3. Días, semanas, meses, años...

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4 años después...

Narra Malcom

Ya ha pasado mucho tiempo desde que traje al mocoso aquí. Le enseñe a caminar, hablar y creo que lo demás que debe saber un niño. Me alegra aún no haber enloquecido. Estos 4 años han sido una pesadilla para mí debido a que Montgomery ya puede escapar más fácilmente, así que le compré una cerradura nueva a la puerta lo que hace que sea más difícil abrirla.

Narra Lloyd

Desperté luego de una larga siesta esperando que todo haya sido una pesadilla. Pero seguía estando en este horrible lugar sucio y oscuro. Odio estar aquí, odio a Malcom. Solo quiero conocer lo que hay tras esa puerta.

Narra Malcom

Bajé las escaleras de madera del sótano con una charola de comida en mis manos cerrando la puerta detrás de mí y lo vi ahí sentado encima de su colchón. Estaba muy delgado. Dejé la comida sobre la mesa y el se acercó hambriento.

Lloyd: Papá, ¿cuándo podré salir de aquí?

Malcom: Ya te lo he dicho muchas veces, Montgomery.

Lloyd: Pero yo quiero ver qué hay afuera.

Malcom: No tengo tiempo para esto.

Me levanté de mi asiento y escuché una respiración entrecortada. Tomé el inhalador del rubio y le ayude a respirar bien de nuevo.

Malcom: Si sales de aquí, no podrás respirar bien. Allá afuera el aire es tóxico.

Lloyd: ¿Y tú por qué si puedes salir?

Malcom: Porque yo ya estoy acostumbrado. Tú no.

Lloyd: ¡Yo quiero ser libre!

Malcom: ¡No me subas el tono de voz, jovencito! ¡He dicho que no, y punto!

Comencé a subir los escalones de madera. A cada paso que daba, estos rechinaban. En cuanto llegué hasta arriba, abrí la puerta y la cerré detrás de mí. Menos mal que vivo en una montaña, de lo contrario, la gente sospecharía de mis gritos. Subí al auto y me fui al trabajo.

Narra Lloyd

Después de que Malcom se fuera, subí las escaleras y traté de abrir la puerta. Era algo imposible. Debía pensar en algo para escapar y ser libre. Guardé mi comida y mi inhalador para tener energías cuando corriera lejos de aquí. Analicé el sótano. Abajo de las escaleras parecía solo haber botes de pintura vacíos. Ya tenía un plan.

Fui debajo de las escaleras y acomodé los botes de tal manera que yo cupiera ahí dentro. Me escondí entre todos ellos. Esperé a que Malcom llegará. Pasaron varias horas, así que comencé a comer un poco y a entretenerme con un extraño poder que tenía. Eran como esferas de luz verde y las podía usar para atacar o defenderme.

Estaba por quedarme dormido hasta que escuché el sonido de la puerta abriéndose. El momento había llegado. Me escondí bien y escuché cada paso que el daba. Mi sangre comenzaba a helarse.

Narra Malcom

Bajé las escaleras con otra charola de comida y vi que Montgomery no estaba. Toda la comida se cayó de mis manos y comencé a buscarlo en todo el sótano, no pudo haberse escapado. No lo encontré. Tomé una linterna, salí de mi casa y fui a buscarlo al bosque.

Malcom: ¡Montgomery!

Maldito mocoso, va a hacer que mi padre me asesine.

Narra Lloyd

El plan había funcionado a la perfección. Tomé la comida que se le había caído y salí del sótano decidido. Vi que nadie estaba por ahí y salí corriendo a la oscuridad. ¿El mundo era así de oscuro? No miraba por donde corría, pero no voltearía a ver atrás de mi. Corrí sin detenerme. Estaba muy asustado. Me detuve en una parte donde habían varias siluetas gigantes quietas. Me escondí entre ellas.

Veía algunas luces blancas que parpadeaban encima de mi. Era algo maravilloso, como un sueño. Por un momento, me sentí feliz. Había una luz mas grande que las demás, era enorme. Sentí mi respiración más pesada, pero no podía dejar de mirar las luces.

X: ¡Montgomery!

Volteé a mi izquierda y vi que una luz se acercaba a mi. Sentí mis parpados pesados y todo se volvió completamente oscuro.

Narra Malcom

Después de varios minutos que me parecieron horas, lo había encontrado mirando las estrellas y la luna completamente maravillado. Lo llamé y volteó a verme, pero cayó al suelo. Me acerqué corriendo a el.

Malcom: No, no, no, Montgomery. Aún no es tu momento. *Vi su inhalador, lo tomé y lo ayudé a respirar* Vamos, niño, hablame.

*Lloyd comienza a toser*

Lloyd: ¿Papá?

Lo miré muy molesto. Lo cargué y lo llevé de vuelta a casa.

Lloyd: Oye, ¿ya viste esas luces? Son maravillosas.

Malcom: *Muy molesto* Se llaman estrellas.

Lo cargué de vuelta al sótano cerrando la puerta detrás de mí.

Temporada 1 "Comienzo Tortuoso"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora