Son las 6:35, no encontré a la bruja y sólo me queda esperar.
Faltan dos minutos para que Max sea solo un recuerdo.No puedo describir lo culpable que me siento, simplemente quiero morir. Él es tan caballero. No le ha importado que yo haya sido quien lo mató, él me trata con tanto amor que no me perdono como pude no hacerle caso cuando me dijo que no arrancara los hongos. Jamás me perdonaré eso.
6:37
Siento un grito y un estruendo, es Max.
Corro a ver donde está y descubro a la bruja llevándose el cuerpo de mi amado. Ella me mira con compasión y me dice que este no es el fin, que por mis actos recibiré un castigo mayor.
Ahora eso es lo que menos me importaba, le pedí que me dejara despedir y accedió. Le di un beso en sus labios ya sin vida y en eso recordé toda mi vida y errores y comencé a llorar desconsoladamente sobre él, la bruja me separó de su cuerpo y se lo llevó. Tenía razón, lo peor apenas empezaba pues aquel sufrimiento era el peor castigo.
Pero ese no era el castigo al que se refería la bruja y al despertar yo no era un cuerpo, era un alma. Estaba muerta.
Al despertar pude ver mi cuerpo, ya no se movía en lo absoluto pero mi alma seguía sintiendo y aún podía hablar y moverme. Podía traspasar a la gente y no se daban cuenta. No era nada.
Al principio no me molestaba no existir, ser ignorada. Pero al pasar los años empezo a desagradarme porque me cansé de no ser nadie.
Han pasado 100 años desde que murió Max y aún sigo condenada a ser un alma en pena, al parecer seré así por siempre. Por un estúpido error.
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Caperucita Y El Lobo: La historia detrás de la historia
FanfictionEn un intento de libertad caperucita comete el peor error de su vida, lo que no sabe es que aquel error solo fue el comienzo de la verdadera tragedia