Lujuria |COMPLETA|

Capítulo 21

JAZMÍN POV

Perdí la noción del tiempo, solo desperté debido a los rayos de sol que entraban por la ventana... Miré hacia abajo y estaba desnuda solo cubierta por una sábana blanca. Miré hacia todos lados y Florencia no estaba... ¡Anoche fue maravilloso! Me cubrí con la sábana y caminé por la casa buscándola, la encontré en la cocina.

-Buenos días...-la abracé por detrás.

-Hey, quería llevarte el desayuno a la cama...-sonrió.

-Si quieres puedo regresar a la cama y fingir que nada de esto pasó aún-reímos.

-Será mejor que te des una buena ducha y te vistas, Miranda y Carla no tardan en llegar, amor...

-Sí, eso haré. Quiero darle una buena primera impresión a tu pequeña hermana-sonreí- Espera, ¿me dijiste amor?.

-¿Qué?

-Sí, lo dijiste...

-Perdón.

-No tienes que pedir perdón, amor-la abracé fuerte y ella colocó su manos entrelazándolas con las mías.

-Eres todo lo que necesito, Jazmín...-entonces, le di un beso en la mejilla.

-Y tú eres todo lo que yo necesito y lo que siempre necesitaré.

-Tengo miedo...

-¿A qué?

-No hemos sabido de Federico en toda esta semana.

-Eso no importa, deberíamos estar contentas de no saber de su existencia, ¿no?

-Es que todo es muy raro, por un momento se desvivía por saber de tu paradero, ahora no sabemos si es que sigue vivo.

- Piensas que trama algo, ¿verdad?

-No solo eso, es ese presentimiento que debemos hacer algo... Buscar protección y todo eso que es más que necesario ahora.

-¿Protección?

-A alguien que tenga tanto como él y pueda darnos una mano, digo... Buscar personas o averiguar maneras de lidiar con lo de tu hermano, es un asunto muy importante. Federico siempre te amenaza con eso, si tu hermano no estuviese en una de sus clínicas no tendría con qué retenerte.

-Cierto, pero eso podemos verlo luego ahora solo quiero abrazarte y decirte lo hermosa que te ves así por las mañanas luego de una muy buena noche...

-Jazmín, esto es en serio...

-Está bien, veamos... ¿A quién podríamos pedirle ayuda?

-No sé la verdad...

-Entonces, no pensemos en eso ahora.

-Claro que sí, debemos pensar en eso justo ahora. ¿Cómo sabes que tu hermano está bien?

-Porque mi mamá y mi hermana van a verlo todos los días y siempre me envían un mensaje. El de esta mañana ya me llegó y todo está bien. No hay rastros de Federico; odio tener que vivir pensando en que él puede hacernos daño y no disfrutar de estos pequeños momentos de felicidad...

-Está bien, te entiendo. Por ahora tienes todo en orden, pero pensemos un poco. Me refiero a que es momento de proyectarnos, de planificar nuestro futuro.

-¿Nuestro futuro?

-Sí, ya sabes... Si vamos a vivir juntas y hacer una vida...

-Una vida...?

-Sí, Jazmín...

-No sé si pueda con todo esto, dices muchas cosas y no entiendo...

-¿Qué no entiendes?