Justo ahora estamos desayunando.
El plato de fruta hace que sonria.-¿Que te ha hecho?-mi vista se posa en su rostro molesto. Mis dedos pican y siento como mi garganta se cierra poco a poco negandome el exógeno.
-El infierno no es igual a mi reino, el infierno está abajo de mi reino, en el, la única cosa que conoces es el dolor- murmuró. Su vista se posa en mi rostro y sé que intenta leerme. Simplemente mi corazón late cuando el está cerca y lo sabe.
-¿Haz ido al infierno?-aclaro mi garganta. Su noto es molesto y profundo. Suspiró entrecortada.
-Si- susurro. El golpea el muro-Perdí mi humanidad ahí, aunque la recuperé- sonrió un poco.
Eres tan patética, te mataron pero te enpeñas en seguir respirarando.
-No te volverá a dañar, lo juro-toma mi mano y la besa. Cada vez que me toca es gratificante, me siento viva, querida.
-No me importa si me daña, pero nunca más te hará daño-asiento un poco convencida.
-¿Cuanto tiempo?- un nudo se instala en mi garganta.
-Desde que cai del cielo, ahí me convertí en demonio-mi mirada inexpresiva hace que el asienta serio.
-¿Por que lo hizo?-suspiro.
-Por que los tenía que hacer sufrir, por mi bien- me aclaro la garganta- nunca quise convertirme en esto, pero era la única forma de vivir.
-¿Lo odias?- una lágrima cae pero la limpió. Odiar a la persona que te destruyó, es obligatorio.
-Si-susurro, me levanto y me voy.
-Lo siento- solo lo escucho antes de irme.
Camino por los jardines cuando chocó con alguien.
-venus- me quedo congelada.
-reina- hago reverencia a mi madre y intento seguir mi camino pero me toma de la mano, en un instante el fuego viene a mi, dándole un flamazo haciendo que me suelte.
-hija- susurra.
-ahora si soy tu hija?- rio incrédula- no te atravas a llamarme asi- ella me mira dolida.
-hija- déjame explicarte- suelto una carcajada.
-que me expliques que? Eh? Cómo me torturaron y sentenciaron injustamente delante de ti y tu, no hiciste nada? Me explicarás lo mucho que rogue para que me escucharán pero, nisiquiera tú lo hiciste? Enserio?- miro al cielo- hubiera preferido morir a que conocer a papá- mascullo.
-lo siento- solloza y por solo un instante siento su dolor el cual se esfuma al recordar cuando me expulsaron.
-yo igual- la dejo ahí y sigo mi camino.
-Entro a empujones al sótano del palacio, es otro reino, es, el infierno.
Los temblores de mi cuerpo son cada vez más notorios, observo como todo el lugar está a oscuras, las paredes están cubiertas por sangre, hay jaulas donde las almas imploran salir, hay habitaciones, donde cada humano, se crea su propio informo, pueden salir cuando quieren pero la culpa hace que se creen ese infierno -cada quién se crea su propio infierno-
Lucifer me empuja y observo una puerta, esta es blanca, el piso se ve teñido también de sangre, mis sollozos no dejan de sonar, su agarre en mi brazo es cada vez más fuerte. Observo cuadros en las paredes, de mi madre.... Entramos a la puerta y la cierra con seguro.-Te convertirse en el ángel del infierno- su sonrisa malévola hace que un sollozo salga de mis labios.
-No papá por favor no quiero- toma mis mejillas y me observa detenidamente.
-Les dijimos lo mismo, y no escucharon- desgarra mi blusa dejando expuestas mis heridas, con la llema de los dedos las toca, haciendo que el escosor aparezca.
-Creeme que también me gustan mis alas- sonríe con nostalgia.
-Te daré alas- me quedo quieta.
Siento como poco a poco me muerde en el cuello, el escosar aparece de inmediato.
-¡Me convertiste en un demonio!- grito.
El sonrie.Se acerca rápidamente a mi y me da una bofetada. Mis alas salen, negras, como el carbon, mi piel se torna más blanca y siento como las lágrimas caen negras.
-Para salir del infierno Astartea, tendras que torturar a cada alma penada de aquí pero antes, te torturare a ti-
ESTÁS LEYENDO
La Reina De Los Demonios.
WerwolfVenus, hija de los reyes de los angeles, es senteciada a que le corten sus alas por su pecado, desterrandola de puebla de los angeles, se convertira en la reina de los demonios, gracias a lucifer. "Yo me enamore de sus demonios, ella de mi oscuridad...