capítulo 12

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Personaje hablando: "hola"
Personaje pensando: umm
Dios hablando:"bien hecho"
Dios pensando: ese es mi elegido
Habilidades: [robo]
Sonidos/acciones: *ruido de la puerta*

        ________ Pov Mia _______

Pasé casi toda la noche muy preocupada por Saeki, el muy imprudente se fue a la montaña incluso cuando el me dijo que nunca hay que entrar por la noche.

Al final pasé la noche en su casa y terminé durmiendo en su cuarto. Una vez estuve aquí pero digamos que no presté mucha atención *recordando y poniéndose roja*.

Su habitación es más grande que el resto de la mansión y la decoración es hermosa. Las paredes son rojas con rombos decorandolas, el techo es de un gris opaco y se ven bien los materiales con los que construyeron y el candelabro que cuelga del techo crea muy buen ambiente.

También tiene un escritorio donde hay muchas hojas dispersas jeje el siempre tan desordenado.

Fui a ordenar sus hojas y me sorprendí por lo que ví.

Mía: "Notas para crear nuevos hechizos".

"Espada infernal: concentra maná al rededor de la mano. Una vez logrado eso aplicar elemento infierno, luego agregar más maná y moldearlo en una hoja. Completado".

"Explosión ignea: crear una bola de aire comprimido, rodearlo de una capa de fuego y lanzarlo. Al llegar a su objetivo dar una pulsación de maná y para que el aire comprimido se libere completando el hechizo. Incompleto".

Mía: "Y pensar que nunca pone atención en clases y siempre se la pasa escribiendo estas fórmulas, sin duda es el mejor".

Dejé sus notas ya que son sus creaciones y fui al baño.

Como todo en esta habitación, es muy grande. Es como 3 o 4 veces más grande que uno normal y su tina se puede comparar en tamaño con unas aguas termales.

Me bañé y fui a vestirme... Ahh esta es la habitación de Saeki así que tiene su ropa, no la mía. Pero me da curiosidad ver su guarda ropas.

Abrí una de las puertas del gran ropero y lo que encontré fue... Mi ropa. Parece que dejó su ropa en otro lugar.

Abrí la otra puerta y ahí encontré lo que buscaba. Estaba toda la ropa de Saeki. Camisetas, trajes, pantalones, botas, todo bien ordenado. Seguro Lusha-san ordenó esto, pero no encontré su ropa interior... No es que la haya buscado en primer lugar ni siquiera pensé en querer verla y llevarmela a mi casa.

Bueno, luego de pensar en las cosas que no haría me vestí como normalmente lo hago ya que hace un tiempo ya traje ropas normales por si me quedaba a dormir.

Bajé y desayuné, pero cuando iba a salir alguien me llamó deteniendome.

Elena: "Mia-chan ¿Vas para el colegio?".

Mía: "Si, salgo ahora porque no quiero llegar tarde".

Elena: "¿Podría acompañarte? Así me cuentas más de Saeki".

Mía: "Claro, no tengo problemas en que me acompañe".

Y salimos en su carruaje blanco. Durante el camino estuvimos hablando mucho de sus gustos y otros momentos que compartí con el pero como siempre dije una palabra de más y eso se ganó una pregunta incómoda.

Elena: "¿Así que ya lo viste desnudo eh? Eres más rápida de lo que pensaba" *riendo entre dientes*.

Mía: "F-fu-fue un ac-accidente. Y-yo pensé q-que el se-seguia dormido" *toda roja y con un chorrito de sangre saliendo de su nariz*.

rencarnando en un mundo de fantasíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora