D e l i r o n ú m e r o 1

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Su mirada perdió.
Su gracia se alejó.
Y por dentro se rompió.

Resistir intentó.
Pero la ira en ella se expandió.
Y graves actos cometió.

Ya no le quedaba nada.
Solo un trozo de explanada.
En el que tomar limonada.

Sus cicatrices la honraban.
Eran parte de los que batallaban.
Y no de los que soltaban.

Un lugar en lo alto la esperaba.
Ese en el que por fin podría estar relajada.
Alucinando con una hada

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