«OMEGAVERSE»
❝La luna de sangre renacerá con el heredero al trono, el lazo inquebrantable se formará y una nueva era de albinos reinará. Los clanes enemigos caerán y una masacre ocurrirá. Ambos bandos enfrentados, pelearán por el amor del príncipe...
Jimin se dió un baño rápido y bajó a cenar. Mientras caminaba por los pasillos del palacio se encontró con Yoongi y Hoseok saliendo del despacho.
—Oh Jimin, que oportuno, ¿Vamos a cenar?— Dijo Hoseok.
—Si, bajaba para eso pero creo que me perdí. —Jimin bajó los puños de su camisa algo avergonzado por haberse perdido.
Yoongi no decía nada, simplemente observaba la belleza de Jimin y la manía que tenía de esconder sus manos con los puños de las camisas. El menor todavía mantenía las mismas costumbres y los mismos gestos, solo que ahora era un poco diferente debido a que la vida que llevaba no es igual a la de su vida pasada. Pero Yoongi se encargaría de devolverle todos los recuerdos cuando sea el momento indicado.
—Señor Min, ¿bajará a cenar? —el omega lo sacó de sus pensamientos, Yoongi asintió y camino al lado de Jimin.
Los cuatro Alfas y el Omega se encontraban sentados en la mesa principal del palacio, era enorme, la cena estaba más que deliciosa para Jimin. Jamás había comido tal cosa pero le parecía delicioso. Todos estaban en silencio y eso a Jimin lo ponía algo incómodo.
—¿Cómo estuvo su día señor Min? —Preguntó el Omega algo nervioso por el silencio.
Yoongi y Hoseok sonrieron casi en sincronía, ambos conocían como era Jimin. Él odiaba que no se hablara de nada en la mesa, lo incomodaba, ambos alfas lo recordaban muy bien.
—Fue bueno Jimin, porque estás aquí y puedo estar más tranquilo. —Jimin se sintió contenido. Los demás alfas de la mesa entendían perfectamente a lo que Yoongi se refería. Mientras que Jimin pensaba que lo decía porque ya estaba con él, y no con su madre y su padrastro.
—Gracias por preocuparse tanto por mí. —Jimin agradeció. —Me gustaría, poder conocerlos un poco más a todos, tal vez no encaje en esta manada, pero quiero intentarlo.
—Jimin, tu encajas perfectamente en la manada. —Dijo Hoseok jugando un poco con su tenedor.
—Podemos presentarnos ahora que estamos todos. Estoy seguro de que si yo no quiero contar algo mío, seguramente mis hermanos lo harán y esa es una buena forma de conocernos.
—Bueno, pero... ¿Ustedes no quieren conocerme a mi? —Preguntó Jimin.
Los cuatro Alfas tenían ganas de decirle que ya lo conocían desde hace años, incluso en su vida pasada. Pero mantuvieron el secreto que Yoongi tendría que revelar algún día, porque era el derecho del alfa que se había pasado buscando a ese omega por tanto tiempo.
—Por supuesto que sí Jimin, está muy bueno conocernos entre todos. —Dijo Jungkook.—si quieres podemos presentarnos y así empezar.
—Oh, yo empiezo. —Dijo Hoseok. —Soy Min Hoseok, tengo...—Mierda olvidó su edad, si le decía la verdad tendría que decirle que tenía trescientos veinte años pero obviamente seria una idiotez hacerlo así que lanzó el primer número que se cruzó por su mente. —Veinticuatro años y tengo una familia muy reducida, solo somos mis padres, mis hermanos y yo.
Jimin escuchó atento y esperó a que los demás prosigan.
—Yo soy Min Jungkook. Tengo dieciocho años, amo los videojuegos, la tecnología y leer, lo demás ya lo sabes. —Con pocas palabras, Jimin entendió bastante.
—Aquí Min Namjoon, cumplí veintitrés años, soy un amante de la literatura, manejo cinco idiomas diferentes. Me gusta viajar y comer diferentes tipos de comidas pero si son hechas en casa soy extremadamente feliz.
—Bueno, últimamente no eres muy feliz por que no tenemos a nadie que nos cocine. —dijo Jungkook.
—¿Y quién preparó esto? —preguntó Yoongi
—Yo lo hice, leí tres libros de recetas, seguí todas las instrucciones. Todavía no puedo creer como no incendié toda la cocina real. —Dijo Namjoon.
—Esta delicioso —Dijo Jimin. —Si quieren puedo cocinar para ustedes.
—No Jimin, tu no debes hacer ese trabajo. Ya contrataremos a alguien que cocine. —dijo Yoongi.
—En ese caso... Sé de alguien que le podría interesar trabajar aquí.
—¿Conoces a esa persona Jimin?—Preguntó Namjoon
—Si lo conozco, es uno de mis mejores amigos—Dijo Jimin.
—Una persona no creo que alcance para los quehaceres de la cocina ya sabes, cocinar, lavar los cubiertos, limpiar la cocina. Se necesitaría más de una persona para trabajar. —Dijo Namjoon
—¿Dejaste un desastre en la cocina verdad?— preguntó jungkook.
—Si, pero eso no importa ahora. —respondió Namjoon.
—Bueno, déjenme hablar con mis amigos, tal vez a ellos les interese trabajar aquí, y además... Podré tenerlos cerca ya que son las únicas personas que conozco después de ustedes. —Dijo Jimin algo emocionado, deseaba ver a sus amigos lo antes posible.
—Me parece una increíble idea Jimin, cuando hables con tus amigos por favor avísame ¿si?— habló Yoongi.
—Esta bien... Volviendo a las presentaciones, solo queda usted señor Min. —Jimin se sonrojó levemente al conectar su mirada con los ojos claros del alfa.
—Tienes razón... Soy Min Yoongi, tengo veinticinco años y soy el heredero al trono de Daegu. Mis pasatiempos son tocar el piano, componer y crear música. Me gusta estar a solas y que nadie me moleste, amo dormir y...-
—Eres un aburrido, pareces nuestro abuelo. —Dijo Hoseok.
—A mi no me parece aburrido...—Dijo Jimin más sonrojado que antes. —Es decir... Parece una persona interesante.
Los cuatro alfas sonrieron encantados, Jimin estaba empezando a sentirse atraído a Yoongi, eso todos podían notarlo. Pero les pareció extremadamente genial que el Omega tan rápido se diera cuenta de que Yoongi le atraía. Cómo alfas podían notarlo debido al aroma que Jimin expulsaba. Ese aroma a frutilla, miel y limón. Tan dulce como él mismo. Los alfas sentían el aroma de Jimin, pero Yoongi era el que estaba totalmente perdido en él, porque es su omega. Al sentir el aroma de Jimin, Yoongi recordó cuanto extrañaba ese aroma que tanto amaba.
—Tu también eres muy interesante Jimin... ¿Te digo un secreto?—Jimin asintió a la pregunta de Yoongi. —Antes de que tú llegaras, en esta mesa no se decía ni una sola palabra a la hora de cenar. Y ahora que estás tú aquí, has convertido la hora de la cena en mi hora favorita.
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