» Capitulo Final: Promesa interna.

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"Mia, tú me gustas, más de lo que crees. Así que... dime... ¿vendrías conmigo?"

Me congelé en mi lugar y parpadeé desorientada. Nickolas parecía muy serio con respecto a su pregunta, el esperaba una respuesta, no muy seguro de lo que yo respondería.

"Perdóname" Fue lo único que dije.

Él sonrió con tristeza mientras bajaba la mirada, parecía que ya esperaba esa respuesta, por lo que sujetó con fuerza mis dos manos y las beso, primero una y luego la otra.

"No serias tu si no me hubieras dicho que no" Él bajó la vista, por primera vez ante mí, se veía vulnerable. "Pero hay algo que tú nunca me respondiste" Esperé a que hable, sentía que, si abría la boca, me rompería en mil pedazos. "¿Tú me quieres?"

Los ojos se me llenaron de lágrimas y mordí mi labio para que un sollozo no se escape.

¿Que si lo quería, solamente?

Asentí lentamente y su mirada parecido brillar.

Aquello me hipnotizó; sus ojos poseían un brillo especial, un brillo que opacaba ferozmente el fulgor de las estrellas, y seguramente las hacia ponerse celosas; ya que ese resplandor que sus ojos soltaban era tan bello y delicado y por supuesto, capaz de iluminar a toda una ciudad en tinieblas. Sus labios rosados parecían un cojín de plumas bordado en seda de alguna realeza, y al estirarse, formaban una bellísima sonrisa de ensueño, como la de un niño tatuada en la de un galán de revista. Su rostro era perfecto con ese tapiz de piel clara, y con los diversos lunares que se encontraban esparcidos a su alrededor de su cara eran casi invisibles.

"¿Tengo algo?" Preguntó y me hizo aterrizar.

"No, para nada" Él color subió a mis mejillas por haber sido descubierta en mi análisis visual de aquella maravilla que era su rostro.

Se hizo un silencio cómodo, lleno de pensamientos e ideas, nuevas sensaciones y emociones que hacían que mi estomago se revolviera de solo pensarlas.

"Entonces prométeme algo" Nickolas dijo, serio. "No me esperes" Abrí mis ojos en par.

"Nickolas-"

"Mia" Me llamó con advertencia. "No te estanques por mí. No pierdas un año en vano"

Y yo asentí con lentitud, sin querer hablar más, pues aquella era una simple mentirilla que no le haría mal a nadie. Secretamente me había prometido jamás serle infiel a mis sentimientos. Mientras Nickolas me gustara, yo lo esperaría.











Doy un sorbo a mi té mientras parpadeo con lentitud, una sonrisa se planta en mis labios al sentir el calor atravesar mis fosas nasales. Suelto un suspiro que había estado conteniendo y cierro mis ojos aun sonriendo.

Suspiro nuevamente al recordarlo, a pesar de todo no me arrepentía de mi decisión. Eso es lo que me gustaba.

Dos días habían pasado, y justo en ese mismo momento me preparaba mentalmente, pues acompañaría a Nickolas al aeropuerto, Sofi vendría conmigo, pues a pesar de todo, no podía decirle que no a Gray, lo cual era una jugada muy en contra.

✴ ✴ ✴

"En serio no sé qué hacer para la presentación" Se quejó Yuki. "Yo no quería que me elijan, digo, yo creí que sería divertido, pero, ¡es robótica!" Exclamo y Matt sonrió.

"Puedes decir algo así como...: "Hola... ¿Compu estan?" Soltamos una carcajada. "Les robot un minuto de su tiempo..." Sofi ya lloraba de la risa, y Yuki se tapó la boca. "PC a todo..." Fue interrumpido por nuestras carcajadas, ese chico estaba muy mal de la cabeza, pero era muy gracioso, y se veia lo bien que le hacía a Yuki. "¡No me dejan terminar!" Se quejo riendo.

Yo mire la hora, la única que seguía riendo era Sofi, ella nunca sabe cuándo parar una vez que empieza. Al ver la hora mis ojos se abren de par en par.

"¡Sofi, son las siete, se hace tarde!" Chille, su ataque de risa freno y me miro con los ojos llenos de temor.

Ambas nos paramos y los saludamos, ellos nos sonrieron mientras se abrazaban y nos veían irse.

Tomamos un taxi y lo obligamos a que vaya a toda velocidad hacia el aeropuerto. Una vez llegamos corrimos hacia el puesto en donde los chicos debían esperar, y ahí estaban. Se suponía que primero debían ir hacia New York para ahí encontrarse con las personas que los harían recorrer el mundo.

Me acerqué a Nickolas, quien se estaba tomando una foto junto con una chica, Gray y Cooper. Sofi tapó su boca, no aguantó y corrió hacia Gray, él la abrazó escondiendo su rostro en el cuello de Sofi, y ella lloro desconsoladamente. Yo fui hacia Nickolas y lo abracé con fuerza, él me devolvió el abrazo con mucha fuerza, no hicieron falta palabras, yo ya lo entendía, ambos lo entendíamos todo.

Nos separamos, la cercanía entre nosotros era bastante considerable. Al fin pasaría. Al fin lo haríamos, lo besaría finalmente. Nos acercamos lentamente, sin romper el clímax, pero una voz interrumpió.

"¿Yuki no vendrá?" Me voltee hacia Cooper, Sofi también. Nos miramos entre sí y rompimos en carcajadas.

"¿Que es tan gracioso?" Pregunta Nickolas, divertido, mientras apoyaba su nariz contra mi cabello.

"¿Sabes acaso lo infantil que es tu hermano?" Solté con una ceja alzada.

"Lo sé, y más de lo que crees" Reí abrazándolo nuevamente.

El llamado para su vuelo a Nueva York se hizo presente, Gray abrazo a Sofi, ambos se besaron, aquello me hizo sonreír.

Me voltee hacia Nickolas, él tenía una ceja alzada y yo entorne mis ojos. Me acerque a él y cuando mis labios casi rozaron los suyos, él se fue hacia atrás de manera brusca, cuando lo observo raro, noté que fue Cooper el que lo tiro hacia atrás. Yo jalé a Nickolas y planté un beso en su mejilla.

Sentí mi cuerpo frio al mismo instante en el que Nickolas se había alejado completamente de mí.

¿Vieron cuando la estas pasando tan bien, que quieren que el momento se congele para siempre? Así me sentía yo.

Intenté quedarme más tiempo, pero me pareció extraño, así que lentamente me fui alejando. El sujetó mi mano y la besó. No me sonrojé, me sentí apreciada y eso me hizo sentir bien.

Se fue alejando lentamente mientras tomaba sus cosas, y a paso lento caminaba hacia las puertas que daban hacia la entrada del avión. Me sonrió por última vez y yo me acerqué a Sofi para tomar su mano. Ambas los saludamos con las que nos quedaban libres y ellos devolvieron el saludo, subiendo al avión. 

ESTÚPIDO NICKOLASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora