se llamaba Axel Pimentel, el médico forense que realizó la autopsia al cuerpo de Darián.

-Pues no vine aquí solo amigo, pasa de una vez hermano.

-Hola Ramírez, ¿Cómo va todo? -Dijo Alcántara, tras haber entrado a la oficina de Ramírez.

-¿Alcántara? Hacía mucho que no te veía. -Su ex compañero lo vió con una sonrisa en su rostro. -El caso no ha sido lo que yo esperaba.

-No hables, sé cómo está la situación actual, es por eso que desobedecí un poco al imbecil de Castro.

-¿De qué hablas pequeño idiota? -Le preguntó Ramírez con una sonrisa nerviosa.

-Cuéntale Pimentel.

-Veras Ramírez, Alcántara y yo fuimos nuevamente a la escena del crimen, buscábamos algún indicio que nos llevará hacia un nuevo sospechoso y no creerás lo que encontramos.

Casa Navarro...

Joseph estaba en su habitación viendo hacia el techo, en eso recibió una llamada.

-¿Hola?

-Hola Joseph, habla Maya.

-Hola Maya, ¿Qué pasa?

-Nada, solo estaba algo aburrida, me estaba preguntando en sí te gustaría salir a cenar el día de hoy.

-No lo sé, tengo unos trabajos pendientes.

-Entiendo, bueno será otro día. -Joseph comenzó a reír. -¿De qué te ríes?

-Solo estaba bromeando, ¿En dónde quieres que te vea?

-Ash, aunque admitiré que si me sentí un poco mal, te veré en el parque.

-Ok, ahí te veré. -Joseph cuelga el teléfono y lo arroja lejos.

-Oye imbecil, ¿Quién era la chica? -Dijo Alexa Navarro, ella era la hermana menor de Joseph aunque la diferencia era mínima, ella contaba con 20 años; era una chica de aspecto algo tierno, cabello rizado y ojos color marrón oscuro, era algo menor en estatura, pero su carácter dejaba por que desear.

-¿A ti qué te importa? ¡Lárgate de mi habitación! -Ella rió un poco y entró al cuarto de Joseph.

-¿Tan rápido cambiaste a Darián? Eso es una falta de respeto hacia ella, te recuerdo que está muerta. -Dijo ella arrogantemente.

-Yo no he cambiado a nadie, además a ti menos te debería de importar tú estás conciente de como ella era conmigo. -Joseph se tiró en su cama y con una mano cubrió sus ojos.

-Lo se, esa perra nunca me agradó. Pero no era un motivo para que la matarás hermanito. -Continuó riendo, luego tomó asiento cerca de Joseph.

-Yo no tengo nada que ver con eso. -Dijo mientras le daba la espalda.

-Ay hermanito, no intentes engañarme, tú eres el único con el que esa puta tenía conflictos.

-¡Ya cállate! Eso no tiene nada que ver, ¿O si?

El Final De La LíneaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora