En los limites del infinito, caminaba por los extensos paramos del universo, me adentre en lo más profundo de la realidad, a un abismo sin fondo, buscaba algo prohibido, un objeto que hasta los dioses buscaron con desesperación antes de su extinción.
En lo profundo, en un lugar negro y olvidado se encuentra un trono, decorado con huesos y cráneos de diferentes razas, de tiempos inmemorables. Un ser esta sentado, mirándome con su esencia, escuchaba mi respiración agitada. Sabía que vendría a buscarlo.
- Vienes a salvarla...¿verdad? - dijo aquel ser al verme entrar a sus dominios
- Si y no aceptaré un no por respuesta, entregame lo que viene a buscar y nos enviaremos problemas, ya han muerto demasiados en esta cruzada y quiero evitar matarte - dije con voz calmada.
- Te notó muy confiado desde tu batalla con los diodes del universo ¿crees que podrás conmigo?...ellos, inmundo mortal me temían como a un dios.Aquí en el último suspiro de la eternidad, en los albores de un universo moribundo...por fin encaró mi última lucha, ya me enfrente a dioses y leyendas, incluso a los creadores del cosmos, pero solo falta un oponente, uno que nadie ha podido hacerle frente..."la Muerte".
Su cuerpo es delgado con una túnica negra, tan obscura como los limites del firmamento, sus ojos rojizos, se puede sentir como consumen tu alma, alimentándose del sufrimiento de cada ser vivo del infinito, sus manos tan pálidas como una enana blanca.
- ¿cuánto estas dispuesto a sacrificar por tu esposa? - dijo rompiendo el silencio que había entre nosotros.
- ¡Los dioses no me detuvieron, las entidades cósmicas no me retuvieron y tú no me vas apartar de la mujer que amo! - dije gritándole sin miedo, sin retroceder.
- Recuerda...salvar una vida implica sacrificar otra...enfrentarme tendrá un costo inimaginable.
- ¡Estoy dispuesto a sacrificar a todo este universo si es necesario por salvar a Itzel! ¡Fui yo quién masacro a todos los dioses de este universo, descuartize a cada Celestial y entidad por proteger a mi esposa, juré protegerla, y hoy vengo a cumplir esa promesa! - dije gritando y abalanzandome a aquel ser.La lucha inició, cada golpe hacía temblar los cimientos de un universo muerto, nuestros rugidos quebraban el espacio frio y solitario, pero algo sucedía, sus puños eran tan fríos que congelaban por un instante mi cuerpo, mis golpes no le hacían efecto, cada segundo que pasaba me iba agotando mucho más, a este punto ya habría aniquilado a la mitad de los reyes del infinito, pero la Muerte parecía no cansarse, me debilitaba con cada impacto que recibía, podía notarlo...su poder era...ilimitado.
En medio de la pelea aquel ser oscuro tomo mi cuello, apretando sin piedad, mi cuerpo esta sangrando como nunca, mis ropas echas jirones.
-¿Alguna vez te preguntaste porque ningún dios se atrevió a enfrentarme? Porque nadie escapa al paso de los años, nadie puede huir de la muerte.
- Aquí se alza un mortal que aún va a enfrentarse a ti - dije vomitando sangre.
Fue en ese momento con su mano agarro mi brazo y lo arrancó de su lugar, la sangre comienzaba a fluir, mi mente se nublo.
- Yo le arrebate el brillo de billones de estrellas antes que tu nacieras, asesine a trillones de galaxias ¿qué te hace diferente iluso? Si no pudiste salvarte, ¿como planeabas salvarla de lo que por derecho es mío?...quedate aquí y pudrete hasta el fin de las nebulosas...sientete afortunado no falta poco para ese hermoso espectáculo.En ese momento me arrojó al vacío infinito, mi cuerpo ya no reaccionaba, moría a cada minuto, mis brazos y piernas se congelaban sin oposición Inevitablemente me entregaba a las garras de la muerte.
El calor bañaba mi ser, el ambiente era diferente, no se como pasó pero veo una columna de agua luminosa...imagenes comienzan a surgir de aquél espectáculo, son...¿mis recuerdos? Puedo ver como mi vida pasaba rápidamente, desde mi niñez hasta mi adolescencia, todo se resumió en un abrir y cerrar de ojos, y me cuestione ¿si de verdad había valorado mi vida? Pero mis recuerdos se detuvieron de momento, vi a mi amada Itzel, el día que la conocí, nuestro primer beso, nuestras primeras risas juntos, siguió pasando escena tras escena y se volvió a detener, y se paro justo cuando le pedí ser mi esposa.
"Te prometo protegerte sin importar a que tenga que enfrentarme, te amare en esta vida y en la otra, voy a enfrentarme a toda la realidad si es necesario para cumplir mi promesa"
Aquellas palabras me recordaron que tenia un propósito, que debía de pelear hasta el final, la fuerza que alguna vez tuve volvio a mí.La muerte se dio media vuelta al verme suspendido en el vacío, agonizando y destinado a una muerte segura. Pero de la nada comenzo a surgir una columna de luz que emanaba de mi, un collar que colgaba de mi cuello brillaba sin igual, de colores rojizos.
- ¡Te dije que iba a enfrentarme a ti, te dije que nada me detendría, y ahora sentirás la furia del multiverso! - gritando con la furia de miles de super novas, desgarre el espacio tiempo, convirtiendo su esencia en cenizas y polvo. La Muerte por primera vez en toda su existencia tuvo miedo a morir, sus huesos se rompían sin oposición, su mente se corrompida de una manera donde la locura ya no lo dejaba pensar con claridad, su carne se desprendía de sus órganos, sus gritos que hace un momento eran de furia y poder ahora se reducen a lamentos de agonía y dolor.
En la oscuridad yace un cuerpo inerte, la misma Muerte por fín había caído, de su boca surge una sangre verdosa oscura como su alma, me acerco lentamente y con mi mano creo una burbuja de materia para recoger una pequeña muestra de ese viscoso líquido, creó un agujero de gusano, lentamente me adentró en el para salir de aquél lugar tan tormentoso.
En un mundo donde la prosperidad se esparce lentamente en una civilización que vivió la guerra y el dolor durante mucho tiempo. En una pequeña casa rodeada de bosques llenos de vida, con pasto amarillento alrededor, se encuentra una humilde casa de madera, con pintorescos toques femeninos que le dan vida aquel paramo solitario, el agujero de gusano se abre enfrente de aquella casa, me desplomó sin que nada me detenga, mis heridas estan curadas incluso mi brazo se regenero por completo, pero el cansancio es insoportable, llego a vomitar sangre pero eso ya no importa, camino lentamente a mi hogar con la piel arrugada que caracterizan a un viejo, la puerta se abre de par en par, camino sobre un pasillo lleno de cuadros que contienen cartas, fotos de recuerdos maravillosos. Entre a una habitación al fondo del pasillo, hay una cama con sabanas...ahi estas amada mía, tociendo sin parar.
- Querido veo que te tardaste mucho...¿A donde fuiste? - dijiste con ternura y con mucha dificultad.
- Fui a buscar la cura para tu "tos" querida - me acerque lentamente sentandome a lado tuyo
- ¿de verdad? Pero baby te vez muy mal, ¿que te sucedió? ¿porque te tiembla la mano? - dijiste con voz preocupada al ver mi mal estado.
- son los años mi cielo, este cuerpo viejo ya no sirve de nada solo para una cosa...protegerte de todo - dije besandote la frente, los cachetes, tu nariz y finalmente tus labios.
Extendi mi mano temblorosa dandole a mi amada la sangre de la misma Muerte.- ¿que es esto? - dijiste sorprendida.
- comelo mi cielo, es tu cura...jamas volveras a enfermarte...te lo aseguro - dije dandote una sonrisa de oreja a oreja.
Mi amada comenzo a comer ese fruto, pero algo paso...solo comio la mitad y la otra me la ofreció sin titubear.
- Si con esto nunca me enfermare...tambien deberias comerla, para que jamás nos enfermemos, ¿te parece baby? - dijiste metiendome el fruto en la boca sin darme tiempo a responder.- Juntos por siempre y para siempre - dijimos al unísono, besandonos como los adolecentes que siempre fuimos, recordando cada detalle, vivencia y caricia que vivimos durante tanto tiempo, revivimos el fuego que alguna vez dio nacimiento a las estrellas y al propio universo, nos sumergirnos en las mieles del recuerdo y el amor.
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Poemas Cósmicos.
Science FictionUna colección de historias, escritos y poemas de amor y pasión. Donde el universo es mi pieza a moldear.