Bajo una máscara

CAPÍTULO 15. MIRADAS LLENAS DE DECEPCIÓN

El azabache ahora estaba limpiando un mueble de la sala mientras que Scourge había salido a comprar algo para alegrar a su amigo

Mephiles al terminar de limpiar se dirigió al cuarto de su joven dueño, tocó la puerta esperando una respuesta

-Pasa-entró para ver al albino acostado en su cama, su mirada ámbar se encontraba roja por tanto llanto y mirando hacia el techo

-¿Quieres que te prepare algo de comer?- el robot se acercó a la cama

-No gracias-

-De acuerdo entonces me retiro-iba a retirarse cuando una mano tomó fuertemente su brazo izquierdo-¿Quieres algo?-

-Quédate aquí, por favor-Silver movió su cuerpo dejándole un espacio libre a Mephiles quien sin decirle nada se acostó

-¿Ya te sientes mejor?-

-Sí, gracias por escucharme y...por no juzgarme-

-De nada y no te preocupes yo no sé juzgar a la gente-

-Espero que nunca lo aprendas, también quiero pedirte algo-

-¿Y qué es?-

-Nunca se lo digas a nadie-

-Está bien-el silencio invadió esa habitación, las miradas de los dos erizos estaban dirigidas hacia el techo

Los únicos sonidos presentes eran los autos y personas del exterior y la respiración calmada de Silver

El joven albino se levantó para ver el paquete que hace un día había recibido, lo tomó entre sus manos para comenzar a abrirlo

-¿Eh?-dentro de la caja se encontraba un traje negro junto con una pequeña nota

-¿Un número telefónico?-

-Así parece, también dice "Llámame y arreglemos esto de una vez por todas"-inmediatamente captó de quien era el mensaje

Tomó su celular el cual estaba en un mueble para empezar a marcar ese número, esperó un rato para poder escuchar su voz

-Veo que por fin me contestas-

-Amy, escucha...-

-Escúchame tú a mí, voy a mandarte una dirección, te esperó ahí a las 9 pm y por favor usa el traje, adiós-

-Espera, Amy-le colgó dejándolo con las palabras en la boca, su celular volvió a sonar, al revisarlo vio que le había enviado la dirección

-Silver... ¿Vas a ir?-

-Sí, tengo que arreglar las cosas con ella, veo que ya es muy tarde-ya eran las 3 pm y los dos salieron de la habitación para dirigirse a la cocina

-Voy a preparar la comida-

-Está bien, el idiota aun no llega-su quejó Silver-¿Dónde se habrá metido?

-El idiota tiene nombre ¿sabes?-el oji-ámbar dirigió su vista hacia la puerta para encontrarse a Scourge con el ceño fruncido cargando dos cajas de pizzas

-Hola-le saludó el robot siendo ignorado

-Veo que ya estás mejor mocoso, anda vengan, vamos a ver una película-

Los tres erizos disfrutaron de su tarde de pizza y películas mientras esperaba que llegara la noche

La eriza rosada miró nuevamente su teléfono, por fin la había llamado, ahora solo tenía que esperar unas horas