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El papel y el boli están en la mesa, la maleta encima de la cama, y yo, parada en frente de la habitación, me recorren miles de sentimientos al estar a punto de vivir, y solo me queda volver a escribirte, la última vez que te escribo.

Ya deje de hacer de ti poesia, de seguir construyendo sueños que se quedan en un ojalá porque tu no estas, de seguir saliendo a pasear a las 2 a.m con la intención de buscarte en alguna que otra canción.

Y si alguna vez, te vuelvo a ver, seguiré pensando que tienes la sonrisa más bonita que he visto, que adore cada centímetro de ti.

No es una despedida, porque sabes de sobra que las odio y que soy incapaz de despedirme de ti, aunque aún no se como decirte adiós, aun no se como cerrarme la herida que me dejaste.

Pero ey, no estés triste, me sobran las ganas para ganarle el pulso a lo que venga, seguiré siendo yo, y espero, que el día que sepas que será de mi,  te sientas el chico más orgulloso de lo que conseguí, así que gracias, por regalarme todo el tiempo que me has regalado, ojalá te vuelva a ver, aunque sea en otra vida.

Hasta pronto.

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⏰ Última actualización: Aug 20, 2018 ⏰

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