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-Nozomi, pensar que eres tan obediente ... Sé que no puedo resistirme.- Dijo Eli mientras arrastraba a Nozomi. Su mano estaba firmemente sujetando la muñeca de Nozomi, evitando que escapara la chica de pelo púrpura.

-Bueno, ¿quién sabe lo que podrías hacerme si no me rescataste, Elichi?- Nozomi se rió secamente.

Había dejado de resistir desde que Nico la abandonó, viendo que no importaba lo que hiciera, Eli no la dejaría ir de todos modos. Entonces, Nozomi simplemente cedió. Para ser más precisos, sería apropiado decir un plan para escapar.

-Así que tu no sabe lo que voy a hacer, eh?- Eli sonrió.

Antes de que Nozomi pudiera darse cuenta de lo que Eli quería decir,coralo  a Nozomi contra la pared y puso ambas manos a ambos lados de su cabeza. Una expresión oscura y arriesgada estaba en la cara de Eli.

-Uh ... ¿Elichi? Estamos en el medio del pasillo, ¿sabes? Seguramente, no lo harías.

-Oh, pero lo haría, Nozomi.- Eli intervino. - Después de todo, te he permitido bromear más que suficiente ahora, ¿no?

-E-Elichi? Vamos, deja de bromear. Los estudiantes que pasan se darán cuenta, ¿sabes?

A pesar de que Nozomi estaba sonriendo, Eli realmente la estaba asustando, Nozomi ni siquiera podía pensar con claridad. No con la proximidad entre ella y Eli en este momento.

-No me importa. Además, creo que eres tú quien te importa, ¿no es así, Nozomi?

Eli cariñosamente acarició algunos mechones del cabello de Nozomi. Mientras lo hacía, la mano de Eli sin darse cuenta rozó la oreja de Nozomi, causó que Nozomi se estremeciera ante el contacto. Inesperadamente, Eli captó esa reacción. Ella entrecerró los ojos hacia Nozomi, su deseo lascivo ascendiendo.

-Bueno, ¿no es esto una sorpresa agradable. Tus oídos son sensibles, ¿eh?

-...!,No lo harías, Elichi.- dijo nozomi con una voz entre nerviosa.

Ahora su expresión es tan peligrosa como la de Eli. A primera vista, cualquiera pensaría que estaban teniendo un enfrentamiento, desafiándose cara a cara, con toda esa expresión de miedo y sonrisas oscuras y sombrías.

-¿Qué te hace pensar que no lo haría, Nozomi?- La mano de Eli estaba cerca de su oreja.

-No vayas allí, Elichi - Nozomi reprendió. Su rostro se estaba poniendo más sombrío.

-Buen intento, Nozomi. Pero eso no me va a asustar. - Eli rió disimuladamente.

Ambas manos de Eli tocaron implacablemente la oreja de Nozomi al mismo tiempo, haciendo que todo su cuerpo se estremeciera ante dicho contacto. Como si eso no fuera lo suficientemente gratificante, Eli se inclinó para besar a Nozomi. Desafortunadamente, Nozomi rápidamente lo desvió mientras se deslizaba de forma impredecible y rápidamente se puso de pie, sin perder tiempo en huir antes de que Eli pudiera reaccionar.

-¡Oye! ¡Nozomi! ¡Detente allí!- Eli la llamó.

¡Hoy no, Elichi! Nozomi corrió tan rápido como pudo, mientras trataba de recordar el mejor lugar para esconderse en la escuela.

Bromas TraviesasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora