5

31 2 0
                                    

El aire de la mañana acaricia mi rostro con suavidad, los rayos de la estrella que ilumina cada día nuestro mundo choca con mi piel cubriendola con su calor.
Pero apesar de que la naturaleza me regala infinidad de placeres, nada se compara con las delicias que tu me otorgas mi amada, tus manos recorriendo mi cuerpo, hace que cada poro de mi ser se doblege ante ti y se deje consentir por tus suaves manos, tus besos, aquellos que encienden en mi, un fuego perpetúo que arde más que una super nova.
Eres ese licor que me embriaga de amor y deseo, un elixir que jamás deseo dejar de beber, uno que ahnelo compartir a tu lado toda la vida.

Poemas Cósmicos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora