V

375 80 22
                                    

-Yoongi, llegas tarde, algo muy inusual.

-Lo sé,  no pude evitarlo.-miró rápidamente sobre el escitorio- Todo empezó ayer, resulta que después del incómodo vuelo que tuvimos que hacer a Inglaterra, más específicamente Londres. Fueron 8.857 kilómetros y once horas con veintisiete segundos de Taehyung hablando sin parar para evitar la incomodidad del silencio. Cuando llegamos nos quedamos en un hotel que la compañía había pagado y decidí salir a conocer la ciudad antes de ir a dormir. El clima estaba nublado como se acostumbra en el país así es que el frío y el hecho de que no poseo un gran manejo del inglés hizo que volviera pronto al hotel.-vuelve a mirar el escritorio- Cuando llegué a la habitación encontré a Taehyung con el cabello mojado y su cuerpo cubierto solo por una toalla atada a la cintura, lo que contrario a lo que normalmente pensaría era una vista increíblemente sexy. Me quedé unos segundos admirando su piel perfectamente dorada antes de percatarme de lo que estaba haciendo y cuando levanté la vista lo encontré con las mejillas sonrojadas. Titubeé algunas incoherencias antes de salir otra vez y escuchar un "esperame para ir a cenar perdulario" así es que me quedé del otro lado de la puerta mientras buscaba lo que eso significaba en Internet.

-¿Y que significa? -Yoongi mira disimuladamente el escritorio otra vez.

-Básicamente, me dijo que soy un pervertido. -Sonrió mostrando sus encias y miró el escritorio antes de seguir- así es que cuando salió tenia la cara como un tomate y no podía mirarlo a los ojos y dijo que lo olvidara o todo se pondría raro otra vez. Fuimos a cenar en el restaurante del hotel y más tarde nos fuimos a dormir, lo cual me puso bastante incómodo debido a que las únicas dos camas en la habitación estaban bastante cerca y tenia una perfecta vista de su espalda mientras se ponía el pijama. Realmente soy un pervertido. -Dijo mirando el escritorio.

-Lo que no explica por qué llegaste tarde.

-Ah, eso. Cuando llegamos a Seúl fuimos a almorzar al restaurante que se encuentra frente a la empresa y cuando salimos se le ocurrió un juego "muy divertido" . ¿Lo hiciste a propósito?  -Dijo frustrado con la vista fija en el escritorio de su terapeuta.

-¿Qué cosa?

-No finjas Hoseok, los lápices. -Dijo poniéndose de pie y acomodando los mismos de menor a mayor tamaño.

-Lo hice, quería comprobar cuánto tardabas en reaccionar.

-Estoy hablando contigo y no puedo concentrarme si haces estas estúpidas pruebas.

-Duraste más que la última vez.

-¿Es es serio? Espera ¿Última vez?  ¿Ya lo has hecho, soy una especie de entretenimiento para ti?

-Claro que no Yoongi, es parte de tu tratamiento, es mi trabajo. Puedes proseguir con tu historia.

-No se donde me quedé -dijo cruzando los brazos frustrado.

-El juego tan divertido.

-O si, resulta que además de llorón es un niño bastante estúpido -dijo sonriendo- ¿Sabes cual fue el juego que se le ocurrió hacerle a una persona con trastorno obsesivo compulsivo?  "el que pisa la raya pierde" dijo antes de empezar a saltar las baldosas evitando pisar las malditas rayitas. Llegué tarde porque estuve hasta las cinco de la mañana pensando en la maldita raya que pisé, entonces tuve que subirme a mi auto y volver a la vereda del restaurante para cruzarla sin pisar ninguna y poder dormir en paz.

-Yoongi.

-¿Qué?

-¿Eres consciente de que las últimas sesiones solo hablas de ese chico?

-Si. ¿Y qué?

-¿Que las últimas palabras que aprendiste se relacionan ya sea directa o indirectamente con él?

-Si. ¿Y qué? -Dijo esta vez menos seguro.

-¿Y del hecho de que contaste la frustración que tuviste por no dormir en toda la noche por su culpa, con una sonrisa? -Esta vez no respondió - ¿Es posible que te sientas atraído hacia el muchacho?

-¿Que si me gusta Taehyung? Es exasperante, ruidoso, quisquilloso, llorón, insoportable, sexy, adorable y..me encanta. -Dijo sorprendido ante sus propias palabras.

-Yoongi lamento que esto tenga que ser de esta manera. -Fue lo último que escuchó antes de sentir un fuerte dolor en la parte posterior de su cabeza y notar como su visión se hacía difusa antes de perder el conocimiento.

TOC TOC || TaegiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora