Temporada 1 "Comienzo Tortuoso"

15. Sobresalir

Narra Nya

Jay sigue recuperándose en el hospital, ya lleva una semana desde lo ocurrido.

Ya hemos enfrentando a Garmadon varias veces, pero nunca logramos atraparlo. El Sensei nos ha puesto a entrenar más de lo normal, y eso nos tiene muy exhaustos. Ya habían pasado varias horas desde que inició en entrenamiento...

Kai: *Respirando muy rápido* ¿Ya casi se termina esto? ¡Llevamos entrenado toda la vida!

Nya: No seas exagerado, no llevamos toda la vida entrenado.

Kai: ¡Sarcasmo, hermanita!

Nya: ¡Si, ya sé!

Kai: ¿Entonces?

Cole: Chicos, luego discuten. Entre más se tarden, será menos rápido terminar con el entrenamiento.

Zane: Chicos, Cole tiene razón. Entre más se tarden en terminar, más largo se va a hacer esto.

Kai: Si, claro.

Nya: Ajá, lo que tu digas...

Cole: Ash, ¿qué haremos con ustedes dos?

Paso un rato mientras todos terminábamos nuestros ejercicios. Habiendo concluido, nos dirigimos a la sala de descanso (imaginen que hay una, ¿OK?).

Sensei Wu: Bien estudiantes, lo hicieron bien hoy, pero les falta más energía. Yo sé que lo pueden hacer mejor.

Kai: Si, Sensei. Lo que pasa es que somos solo cuarto, Jay se está recuperando. Hemos entrenado hasta el cansancio. ¿Cómo no quiere que terminemos casi muertos?

Zane: Odio decirlo pero Kai tiene razón.

Kai: Gracias... Hey, ¡oye!

Zane: ¿Qué? El punto, Sensei, es que hemos estado haciendo las cosas mas rápido de lo normal y nos cansamos. Además tiene que recordar que somos niños y necesitamos un descanso.

Wu: *Tomando su barba* Eso lo entiendo, pero con su hermano en el hospital y con Garmadon atacando a la ciudad, lo que me queda es exigirles más de lo normal.

No estábamos muy de acuerdo con el Sensei, pero tuvimos que conformarnos con esa respuesta. Nos tomamos un ligero descanso y después fuimos afuera. Decidimos terminar con el entrenamiento de hoy pero no contábamos con lo que pasaría después. La alarma comenzó a sonar. Nos asustamos por la sorpresa y fuimos corriendo a revisar que estaba ocurriendo.

Nya: ¿Qué pasa?

Kai: Parece que un edificio comienza a incendiarse.

Cole: ¿De donde proviene el incendio?

Zane: Parece que es en el centro de Ciudad Ninjago.

Kai: ¡Pues entonces vamos!

• • •

Narra Kai

No perdimos tiempo y fuimos directo a donde estaba el problema. No teníamos duda alguna que la culpa es de Garmadon, el ha estado apareciendo bastante estos últimos días así que no nos sorprendería tanto el echo de que el haya echo esto. Esta sería  mi oportunidad de destacar en el equipo, siendo el ninja del fuego creo que tengo esta situación bajo control. 

Llegamos a la ciudad y nos visualizaron muy rápido. Toda la gente de Ninjago comenzó a aplaudirnos ya que nos consideraban sus héroes, y siendo sincero me siento un poco incomodo cuando pasa eso. Como lo supusimos Garmadon había echo esto.

Kai: ¡¡Garmadon te tenemos rodeado!! 

Nya: ¡Chicos, vayan a ayudar a las personas que sigan dentro! ¡Kai y yo tenemos esto!

Cole y Zane: Si, estamos en eso.

Garmadon: Jaja, ¿ enserio creen poder detener esto ustedes solos? ¡Son solo niños! ¡Nunca me han logrado atrapar!

Kai: Tal vez seamos niños, pero también somos los...

Garmadon: *Imitando la voz de Kai* ...somos los descendientes de los maestros elementales. Si claro, ¿recuerdan la primera vez que los vi? ¡Su hermano casi muere! ¿No sería mejor que me dejaran en paz? Claro, si es que no quieren que alguien mas salga lastimado.

Nya: ¡Dinos todo lo que quieras, pero no nos vamos a rendir!

Kai: ¡Porque un ninja nunca se rinde!

Garmadon: Ahh, si solo se escucharan ahora mismo, parecen un montón de inútiles haciendo el ridículo enfrente del mundo. Dejen de tratar de ser héroes, ya vi lo que realmente son... un montón de mocosos.

Me enoje con los comentarios que el estaba haciendo. Encendí una esfera de fuego en mi mano listo para atacar. Nya hizo lo mismo. No esperamos ni un segundo más y corrimos hacia el, comenzamos a atacarlo pero eso empeoró el incendio, nos distrajimos por una pequeña explosión de fuego que hubo en el edificio. Garmadon comenzó a correr lejos de nosotros, no dejaré que se vuelva a escapar...

Kai: ¡Nya intenta apagar el fuego yo iré tras Garmadon!

Nya: ¡No, Kai! ¡Hay que permanecer juntos!

Kai: Descuida, estaré bien. Lo prometo.

Nya solo asintió, yo salí disparado hacia él. No dejaría que se fuera, no de nuevo. Corrí lo más rápido que mis piernas me permitieron. Lo estaba perdiendo y mi velocidad disminuía. Me armé valor y energía, de la poca que me quedaba, y seguí persiguiéndolo. Intentaba atacarlo con mi poder, pero el esquivaba fácilmente mis ataques. De repente él sacó un arma,me apuntó yo me detuve en seco al ver que apuntaba a mi cabeza.

Garmadon: Déjate de tonterías, niño. Ahora vete de aquí si no quieres salir herido.

Kai: Oye, ¿en serio dispararías esa arma? ¿A un niño de la edad de tu hijo? ¡Le dispararías a tu hijo?!

Vi que Garmadon agachó la cabeza, pero en seguida la levantó. Tenía lágrimas en los ojos, en ellos se podía presenciar su dolor. Cargó el arma y disparó. La bala apenas rosó mi brazo.

Garmadon: No vuelvas a mencionar a mi hijo, ¿escuchaste?

El se veía más desquiciado y amenazante. Se veía lleno de dolor.

Garmadon: ¡¿Entendiste?!

Kai: Si...

Garmadon usó una especie de poder que tenía y oscureció todo a nuestro alrededor. ¡¿También era un maestro elemental?! Encendí mi puño para alumbrarme, pero apenas lo hice y toda la oscuridad desapareció al igual que Garmadon. 

Nya: ¡Kai!

Nya se aferró fuertemente a mi cintura, abrazándome. Sentí sus lágrimas empapar mi traje.

Nya: Creí que te había perdido.

Kai: No te preocupes, aquí estoy. No me voy a ir.

Zane: ¡Kai!

Cole: Hermano, creímos que habías muerto.

Kai: Tranquilos, este chico vino para quedarse. *Se acomoda el cabello*

Cole: Típico de Kai.

Zane: ¿Lograste detener a Garmadon?

Kai: Lamentablemente, Garmadon sigue suelto en las calles. Y descubrí otra cosa, es un maestro elemental.

Todos parecían sorprendidos. Les relaté lo que ocurrió.

Cole: Chicos, volvamos a casa. Ha sido suficiente por hoy.

Nya: Hay que ir a ver a Jay.

Zane: Bueno, vayamos a ver a Jay.

Todos fuimos al hospital en donde se encontraba nuestro amigo. Habíamos perdido... otra vez.